¿Sera que alguien te podria ayudar a salir de la depresion? ¿Ayudarte a sobrellevarla? ¿A vivir con ansiedad?
Jason comienza a sentir cosas por el nuevo chico del centro psiquiatrico, cree que todo va bien, pero el chico tiene otros planes; no sabe...
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Desde el día en que supe que mi padre nunca volvería todo se oscureció para mí, para mi madre igual, trataba de sobrellevar mi pasado, sobrellevar el recuerdo de ese tormentoso día, ese terrible día, pero no era, no es fácil, hacerlo; cada noche al cerrar los ojos lo primero que venía a mi mente era esa noche, la misma terrible escena se reproducía una y otra vez en mi cabeza, a veces lo hacía incluso cuando está despierto, me atormentaba todo el tiempo. Poco a poco, el temor se fue transformando en algo peor, mucho peor, se transformó en depresión, y luego en ansiedad, y esta última consumió todo de mí.
Todos se preocupan por su salud física, absolutamente todos, incluso yo lo hago, porque es importante, pero pocas personas le ponen verdadera atención a su salud mental, y aunque no lo crean, llega a ser incluso más importante que la salud física; la depresión, la ansiedad, la bipolaridad, la distimia, el estrés, son cosas que te pueden matar al igual que lo haría un cáncer, un tumor, y algunas veces llega hasta ser más doloroso, mucho más.
Por ese motivo estaba aquí dentro, porque mi salud mental no estaba bien, de hecho no estaba para nada bien, el primer día fue difícil, lo es para todos en realidad; no conocía a nadie, todos estaban en su pequeño mundo, todos lidiando con sus propios problemas, pero con el paso del tiempo te vas acostumbrando a estar aquí, te vas acostumbrando a las medicinas que lo único que hacen es dormir tu cerebro, porque si el cerebro no siente nada, tu no sientes dolor, pero al mismo tiempo que apagan tus sentimientos, apagan a las personas volviéndose solo en un cascaron, un frio y bobo cascaron.
¿Jasón vas a ir con nosotros?—hoy era domingo, día de salida, día de llamar a tus familiares por teléfono, era el día favorito de todos, nos dejaban salir del centro psicológico e ir a pasear por unas horas, obviamente íbamos acompañados de uno o dos enfermeros, pero aun así era divertido—.Tierra llamando a Jasón—Isaac seguía parado en el umbral de la puerta mirándome, estaba tan inmerso en mis pensamientos de siempre que había olvidado que lo tenía enfrente.
¿A dónde irán?—pregunte mientras me levantaba de la cama; sentí un gran vacío al darme cuenta que al igual que la otra noche Lux había ido de regreso a su habitación antes de que yo despertara, le conocía de hace poco, pero aun así me dolió mucho el ver que ni siquiera se despedía cuando regresaba a su habitación, y en la mañana aparentaba que nada había pasado.
Vamos a ir al zoológico—respondió Isaac entrando al cuarto sin importarle que yo estuviera con el torso descubierto—Samuel dijo que nunca había visto una jirafa en persona, así que hemos decidido ir al zoológico para que las conozca.
¿Alessia se ha ido ya?—pregunte mientras me levantaba de la cama, caminaba por toda la habitación, que de echo era bastante pequeña, mientras me cambiaba de vestimenta a una más acorde a la salida que tendríamos.
No, bueno si, pero no—Isaac tartamudeaba un poco, se le veía nervioso, mientras jugaba con sus delgaduchos dedos, en sí, todo su cuerpo era delgaducho; Isaac casi nunca comía nada, o cuando comía lo hacía de manera descomunal y ya sabíamos lo que significaba, se haría vomitar; también sabíamos que Isaac ya había llegado a ese punto en que el ya no controlaba sus atracones, lo hacía por inercia, eran como mis ataques de ansiedad, era algo que Isaac simplemente ya no podía controlar—Ya la han dado de alto, pero dijo que ira con nosotros al zoológico y de ahí se ira a casa.
