Por Siempre -Leorai-

Día soleado

- ¿Que haces? - pregunto Karai confundida al ver que tomaban un camino distinto

- nada malo - sonrió mostrando sus dientes.

- oye, regresemos al colegio. Van a castigarnos -

- claro que no, yo asumo las consecuencias - puntualizó dando por finalizado el tema.

Leonardo había llevado a sus hermanos al instituto, y al ver a su novia puso en funcion su plan. 

Dentro del Jeep llevaba una canasta con diferentes alimentos para pasar un día especial.

- ¿Que te dijo mi padre ayer? - Leo trato saliba. Miro a todos lados.

- nada - contesto tratando de desviar el tema

- vamos dime - ánimo Karai

- me felicitó - Karai alzó una ceja -  está bien, me mostró su colección de armas -

Leo miro a Karai tratando de descifrar su expresión.
Era cierto su ahora suegro le había mostrado su colección de armas, y había dado unas cuantas advertencias de lo que pasaria y algo malo le sucedía a su hija.

Había contado a sus hermanos y padre de su relación con Karai. El único molesto fue Rafael, dejando en claro su desagrado por su cuñada.

Por otro lado, Rafael trataba de encontrar algo que separara a su hermano de Karai. No sabía el porque de su odio hacia ella, simplemente no confiaba en ella, creía que ocultaba algo. A decir verdad no estaba lejos de la realidad.

Pero sus esfuerzos eran en vano, la chica no tenía registro alguno, sus sospechas crecían cada vez más.

Sabía que Molli estaba molesta por la atención que recibía Karai, Molli era hija de uno de los hombres más ricos de New York a lo mejor ella podría mover influencias para obtener alguna información.

Leonardo estacionó su vehículo, Karai sonrió al ver en donde estaban, la playa Rockway Beach.

Pocas personas y un lindo día soleado, que mejor escenario para unos novios que decidieron darse a la fuga. Por un día.

Leonardo sacó la canasta, buscaron un lugar donde sentarse, Karai trato de ayudar a Leo. Pero él no se lo permitió, con la excusa de "yo te invite, yo me encargo de todo" Karai sonreía al ver los esfuerzos de su novio.

- deja te ayudo - dándose por vencido entrego la sombrilla a Karai.

Tendieron una manta y Leonardo sacó unos refrigerios.

- esto está delicioso - expreso Karai comiendo un pastelito de fresa - ¿Tu lo preparaste?

- claro, lo hize yo solito. - sonrió orgulloso de si mismo 

Karai comía, Leo la observaba, toda ella se veía relajada y feliz, se sintió contento de ser el causante de ello. Pero aún deseaba averiguar el porque lloraba el día anterior. El porque de su comportamiento tan seco y distante los primeros días, pero no la presionaria para hablar, esperaría. Muestras lo hacía se encargaría de hacerla sonreir más.

- tienes algo aquí - señaló su mejilla

- uhm - obtuvo como respuesta, Leo se acercó a ella y dio un beso sobre el lugar manchado de crema.

- listo - Karai lo miraba con los ojos muy abiertos - ¿Que? - pregunto avergonzado

Leo no resistió mas, se lanzó a ella robándole más besos haciendo que ella se sonrojara.

- te vez muy linda cunado ríes - soltó.

- te quiero - Karai dio un corto beso a Leo. - tenía que decirlo

Karai bajo la cabeza, ella también sentía algo por él, la confianza era algo que le costaba mucho dar. Pero con él se sentía muy bien.

- te quiero -.

Molli esperaba a Rafael en la salida de la clase.

- ¿y Leo?- pregunto.

- no se - contesto de mala manera

- seguramente está con ella - Molli tenia un tic nervioso. - estoy buscando información de ella

Eso ya lo sabía Rafa.

- ya se, no hay nada, es muy extraño -

- algo oculta esa, la voy a destruir - Rafa pensó en aliarse con ella.

- tengo algo que pueda ayudar - respondió acordandose de las fotos.

*•* •*• *  🌸 * • * •* •*

- no voy a entrar al agua - Karai se cruzó de brazos

- ¡por favor! - suplico Leo.

- No - Leo resopló.

- vamos, solo es agua -

- no tengo traje de baño - que excusa tan tonta. Pensó ella

Leo la tomo desprevenida y la cargo en brazos, corrió por la playa ignorando sus gritos pata que la bajará. Las personas los veían sonriendo.

- ¡LEO, NO! - grito al ser lanzada al agua.

Leo reía, pero su risa desaparecido al ver que ella no salía.

- karai - llamo. Se puso alerta al no recibir respuesta.

- Karai! - grito. Se sumergió la cargo aún en el agua.

- ¡Tonto! - le grito, muriendo de la rísa.

- ¿estaba fingiendo?- abrió la boca indignado.

- tu empezaste - se defendió.

Salieron del agua poco después, Karai traía la ropa muy pegada al cuerpo. Tenía la blusa algo levantada, y fue cunado vio algo extraño.

Karai lo noto y como rayo acomodo su ropa. Se aclaró la garganta para llamar la atención de Leo.

- eso fue divertido - sonrió

- si, me alegra que haya gustado -

Leo saco unas toallas del Jeep y al caer la tarde decidieron volver.

Leo manejaba, Karai dormía a su lado. No olvidó lo que había visto, la curiosidad lo mataba, su mano picaba por levantar la blusa.

Acercó su mano dejando la otra en el volante, lentamente tomo la punta de la manta y la cubrió.

Esperaría a que ella le contara.

- Karai, karai - Leo la despertaba

- ya llegamos - sonrió

Karai se estiró quitándose el sueño, ambos se despidieron con un beso. Karai volvió a agradecer el dia tan lindo que pasaron.

Al día siguiente, Leo fue por Karai a su casa, Rafael se molestó de gran manera con su hermano, a diferencia de los menores que resolvieron a Karai con grandes sonrisas.

Tomandos de la mano ingresaron al establecimiento, varias miradas se posaron el ellos, mejor dicho en ella.

Ignorandolas entraron al salón.

- ¡¿QUE RAYOS ES ESTO!? - grito Leonardo.

🌸 ;)