Éxtasis (5)

Luna 57

Encuentro predestinado.

Lilineth: (narrando)–ya estaba atardeciéndo y el cielo se volvía naranja, estábamos reuniendo madera de la playa para formar una fogata además de que Erika trajo unos troncos para usarlos como banca.

Lilineth: ¿alguien tiene una historia para contar?

Vania: ¡yo tengo una!

Lilineth: ¿no se supone que estabas ocupada?

Vania: pero nunca estoy ocupada cuando se trata de tí.

Lilineth: está bien, cuenta tu historia.

Vania: la piedra de los enamorados es una gran roca donde se dedican altares a la diosa del amor Liebis, se dice que en esa misma roca ella se enamoró de la diosa René y allí le declaró matrimonio.

Philia: (suspirando)-¡eso es hermoso, ojalá me pasara a mí pero yo ya tengo a mi amada!

Erika: (suspirando)-¡que romántico, declararse a alguien en el mismo lugar en el que se conocieron!

Lilineth: ¿realmente creen en esa curcilería?

Vania: de echo esa roca está en aquella isla y cada cierto tiempo las personas que buscan amor van a la roca donde piden a las diosas que los guíen.

Lilineth: (pensamientos)–¡es seguro que René juegue con sus corazones, pobre del que valla a esa piedra!

Vania: ¡y es por eso que iremos ya mismo!

Lilineth: (sorprendida)–¡¿queeeeeee.....

Vania: ¡así como lo oyes, ya mismo hay un bote esperando con una linda capitana a bordo!

Lilineth: (nerviosa)–¡entonces que se divier...

Lilineth: (narrando)–de repente Franchesca y Philia sujetaron mis brazos y me alzaron.

Philia: (babeando)–¡no puedo esperar a ir con Lili!

Franchesca: (babeando)–¡tener la oportunidad de tomar fotos de Lili enamorada es una oportunidad que no puedo perder!

Lilineth: (narrando)–las dos tenían una mirada llena de emoción, fuí arrastrada mientras gritaba y me resistía lo cual fue inútil, descubrí que realmente mi fuerza física era nula contra ellas cuando se ponían tan obsesivas. El bote era un barco pequeño echo de madera e impulsado por un motor de maná lo cual es raro de ver en cualquier reino distinto al reino enano y al reino succubo.

Lilineth: disculpe señorita, ¿de dónde sacó el motor?

Mar: siéntete libre de llamarme Mar ya que señorita suena un poco vergonzoso y con respecto al motor me lo dió el centro de investigación de Aphys, generalmente envían muchos artefactos de prueba a distintos lugares por lo que tuve suerte de poder conservarlo.

Vania: (emocionada)–¡eso es lo correcto, el compartir el conocimiento de manera libre es muy importante para nuestro reino, en especial si hay una amable dama como ella de por medio!

Lilineth: claramente tus intenciones son otras.

Vania: ¡es cierto, quiero que ella sea la capitana de nuestra nave insignia en un futuro!

Mar: (nerviosa)–¡no puedo aceptar una propuesta así, yo apenas tengo dieciséis

Vanina: ¡piénsalo y al final del mes puedes darme una respuesta concreta!

Mar: ....está bien.

Lilineth: (narrando)–el sol terminó de ocultarse y nosotras llegamos al puerto de la isla, la ciudad portuaria de la isla era muy limpia y organizada como uno esperaría de una gran nación y aunque la ciudad era grande esta no ocupaba ni un quinto de la isla.

Mar: ¡la ciudad es increíblemente grande así que no se separen!

Philia: ¡Lili, ésta es la ciudad portuaria de Oxen y es utilizada para importar y exportar hacia otros países, ¿te impresiona?!

Lilineth: (sorprendida)–¡sí, realmente es impresionante el avance que pueden hacer!

Mar: la isla está muy cerca de la costa del país así que es considerada su territorio aunque hay nativos de la isla que no lo consideran así por lo que les recomiendo que mantengan alejadas del centro de la isla ya que se cree que hay criaturas muy peligrosas allí.

Lilineth: ¡ésa si hubiera sído una buena historia para la fogata!

Lilineth: (narrando)–caminamos por la ciudad durante unos minutos observando el paisaje y luego fuimos a la playa la cual era ocupada por varias parejas dando un ambiente romántico.

Mar: las playas de la isla están llenas en las noches de luna llena así que tengan cuidado de no perderse en la multitud.

Vania: ¡es momento de que mi bebé vea a su madre en acción!

Lilineth: (narrando)–me escabullí en secreto mientras todas estaban distraídas e intenté regresar a la ciudad pero un grupo de personas me arrastró hasta el otro lado de la playa.

Lilineth: (molesta)–¡rayos, estoy demasiado lejos del puerto!

Lilineth: (narrando)–empecé a caminar por la playa para regresar a donde estaba pero a medio camino terminé cansada así que decidí parar y recuperar fuerzas, cerca de mí había una gran roca parecida a una banca que estaba adornada de velas y flores de todo tipo lo cual posiblemente era para que los amantes se sentaran, ya que no había nadie desidí sentarme.

Lilineth/?????: (suspirando)–¡ha, quedé demaciado lejos!

Lilineth: (narrando)–no había notado que alguien más se sentó al mismo tiempo que yo, era un chico de mi misma edad con un cabello rubio y un cuerpo delgado, por alguna extraña razón mi corazón no podía dejar de latir

?????: (nervioso)–¡lo siento, perdona si te he incomodádo!

Lilineth: (sonrojada)–¡no te preocupes, puedes quedarte si quieres....además no me has dicho tu nombre!

Ren: ¡soy Ren, es todo un gusto conocerte!

Lilineth: (sonrojada)–¡soy Lilineth, también es un gusto!

Lilineth: (narrando)–nos quedamos hablando el uno del otro como nuestros gustos y pasatiempos, estuvimos hablando durante una hora pero el tiempo no pasaba para nosotros, mientras más conversábamos más latía mi corazón y no podía aceptarlo.

Lilineth: (pensamientos)–¡el es muy lindo....pero yo no tengo esos gustos...simplemente es agradable es un amigo. Sí, él es solo un amigo...pero ¿que haré si él siente algo?, no creo poder rechazarlo!

Ren: ¿estás bien?, te vez muy roja.

Lilineth: (nerviosa)–¡sí, estoy bien, muy bien!

Ren: mi madre dice que un beso en la mejilla puede quitar cualquier enfermedad.

Lilibeth: (narrando)–él se estaba acercando a besar mi frente pero él se tropieza y en vez de besar mi frente, él termina besando mi boca.

Lilineth (pensamientos)–¡¿que rayos está haciendo?....pero aún así se siente increíble, su boca es dulce...su esencia es lo mejor que he probado!

Lilineth: (narrando)–sujeté sus hombros cada vez más fuerte y él tenía su cara roja lo cual lo hacía ver más adorable.

(Pvo Vania).

Vania: ¡ella encontró a su amor predestinado!

Philia: (furiosa)–¡desátenme ya mismo, ese estúpido niño no merece tener el corazón de Lili, lo voy a castrar en este mismo momento!

Vania: ¡déjalos un momento, es necesario para que su corazón madure!

Philia: (llorando)–¡quiero a mi Lili! T-T
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