Éxtasis (5)

Luna 34

El plan de una diosa para el mundo.

Lilineth: (sorprendida)–¡René, ¿cuánto tiempo has estado ahí?!

René: apenas llegué, pero igualmente presencié todo, ¿así que realmente disfrutas de tu nueva vida?

Lilineth: (sonrojada)–¡cállate, ¿que es lo que quieres?!

René: que el mundo cambie, el mundo está estancado pero si algo sucede, si alguien pudiera guiarlo hacia un nuevo amanecer realmente el mundo despertaría y cambiaria.

Lilineth: ¡y ¿eso que tiene que ver con mígo y con esta piedra?!

René: dime, ¿que sabes de los Uranos y Gaias?

Lilineth: ¿que son?

René: , así que nada, bueno, para resumirlo son simplemente partes del corazón y la sangre del rey demonio, la gema que tienes es el Gaia de la lujuria, Lust's  amesthys, ni si quiera yo sé que poderes tiene pero si Asmodeus. Lo que tienes que hacer ahora en adelante es reunir los Gaias y Uranos para poder completar tu ser.

Lilineth: ¡¿que quieres decir con completar mi ser?!

René: ¿alguna vez te has preguntado el por qué no vives con tus abuelas en el castillo?, después de todo ellas te quieren y se obsesionan con tigo.

Lilineth: siempre me pareció raro, ¿por que?

René: Asmodeus tiene que vigilar algo importante, pero tú abuela Lim, no pude permanecer lejos de este mundo mucho tiempo o si no se puede morir.

Lilineth: (sorprendida)–¡¿por qué sucede eso?!

René: ¡cuando sellaron al rey demonio a través de su linaje, la fuerza vital de todos los relacionados con su sangre también recibieron parte de ese sello lo cual les impide vivir lejos de este mundo por no más de unos días!

Lilineth: ¡¿existe alguna contra medida o solución?!

René: ¡reúne los Gaias y Uranos y liberarás a tu madre y abuela de su destino. Antes de irme te advierto que a tu madre solo le quedan unos tres años antes de quedar confinada a este castillo.

Lilineth: (narrando)–ella se fue sin dejar algún rastro, ahora que sabía esta verdad tenía que esforzarme por reunir éstos objetos y traerlos con mígo, tengo la lujuria y el amor así que solo me faltan siete de cada grupo, definitivamente los voy a reunir. Salí de mi cuarto junto con Misstres y allí estaba mi madre junto con Franchesca y un lince.

Franchesca: ¡veo que tú familiar es una gatita y el mío un gato grande, se nota tu deseo de ser sometida por mí!

Lilineth: (furiosa)–¡claro que no estúpida, ten un golpe en la cabeza a ver si se te cuadran las ideas!

Vania: ¡al menos ya te vez mejor mi bebé, ¿ya pudiste reflexionar bien?!

Lilineth: (sonrojada)–si, yo...ya pensé todo lo que necesitaba...por cierto, ahora que lo noto ti estómago se vé un poco más grande.

Vania: (nerviosa)– ¡bueno...verás...estoy...tu...yo..

Alequia: (molesta)–¡ya solo dilo!

Vania: (sonrojada)–¡estoy embarazada, vaz a tener una hermanita!

Lilineth: (sorprendida)–¡hhheeeee.....

(Pvo René).

René: ya planté la semilla del orden y la semilla del caos, ahora hay que ver cómo se desarrolla el mundo, sin importar quien gane solo quedará la justicia...porque el que gane decidirá que es la justicia.
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