Aquello que creiamos perdido

Capítulo 22: Mamá

CAMERON'S POV:

Me desperté adolorido y abrí los ojos lentamente, la luz no era blanca, más bien como de un color anaranjado cálido.

Mire a mí alrededor y parecía que estaba en una habitación, pero no es la mía y tampoco parece la de un hospital.

Mire a un lado y había un gran ventanal que me dejaba ver la noche nublada de Paraíso, cerré fuerte los ojos cuando me dio una puntada en la cabeza y los volví a abrir cuando escuché la puerta abrirse.

Papá y mamá entraron algo preocupados hasta que me vieron con los ojos abiertos y mamá fue la primera en correr a abrazarme, papá le gritó a alguien que ya había despertado y luego el se unió al abrazó.

-¡Qué bueno que despertaste!- dijo una doctora entrando

-¿Qué ocurrió?- les pregunté

-¿Recuerdas por qué estás aquí?- me preguntó la doctora antes de empezar a hacer un chequeo

-Recuerdo hasta que me subieron a la camilla, después de eso, nada- respondí y empezó a escuchar mí corazón

-Te desmayarte debido a una conmoción cerebral

-¿Qué es eso?- pregunté confundido

-Una conmoción cerebral puede ocurrir cuando la cabeza golpea un objeto o un objeto en movimiento golpea la cabeza. Una conmoción es un tipo de lesión cerebral menor o menos grave que también puede llamarse lesión cerebral traumática.- dijo y la miré confundida- Cuando te golpearon caíste al piso y te golpeaste muy fuerte la cabeza

-¿Es grabé?- pregunté y me sonrió

-No tanto- respondió simplemente- Una conmoción cerebral puede afectar momentáneamente la forma como el cerebro funciona. Puede llevar a dolores de cabeza, cambios en la lucidez mental o perdida de conocimiento.- dijo y asentí.

-¿Va a tener secuelas?- preguntó mamá preocupada

-No podría decirle- respondió- según los estudios no, pero igualmente debes cuidarte. Si tiene vómitos repentinos, cambios en la lucidez mental y la conciencia, confusión que no desaparece, crisis epiléptica, debilidad muscular en uno o en ambos lados, pupilas de los ojos de tamaño diferente, movimientos oculares inusuales, problemas para caminar o mantener el equilibrio o pérdida del conocimiento durante un período de tiempo más largo, debes venir rápido.

-Esta bien- dije

-Puedes volver a la escuela dentro de dos días, pero sin actividad física por dos semanas como mínimo- hablo mirando a mis padres- Nada de alcohol por lo menos hasta que ya estés del todo curado, o por el resto de tu vida, beber es malo.- me sonrió y giño un ojo- Señor y señora Moore, es mejor que su hijo duerma durante toda la noche. Acompañe afuera para hablar sobre su medicamento y que el descanse.

-Doctora- la llamé antes de que saliera de la habitación- ¿Cómo está la chica que me trajo?

-Ella está bien, no te preocupes, solo fueron heridas leves. Ahora creo que está declarando en la comisaría, pero pronto va a volver.

-Cuando vuelva ¿Puede decirle que necesito hablar con ella?- pregunté y ella hizo una mueca

-Los únicos que pueden entrar son tus padres, el horario de visita comienza mañana- dijo y asentí, ellos salieron de la habitación y me dejar solo.

RILEY'S POV:

Volví al hospital en autobús ya que salí de la estación de policías antes de que alguno se ofreciera a llevarme.

Apenas entre me encontré con los gemelos que parecían cansados

-¿Qué ocurrió mientras no estuve?- les pregunte y negaron con la cabeza

-Sus padres llegaron y no nos dejarán verlo hasta mañana- hablo Dante

-Vamos a volver al departamento, no hay nada que podamos hacer- dijo Peter-¿Quieres que te llevemos?

-No, gracias- respondí y les sonreí- ¿Saben dónde está Alex?

-Dijo que iba a esperarte en la cafetería- respondió Dante- Adiós Riley

-Adios chicos- me despedí y me quedé mirando como se iban.

Caminé por el hospital buscando la cafetería durante unos minutos hasta que le pregunté a una enfermera y ella me dio indicaciones de cómo llegar. Entre y busque a mí hermano con la mirada, estaba sentado solo en una esquina mirando un punto fijo en el suelo, me acerque y me senté frente a él

-¿Como te fue?- me preguntó al percatarse de mí presencia

-No les dije nada Alex- respondí

-¿Qué dijeron?

-Que hablé con Ares, un oficial me habló de un tal Ethan Smith- dije- Al parecer trabaja para los Brooklyns pero está infiltrado, el oficial que me interrogó dijo que lo está ayudando y que puede ayudar a Ares también.

-Eso no es bueno Riley- dijo Alex y fruncí el ceño

-¿Por qué no? Quieren ayudarlo

-Si dijeron eso es porque saben que Ares está metido en ese mundo, pueden arrestarlo- aclaró

-Tal vez- murmuré- Voy a comprar un café- me pare y fui a comprarlo.

Cuando estaba esperando que me lo den, mire la entrada y allí estaban los padres de Cameron y una doctora hablando, le dije a la chica que me atendió que ya volvía y caminé hasta donde estaban

-Hola, soy Riley- dije y me miraron confundidos- ¿Cómo está Cameron?- pregunté y su madre me miró mal

-¿Tu eres la chica que estaba con el cuando lo asaltaron?- preguntó de mala manera y asentí- ¿Y eres la misma que hizo que lo suspendieran por tres semanas?

-Si, pero...

-¿Qué hacías con mí hijo?

-Yo estaba caminando a casa y el se ofreció a llevarme

-¿Por qué el haría eso por una chica que arruinó sus notas y asistencia perfecta?

-Oiga señora calmese- hablo la doctora- Él está bien, lo trasladamos a una habitación común, pero no puedes verlo aún, ve a casa y descansa, mañana si quieres puedes volver en el horario para visitas

-No te atrevas a volver niña- dijo la madre pero la ignore y mire a la doctora

-¿En qué habitación está?- pregunté y ella lo dudo unos segundos

-Habitación 34- respondió

-Gracias- dije- Buenas noches- me aleje de ellos y fui a buscar mí café. Volví a la mesa donde estaba Alex y me senté frente a él

-Debo hablar con Cameron- dije y se cubrió la cara cansado

-No puedes verlo- respondió

-Debo hacerlo- dije- Debo decirle que no puede decir lo que pasa en realidad, sino meterá en más problemas a Ares y a mí por mentirle a la policía

-Aún que quieras entrar, no podrías, necesitas una tarjeta para poder entrar a esa parte- dijo y le sonreí cómplice- ¡Oh no Riley! No robaré la tarjeta por ti

-¡Por favor Alex! Ayúdame- le pedí, suplique unos minutos hasta que accedió y se fue a robar una tarjeta.

Un amigo de mamá cuando era joven solía ser pobre y tuvo que salir a robar, nos había enseñado a hacerlo cuando eras pequeño, por si algo pasaba, pero nosotros lo tomamos como un juego, muchas veces nos dijo que estaba mal, por eso nunca lo hicimos, solo entre nosotros.

Alex volvió después de unos minutos y deslizó la tarjeta por la mesa

-Ten cuidado, la enfermera no tardará en darse cuenta que le falta la tarjeta- dijo y asentí, tome la tarjeta y me pare de mí lugar.