Cuchilladas de amor❤️

En grandes problemas

¡Pues bien! Lo iba a hacer, estaba decidida. Había cenado como siempre e incluso le ayudo a la señora Lovett la cual se mostró complacida en recibir dicha ayuda, quizás la señora pensó que la joven iba a vivir feliz de ahora en adelante pues tonta no era y podía darse cuenta de que ella era la "amiga". Pero jamás se imaginó que al irse todos a dormir ella prepararía sus cosas y esperaría al día siguiente.

La mañana transcurrió de la misma manera que las anteriores, lenta y muy aburrida hasta que su mañana se iluminó al ver a Matthew Favel, aquel joven que le había propuesto escapar. Le anunció la noticia y entre susurros y palabras de aliento, lo harían esa noche.

El día había pasado sin complicaciones y sin noticias de el señor Todd o cualquier cosa aún que, bueno,muchos mozos y caballeros de alta sociedad habían ido a preguntar por él ya que necesitaban al barbero de inmediato. Y _______ los despedía con amabilidad diciendo que quizás en un día o dos llegaría y podía ponerse a sus órdenes, con una suave sonrisa casi todos se despedían del lugar y se marchaban.
Todo estaba muy bien hasta la hora de la cena, donde _________ alegó tener dolor de cabeza y un malestar horrendo en su vientre, lo cual la señora Lovett pensó que quizás ya habían encargado un pequeño Todd. Inmediatamente la dejo descansar y al decir buenas noches, _________ atranco la puerta y aventó sus maletas por la ventana seguida de ella pues sabía que ahí estaba el joven con el cual se iba a fugar.
Todo marchaba de acuerdo al plan, incluso ella había dejado una nota pidiendo disculpas pero asegurando que ella no era feliz ahí, que su matrimonio estaba vacío y que ella no podía llenar el lugar de quien sea que ocupará el corazón de el caballero.
Pero en cierto punto de la huída alguien los atrapó y golpeando los jovenes, se llevó a _______ a su casa desmayada.

Si no tenía dolor de cabeza, ahora sí lo traía. _________ despertó a causa de la jaqueca tan fuerte que le aquejaba y viendo que no se encontraba en su habitación ni veía a Matthew, se perturbó.
Inmediatamente se levantó y al ver que estaba vestida y todo en su lugar como lo había dejado, pudo respirar.
Pero su pesadilla a penas había empezado, pues un hombre entro a la habitación y ella pudo ver con horror quien era. Bamford, aquel lame botas de el juez Turpin se encontraba parado frente a ella, con la sonrisa más asquerosamente cínica que podía ofrecer.

–Veo que despertaste, querida. Lamento el golpe que te tuvimos que dar pero por tu voluntad no ibas a venir. Y no te preocupes por nada, el chico, Favel está en su casa con una fuerte regañada ya que...provocar que una mujer casada se intente fugar –hizo gestos de reprobación–no, no es correcto pero es menos correcto que la joven acceda a irse. –solto una risa siniestra para dar un paso a la joven la cual dio un paso para atrás – pero no me temas, chiquilla. Que tu "amado esposo"– ironizó haciendo comillas en el aire–vendra a buscarte y así...podré matarlo y tú, no tendrás más remedio que casarte conmigo. –y una vez dicho esto, el se fue de la habitación cerrando con llave la puerta, dejando a la chica con un terrible sabor de boca y un miedo enfermizo.