Éxtasis (5)

Luna 29

La diosa René.

(Pvo René).

René: (narrando)–me estaba preparando para darle a Lili la última bendición de cumpleaños ya que a los ocho sería conciderada adolescente y su poder verdadero despertaría, el poder para terminar con el mundo y llevarlo a una nueva era. Ya tenía a un héroe pero necesitaba a un rey demonio para equilibrar el panorama, ellos pelearían para determinar el destino del mundo.

Alicie: ¡ya dame mí pago por actualizar a los cinco guías!

René: aquí está lo que me pediste, la máscara con parche que tanto deseabas.

Alicie: ¿que harás de ahora en adelante?

René: ¡guiaré a mi héroe hacia su salvación o perdición, lo que suceda primero!

René: (narrando)–me despedí de Alicie y bajé al mundo terrenal...desperté bajo la sombra de un árbol, lo único malo de bajar y al mundo terrenal es que ahora tengo un cuerpo físico que tiene necesidades básicas como comer o dormir además de que mi poder se reduce al de un semi–dios para evitar que el mundo colapse.

René: muy bien, ¿dónde está la ciudad?....allí debe ser la ciudad de las succubos, pediré que me acerquen a la academia.

René: (narrando)–caminé unos cuantos kilómetros hasta llegar a la ciudad, allí pude ver una gran cantidad de personas y criaturas pero como tenía prisa no podía quedarme a disfrutar del paisaje. Llegué al castillo donde ya me estaba esperando Vania con un grupo de mucamas.

René: ¡hola pequeña Vania, ya han pasado varios años desde que no nos veíamos!

Vania: ¡llegas en muy mal momento, las puertas del abismo fueron abiertas accidente por mi bebé y una centípeda escapó. Temo que algo malo le suceda así que por el momento no puedo atenderte como se debe!

René: ¡es muy malo, las puertas no deberían poder abrirse hasta que ella cumpla dieciseis....tal vez mis cálculos fueron erróneos y ella tenga más poder del que pueda manejar. Mis bendiciones solo canalizan su poder para evitar que explote pero habrá que preparar algo muy potente para su cumpleaños....algo que pueda canalizar su poder de maldiciones....su familiar tendrá que ser!

Vania: (preocupada)–¡no, debe haber algo mejor. Un familiar es parte de una succubo, una forma de vida que comparten nuestro ser y nuestra fuerza, si el familiar no sobrevive al poder de Lili ella no podría recuperarse del daño!

René: (enojada)–¡piensa piensa piensa ya tonto cerebro......ojalá tuvieran más de un familiar....más de un familiar!

Vania: las succubos poseen un único familiar, eso es imposible.

René: ¡Lili no sólo es una succubo, es la primera que nació con genes humanos los cuales retiran los limitadores de toda especie así que si creo una bendición me es posible hacer algo!

René: (narrando)–decidí usar mi heraldo, un dragón dorado de alas blancas y emplumadas para ir a la academia. No me gusta usarlo ya que es posible causar una gran conmoción pero no hay de otra, llegué rápidamente a la academia cuando ya era de noche y descendí hasta el cuarto de dos chicos. Paralicé a uno de los chicos y entré por la ventana.

Lucio: (sorprendido)–¡René–sama, ¿que está haciendo aquí?!

René: necesitaba hablar de cosas muy importantes.
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