Sweet Beginnings [JJK] COMPLETA

Capítulo 27

— No voy a irme—dijo JungKook por décima vez. Hace aproximadamente unos minutos que sus hyungs y su mánager habían llegado, ellos estaban en la oficina del director Kwang, el hombre también escuchaba con atención las palabras dichas por el mánager del grupo.

JungKook sería dado de alta del centro de rehabilitación por lo sucedido, resulta que tendrían que aclarar todo lo que estaba pasando y no podían hacerlo con él allí, JungKook conocía su deber de aclarar todo, pero no le parecía que era el modo, sus hyungs estaban sorprendidos de que el maknae por primera vez le llevara la contraria a la agencia.

— Querías irte en un principio—comentó su mánager mirándolo y luego al director—Debe firmar su alta, señor Kwang.

— No puedo irme, me faltan tres meses más para cumplir el año—interrumpió.

— JungKook, la agencia quiere lo mejor para ti.

— Lo sé, pero yo quiero lo mejor para SooMin también—nombró.

— ¿Sus padres han dicho algo? —inquirió Tae.

— Los señores Yeong vendrán en unas horas y probablemente discutan lo mismo—el director suspiró—No tengo problemas para dar de alta a los que llegan aquí, JungKook ha mostrado cierta mejoría...

— Si me voy, SooMin debe salir también.

— SooMin debe quedarse—lamentó decirlo—Sabes que anoche atacó a dos de sus compañeras...

— Ellas se metieron con Soo—defendió no muy contento—Señor Kwang, SooMin ha estado mejorando también...

— No puedo arriesgarme, JungKook.

Sintió una mano en su hombro, Jimin parecía indicarle con la mirada que se calmara.

— No quiero irme hasta que ellos decidan que harán con su hija—dictó.

[...]

SooMin estaba en el comedor a solas ya que el resto estaba en sus clases, pero por alguna razón Suzy la había dejado allí ordenándole que comiera para recuperar fuerzas, estaba con ropa limpia y se había duchado.

Justo cuando acababa de comer casi se atragantó con el jugo al ver que por la puerta del comedor aparecía una pareja.

Se levantó sin pensarlo dirigiéndose a ellos.

— ¿Mamá? ¿Papá? —temió lo peor—Ustedes... ¿Qué hacen aquí? No es día...de visita.

— ¿Por qué no nos dijiste que estabas saliendo con ese chico? —su padre fue el primero en hablar y ella quedó aturdida. ¿Saliendo, dijo? —Es perfecto para ti, me hubieras ahorrado todo ese drama, jovencita. Por eso no querías irte.

— No, yo...

— Y justo el día de tu cumpleaños, que oportuna eres—su madre acomodó su cabello—Varios reporteros se presentaron en casa queriendo saber sobre nuestra interesante hija, dime, ¿Dónde está ese chico maknae?

A SooMin no le sorprendía que sus padres ni siquiera le hayan dicho nada por su cumpleaños, ellos ni le enviaron algo por más pequeño que fuera, no podía sentirse más decepcionada.

— ¿Vinieron a conocerlo?

— Por supuesto que sí, debemos conocer a tu novio.

— No es mi novio.

— Vamos, SooMin, las fotos no mienten...

— ¡No es mi novio! —alzó la voz haciéndose escuchar, ambos adultos guardaron silencio—No tienen nada que hacer aquí, váyanse ahora, JungKook no está, ¡Lo que escucharon son chismes! Él y yo no somos nada, ¡Todo son chismes! ¡Lárguense!

Respiró algo agitada por hablar tan rápido, sus padres no se lo iban a tomar enserio y es que, en el momento menos indicado, los tres apreciaron a un chico de cabello castaño vistiendo pantalón deportivo, camisa de botones negra y Converse blancas mirar aquella escena.

SooMin quería asesinarlo por aparecer en el momento menos indicado.

— Señores Yeong—el chico hizo una reverencia.

— ¿No deberías estar en la oficina del director? —acusó ella.

— Estaba caminando por el pasillo y te escuché—miró a los adultos—El director los está esperando.

— Dijeron que habían venido a....—Soo fue interrumpida.

— Hablaremos con el director por supuesto—contestó su padre.

[...]

SooMin y JungKook veían a cada uno de los que hablaban, eran contadas las ocasiones que pedían su opinión, la chica no quería que él se fuera, de por sí ninguno de los dos quería dejar al otro allí. Se sentirían culpables de alguna forma. Por eso SooMin no dejaba de repetir lo mismo.

— JungKook y yo no tenemos nada, lo que se ven en esas fotos claramente no es claro, pero les juro que no tenemos nada, si vinimos aquí no fue para comenzar una relación amorosa—los miró muy seria. El señor Kwang se sentía mal por esa mentira, era claro que ellos dos tenían algo—Todos están dejándose llevar por información y difamaciones absurdas.

A JungKook le dolió escuchar aquello y aunque era bueno para la situación mentir...él no podía. NamJoon lo notó y TaeHyung supo que el maknae podía echarse a llorar ahí mismo, sus ojos brillaban.

— Sí—fue lo que dijo asintiendo, pero luego negó con la cabeza mirándolos—No creo que haya nada de malo en decida enamorarme de alguien, ¿Verdad? —miró a su mánager—En el contrato no dice que está prohibido.

— No lo dice, pero todo este escándalo no está siendo bueno para nadie, esta chica está recibiendo muchos mensajes de odio...

— ¿Eso es cierto, SooMin? —su madre la miró sin esperarlo. Era de suponer que no conocían la otra cara de la moneda.

— Sí, comentarios de niñas con hormonas alborotadas—le restó importancia.

— Esas niñas son nuestras fans—defendió Jimin.

— Pues que decepción de fandom—SooMin fue capaz de enfrentarlo—Enserio, es una lástima.

— Quiero acabar mi año aquí, quedan tres meses de mi estadía aquí—comentó—Cuando esto acabe...explicaré todo lo que quieran, pero por ahora voy a quedarme.

Hubo unos minutos de silencio, el señor Yeong por supuesto que llevaría la contraria.

— Director Kwang, queremos que SooMin salga antes de lo previsto.

— Papá, ¿Quieres que salga para que los reporteros tomen fotos y hagan preguntas sobre mí y JungKook? —levantó una de sus cejas—Voy a quedarme, llevo once meses aquí y sólo me falta uno más para acabar mi año.

JungKook debía decirle que era posible que ella debiera quedarse más tiempo.

Pero no sabía cómo hacerlo.

•••

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