Narrado en tercera persona
Ya habían pasado tres semanas desde que Jos se había ido de la casa, los niños seguían extrañados por el hecho de que su padre no regresara, pero eran niños nunca ponen la atención suficiente ¿o si?
- ¡Feliz cumpleaños Leila! - Dijeron todos a unísono mientras esta sólo sonreía levemente.
Comenzaron a cantar las ya tan conocidas mañanitas mientras esta sólo veía atentamente su pastel, se encontraba un poco incómoda.
Después de que casi su tío Freddy hundiera su cara en el pastel, comenzaron a repartir este.
Los niños se fueron a su mesa, y los adultos a la suya, Leila, Max y Dana no habían pasado de desapercibido que el papá de ambos mellizos no se encontraba en aquella reunión.
- ¿Y mi tío Jos? - Pregunto Leila aún con la sensación de tener pastel en la nariz.
- En un viaje de trabajo... - Los tres fruncieron sus cejas, sus papás trabajaban en el mismo lugar, además es un conservatorio, ¿porque rayos deberían de viajar?
- O bueno, eso dijo, desde qué pasó lo de mi hermanito las cosas entre mis papis se pusieron raras.
- ¿Cuál hermanito? - Pregunto Max sin entender a lo que se refería Josa.
- Mi mami también iba a tener un bebé como la mami de Leila.
- Shit... - Soltó Dana comprendiendo todo.
- A la... - Comenzó diciendo Max quien fue interrumpido por Leila.
- ¿Por eso mi tío Jos no está?
- Por eso, y porque el otro día escuché que mi mami le dijo a mi papi que le vio la cara de... De grosería - Soltó Alonso, no queriendo decir tal palabra.
- ¿Acaso mi tío Jos... - Comenzó a decir Leila sin poder creerlo - Ni siquiera terminaré la frase.
- Niños... Deberían de prepararse, posiblemente sus papis, van a querer comenzar a hacerles dobles fiestas... Dobles regalos... - Comenzó diciendo Dana con la voz baja, se sentían bastante mal por el simple hecho de que los pequeños niños no entendían la gravedad del asunto.
- ¿Fue por algo que nosotros hicimos? - Preguntó Alonso con un puchero sintiendo una punzada en su corazón, porque aunque fuera muy pequeño notaba lo decaída que se notaba su madre, y cómo su padre no les había marcado ni siquiera una sola vez.
No era tan pequeño para entender cuando algo iba mal en su propia familia.
- Hay cosas que a veces son mucho más grandes que nosotros, que se nos escapan de nuestras manos, que no están a nuestro alcance, son problemas en los cuales nosotros ni siquiera tenemos algo que ver... Así que no, no es su culpa.
Ambos hermanos Canela se voltearon a ver con desconfianza, porque habían hablado un poco sobre el tema, tenían la sensación de que era su culpa.
- Hey, hasta que llegas... - Escucharon decir a Freddy por lo que los seis voltearon.
Los mellizos se pararon de un salto y corrieron hacia su padre, este sonrió al ver su felicidad al simple verlo, los cargo a ambos con un poco de dificultad y les dio unas cuantas vueltas que provocó que rieran.

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A Tu Lado » J.C
FanfictionEl tiempo ha pasado, ellos siguen juntos... Pero ¿el amor sigue siendo tan fuerte cómo antes? [Tercera y última temporada de LADR]