Aquello que creiamos perdido

Capítulo 18: lluvía

RILEY'S POV:
(Un mes después)

Salí de mí última clase y ya anocheció, el otoño llegó y a las 8:00pm ya es de noche. Está muy frío y parece que no tarda en llover.

Salí de la escuela junto a un grupo de chicos y caminé a casa en dirección contraria a la que los demás se fueron, Alex no puede llevarme ya que sigue en clases una hora más, Ross se fue a no sé dónde con su familia por un mes y no está en la ciudad desde hace más de dos semana, mí última opción era Ares, pero está en el hospital con su hermano que tuvo una accidente en moto ayer

No es nada grave, el hermano de Ares iba por la avenida vacía de su barrio y se calló al intentar esquivar un niño que corrió a la calle en busca de su pelota de fútbol.

Subí la cremallera de mí campera y me puse la capucha para cubrir mis orejas del frío. Caminé unas cuadras hasta que entre a la zona peligrosa que si o si tengo que pasar para llegar a casa que está pasando esta parte.

Guarde mí celular en el bolsillo delantero de mí pantalón y metí las manos en los bolsillos de mí campera.

Pequeñas gotitas empezaron a manchar el piso y supe que la llovía ya había empezado, apresure el paso, no quiero enfermarme.

Escuché pasos cerca y gire un poco la cabeza, un chico venía caminando atrás de mí en la vereda de en frente, volví la vista al frente y seguí caminando.

Los pasos se acercaron más y más, intenté caminar aún más rápido hasta que habló

-¡Hey! ¡Espera!- dijo y todo mí cuerpo se activo

¿Vieron ese momento en el que se dan cuenta que su integridad física y económica corren peligro y piensan "corro... por qué soy pollo"? Bueno, así estoy yo

Apenas escuché que habló empecé a correr como nunca antes lo había hecho, la lluvia empezó a caer más fuerte y el viento me venía en contra haciendo que mí capucha se saliera y el agua callera directo en mí cara y pelo.

No alcance a hacer dos cuadras porque alguien me agarró del brazo deteniéndome

-¡Sueltame!- grité y me giró bruscamente pegándome a su pecho, una de sus manos fue a mí cintura y la otra cubrió mí boca, me asusté por un instante pero reconocí los ojos que me miraban divertidos

-No grites, no voy a hacerte daño- susurró y lo empuje

-¿Qué quieres Cameron?- le pregunté enojada, nuestra relación de odio había mejorado, el ya no me molestaba y yo dejé de intimidarlo.

¿Recuerdan que en la inaguración de Braum's me vengue de el? Bueno mí venganza fue sencilla, el primer paso fue alejarlo de todos, asustarlo un poco, después de eso estuve toda la noche molestándolo y haciéndolo quedar mal con todo el mundo, tiré sobre él un par de bebidas hasta que muy enojado me grito que ya no iba a molestarme y que me iba a dejar en paz

-Iba preguntarte si quierias que te lleve a casa, pero empezaste a correr como una loca y no me diste tiempo para hablar.

-No necesito que me lleves, estoy bien, gracias- dije antes de dar media vuelta y seguir caminando

-¿Alguna vez vas a dejar de ser tan estúpidamente terca?- preguntó y empecé a enojarme, me detuve y me di vuelta para mirarlo

-Sino te gusta como soy deja de hablarme y listo Cameron, problema resuelto

-Solo quería llevarte a tu casa para que no tuvieras que caminar sola, de noche, bajo la lluvia, sumándole todo el peligro que corres en esta zona