Parte 6: Jóvenes americanos.

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Dedicado al camaleón británico, donde quiera que estés.


-¡Supongo que estas satisfecho!

-Bueno...- parecía dudar, siempre pareció dudar.-No, claro que no.

-¡¿Y porque?!

-No vale la pena que te alteres, sabes que esto tiene que pasar.

-Te amo.

-Cariño, una noche no equivale una eternidad para el corazón.

-Para este viejo corazón, una eternidad es un simple parpadeo.

Una sonrisa tan pura, larga y sincera, sus mejillas se prendían en fuego, tan dulce, tan único, tan eterno.

El viejo estaba atento a aquella película, parecía que iba a llorar en cualquier momento.

-Muchacho que bello es el amor.- susurraba para no distraer a nadie, era un fastidio, el abuelo no era romántico más bien era...-El amor heterosexual.- patético.

-Apuesto a que fue un delirio enamorarse de la abuela.- le comente de regreso, era bastante noche y los autobuses llevaban por fortuna no tantos pasajeros.

El viejo me miro con recelo, lo decía por él, pobre anciano, la abuela me agrada pero no puedo imaginarme a un maldito "maniaco" con una mujer "empalagosa" tal para cual o acaso los dos se hartaron en cierto punto de sus presencias. No es que fueran polos opuestos, más bien eran lo que ellos no querían, nunca me imagine que una persona "inocente" conociera a un "grosero" y se enamorara de él, tal vez fue eso...mírenme "inocente-grosero" esto es tan homosexual ...

-Se lo que piensas muchacho...- no lo creó viejo.

-¿De verdad?- trate de notarme asustado.

Pero mi abuelo me conocía tan bien, a pesar de estar solo una semana cada año conmigo...era quizá la persona que mejor me conocía, que podía herirme, golpearme, a la persona que más le he mentido en toda mi vida.

-Claro.- note sarcasmo.-Era muy joven.

-Jajajaja.

-Casi como tu, casi como tu. Piensas "que abra visto la abuela Suzie en un para nada caballero ingles, que habrá visto un viejo antipático en una jovencita ingenua..."

-Obviamente te ibas a aprovechar de ella.- le dije en un tono frío, me miro con recelo.

-Tienes razón Jotaro, pero resulta que Suzie fue quien se aprovecho de mi...

Lo miro, se veía en cierta manera atormentado, como si hubiera cometido el más grande error de su vida, pero aquella sonrisa, parecía un joven...

Un joven americano...

-¡Maldita sea!- por el viejo retrovisor de un desgastado Cadillac s.62. Las luces de NY parecían apagarse a su paso y eso le daba mucho más miedo que cualquier otra cosa. ¿Qué estaría haciendo? Para empezar ¿Por qué alguien como ella salió? ¿Por qué diablos no puede cuidarla, si ella...le pertenece? -¡Eres un idiota Jojo!

No podía seguir, el viejo cacharro parecía no aguantar más, el auto era una maravilla pero era muy joven y no sabía cuidar sus cosas, para claro ejemplo su esposa quien también era muy joven, pero él tuvo la culpa, todo aquello que tocaba, se le acercaba o simplemente pensaba parecía que se pudriría.

Bajo del auto, tomo su chaqueta y comenzó a caminar. No era que tuviera miedo del bajo mundo nocturno americano. La guerra termino.

Joseph Joestar de 20 años vagaba ahora en la enorme ciudad, un ingles para nada ingles, un joven americano. Era tan alto y fuerte, claro que llamaba la atención, era apuesto, sus ojos color esmeralda parecían iluminar aquel bajo mundo, su cabello ya para esas horas desecho. El frío le afectaba su prótesis de mano, que ocultaba en los bolsillos de su pantalón.

Modern Love (Amor moderno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora