all the time (2/2)

7 2 0
                                    

No necesito palabras, pues mis ojos hablan por si solos. Shane apega su frente a la mía junto a eso nuestras miradas parecen unirse de una manera aún más intensa, levanta mi rostro para acercarme a el mientras retrocede, casi sin darme cuenta estoy de pie frente a él sin dejar de mirarlo.

— Por favor deja de resistirte —Pega mi cuerpo al suyo

Y finalmente une sus labios con los míos, en un principio pareció que hubiesemos quedado congelados, él con su mano en mi mejilla y mi labio superior atrapado entre los suyos sin hacer ningún movimiento, y yo cautivada por la situación y explosión de emociones mitigadas por el exceso de alcohol, pese a esto mi corazón podría explotar de nerviosismo y felicidad al sentir aquello que tanto he anhelado a través de los años. Se separa por unos escasos segundos y me sonríe, con esa sonrisa que se encarga de recordarme lo enamorado que un ser humano puede llegar a estar, le sonrío de vuelta y tomo el valor de acercarme a su rostro y besarlo, baja sus manos hasta mi cintura y me acerca, dejando de lado todos los inhibidores y sin estar para nada segura de lo que estaba haciendo rodeo su cuello con mis brazos, lentamente comienza a mover sus labios para intensificar el beso, de manera inevitable correspondo torpe pero deseosa ante este, como si no pudiera saciarme de sus labios jamás mientras él me apegaba a su cuerpo con fiereza. Lentamente me lleva hacia el colchón y se posicionó con precaución sobre cuerpo encontrando un espacio entre mis piernas, mientras me besaba podía sentir como aumentaba la fricción entre nuestros cuerpos, específicamente en la zona de la pelvis y el abdomen bajo, pero esto no estaba bien.

— Estoy mareado —Apoyo su frente en la mía

– Debemos parar... —Miré hacia un lado

Las ganas de llorar eran inminentes cuando notaba lo que en verdad estaba ocurriendo.

— Esta bien, jamás te obligaría a hacer algo que no quisieras —Se recuesta a mi lado— Fuck me like you hate me, kiss me like you miss me —Coreó al ritmo de la música con un tono de voz que derrochaba sensualidad

— Duérmete, estás ebrio —Trago en seco y me giro dándole la espalda— Y tu estás con Hazel

— No, no, no, no y no —Suspira con fuerza al final— Lo mío con Hazel acabó hace varios días y fue su decisión

— No te veo triste —Fruncí el ceño disgustada

— No lo estoy, prefiero que seamos amigos como antes, además yo estaba muy confundido, y ahora necesito dormir —Se acomodó nuevamente

— Buenas noches, Shane —Digo con voz trémula y baja

— Buenas noches... June, necesito que me prometas, que pase lo que pase, jamás, por nada abandonarás tu carrera y serás la mejor en lo que sea que quieras hacer después. Eres alguien tan... creativa e inteligente que no debes desperdiciarlo por nada —Me mira a la cara

— Haré lo posible por lograrlo —Sonreí casi al instante tras oír sus palabras

Shane incluso estando ebrio manejaba sus palabras de manera casi poética para generar justo aquello que se esperaba en mi.

— No, yo confío en que lo harás y de maravilla. Siempre he pensado en ti como... no lo sé, un superhéroe, ¡Una heroína! esa era la palabra; siempre estás ahí para echarme una mano cuando lo necesito, cuando me siento solo en el apartamento puedo hablar contigo y se siente genial, tu siempre estás ahí cuando más te necesito. Incluso nuestra amistad comenzó cuando apareciste por arte de magia en tu patio para cubrirme de mi madre... Y ahora, estás ayudándome cuando un traficante quiere mis huesos —Río sarcástico al final— Eres mi superhéroe favorito, oh cierto, mi heroína favorita

Su comentario estaba más que segura que era del todo cierto, pero escucharlo de su boca me hacía sentir que todo aquello que hacía por acto natural hacia el era recibido con gratitud, y al mismo tiempo me complacía de sobremanera que pensara todo aquello de mi.

— Eres lo máximo, Shane —No puedo evitar sonreír al final otra vez

— Tu lo eres, y si escribes un libro prométeme que al menos tendré un cameo en tu historia, algo así como Stan Lee con los superhéroes

— Incluso podrías ser mi protagonista —Respondo antes de poder arrepentirme

– Y tu la heroína de la historia, por supuesto. Ya me desvié, estoy ebrio, no te aproveches y prométeme lo que te dije —Escupió su mano y la extendió hacia mi

— Que asco —Reí al ver su repugnante acción— Vale, lo prometo

— Me aseguraré de enterarme que lo cumplas... Confío en ti como en nadie más —Su voz sonaba floja y débil— Ahora escupe tu mano y sellemos el trato

A regañadientes y luego de unas insistencias de su parte escupí un poco de saliva en mi mano derecha y la estreché con la suya. Y fue justo en ese instante cuando sentí como si una ola de coraje fluyera desde lo más profundo de mis sentimientos y me indicara que era el momento para decirle.

— Shane —Le llamé sin tener respuesta alguna— Descansa —Sentencié al notar que ya se había dormido

Sus palabras resonaron en mi mente hasta que me quedé dormida, todas aquellas veces que había dudado de mi misma con respecto a mi carrera universitaria y mi futuro ciertamente no se esfumarían así de fácil, pero haber escuchado aquello siendo dicho por alguien más que Charles y mi madre se sentía realmente motivante y de cierta forma... Acogedor, sus palabras de una u otra forma habían tocado con calidez mi corazón tras ser dichas y quién lo diría, después de todo me había convertido en la heroína de mi propia, distorsionada y no recíproca, historia de amor.

heroineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora