Por Siempre -Leorai-

Todo acabo

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- Dale de comer - ordenó el pelinegro entregándole un bulto rosa a la asustada chica - ¡Ahora! - grito

Karai temblaba de Miedo pero recibió el bulto en sus brazos siguiéndole el juego macabro que Takeshi había iniciado hacia dos días, Karai tenía en sus brazos una muñeca de tamaño de un bebé envuelto en mantas rosas simulando un bebé real simuló sacar un pecho de la gastada blusa y luego se cubrió con la manta todo bajo la atenta mirada sombría de Takeshi

- Estás temblando mucho - reprochó

- Lo siento - se disculpó Karai y trato de tomar el control de su cuerpo a pesar del dolor intenso de su cuerpo entero

Takeshi la había golpeado luego de que trato de escapar y el la dejara inconciente, mientras ella se mantenía dormida Takeshi la llevo casi a rastras al otra habitación, una exactamente igual a la que tenían para su hija en casa de su padre.
Cuando Karai despertó rompió en llanto al ver la habitación de su hija, Takeshi se había obsesionado con una muneca que le recordó a la pequeña Akira y ahora pensaba que era ella.

Takeshi salio dejándola sola con la muñeca y al escuchar el sonido del seguro soltó a la Muñeca se alejó de ella. Trato de buscar alguna salida pero le fue imposible no fue consciente de cuánto tiempo estuvo sola hasta que volvió a escuchar los pasos de Takeshi desde afuera se apresuró a poner todo como estaba y tomo a la muñeca para ponerla en la cuna justo en el momento que Takeshi entro.

- ¿Se ha quedado dormida? - pregunto

- Si, logré dormirla - contesto fingiendo una sonrisa -

- Bien. Necesito que pongas linda hoy en la noche vendrá una persona que muere por verte - sonríe - no tines que preocuparte más mi amor - tocó su mejilla - está noche ambos descansaremos por fin y viviremos aquella vida que nos arrebataron

Karai sintió un escalofrío al escuchar decirle la última oración

- ¿A qué te refieres? - pregunto Karai temerosa -

- Es una sorpresa mi amor, ahora vamos a arreglarte - Takeshi la jalo del brazo llevándola a otra habitación

Karai abrió la boca sorprendida al ver lo que tenía en frente, La habían llevado a una habitación repleta de fotografías de ella y unas cuantas con su hija, habían fotografías donde Karai apenas era una bebé

- ¿Te gusta? - susurro en su oído

((No, tengo miedo)) pensó

- Si - mintió para complacerlo

- Vamos - la guío al interior de la habitación y luego se dirigió a una puerta que dirigía al baño en donde Ya tenía preparado una tina con agua caliente y sales

A pesar de la negativa Takeshi termino por desvestirla acto que la hizo temblar de miedo, él la trataba como a una muñeca de trapo, lo peor es que ella no podía hacer nada, el único alivio era que le había quitado la pesada cadena

Takeshi miro el cuerpo desnudo de su ex novia, lo admiro por demaciado tiempo tanto que Karai rezaba para que no llegara a más.

- T-tengo frío - dijo llamado la atención -

- La maternidad te sentó de maravilla - Alagó y continuo con su trabajo - te dejare vestirte - la saco del agua para ponerla como si de una bebé se tratara sobre toallas secas - deje tu ropa lista -

Un vestido blanco, zapatillas blancas e incluso la ropa interior era blanca no paso desapercibido el color y le pareció extraño 

Termino de vestirse e intento salir de la horrible habitación pero al intentar abrir se dio cuenta que está estaba con llave