A Tu Lado » J.C

Diez

"Dolor"

Nos encontrábamos nuevamente en la casa, los niños ya iban a regresar a la escuela, y todo iba perfecto.

Me paré al baño pero comencé a sentir dolor en mi abdomen.

Camine lento hacía el baño, aunque sentía como todo comenzaba a moverse a mi alrededor.

Me sostuve del lavabo y el dolor se intensificó.

- ¡Jos! - Grite sintiendo el dolor cada vez peor.

Escuche como se movió sobre la cama, intenté regresar a esta pero no pude, a mitad del camino, todo se volvió oscuro.

***

Intenté moverme pero el dolor no me lo permitió.

Abrí lentamente mis ojos cegándome con una luz blanca por lo que los cerré nuevamente.

- ¿Está despertando?

- No seas inútil, es obvio...

- Iré a buscar al doctor.

Escuche a lo lejos, y sabía perfectamente de que se trataba de mis pequeños por lo que quería abrir los ojos pero estos me pesaban demasiado.

- ¿Mami? - Preguntó suavemente Josa sentí su pequeña mano sobre la mía.

Me oblige a mi misma a abrir los ojos por ellos.

- Shhhh, papi dijo que no la despertáramos hasta que mami lo hiciera por su cuenta - La regañó Alonso.

Me acostumbre a la luz y cómo pude les sonreí a ambos.

- Hola corazones - Saludó con la voz ronca.

- ¡Mami! - Chilló Josa feliz apretando mi mano.

- ¿Te duele algo? Papi fue a buscar al doctor... - Se acercó lentamente a la cama Alonso viéndome atentamente con sus ojos llenos de preocupación.

- Tranquiló, nada que no se quite con unas cuantas pastillas - Acaricié su mejilla cuando al fin llegó a mi lado.

- Nos asustamos mucho... Papi más - Soltó Josa sin soltarme.

- ¿Dónde estamos? - Preguntó levemente confundida, al notar como una gran bolsa de suero estaba conectada a mi brazo y que no traía mi ropa de siempre, estábamos en un cuarto de hospital.

- En el hospital - Respondió Alonso y yo sonreí sabiendo que ellos no habían entendido realmente a lo que me refería.

- Bien, aquí estamos... - Soltó Jos entrando a lado de un doctor, este volteó a verme y sonrió levemente - Niños les dije que no la despertaran.

- ¡Ella se despertó sola! - Chillaron al mismo tiempo y yo reí bajamente.

- ¿Cómo se siente?

- Algo adolorida pero nada que sea muy grave...

- Lo lamentó mucho - Mi ceño se frunció sin entender el porqué sus disculpas - ¿Le dice usted o le digo yo?