Apareces Tú [Gramander AU]

II

En cuanto pude oír que ya no estaba presente, me acomode el abrigo el cual tenía un perfume muy varonil y me hacía sentir ciertas emociones en mi. Mire un rato más las luces de la ciudad, pensando si era Gellert o era alguien más, cuando me sentí más cansado baje para ir hacia mi departamento, cuando me di cuenta que tenia que regresar el abrigo.

Me pare frente a la puerta tratando de tomar confianza para tocarla, pero no me atreví y regrese a mi departamento. Al día siguiente estaba corriendo de un lado a otro tratando de buscar el horario y la clave de mi casillero.

--Jacob... ¿has visto mi horario?-- pregunte desde el pasillo

--lo pusiste en la libreta azul-- respondió

-- cierto...-- dije-- gracias Jacob

Ya iba con 5 minutos tarde hacia la escuela, pero sin querer choque con una chica de pelo negro, corto y lacio a la cual le tire su hot dog.

--¡IDIOTA!...¡MI COMIDA!-- me grito y se fue

En cuanto entre al aula, vi que en el salón no había maestro y todos estaban en su mundo. Así que me dirigí a una banca que estaba vacía, tome asiento y me dedique a revisar mi horario con detalle. En toda la clase el profesor no se presentó, en las demás nos tuvimos que presentar y todo eso, ya en el almuerzo, solo me senté debajo de un árbol con un sándwich de pollo y queso, para revisar mis redes sociales, tenia un mensaje de voz en WhatsApp.

《Hola pequeño,  lamento no haberte llamado temprano... mamá te manda saludos y suerte en tu primer día de clases》

Era Theseus, bueno al menos me mando un mensaje de voz y no una llamada. Me puse los audífonos y disfrute un rato la canción de Snuff Slipknot, esa canción me hacía soñar despierto, crear nuevas ideas y todo eso, revise el reloj de mi celular, faltaban menos de 5 minutos para mi última clase, me levante y fui en busca de mi aula.

De vuelta caminaba por los pasillos cuando volví a encontrarme a la chica de hace rato acompañada de una chica rubia con risos y pelo corto. Las iba a ignorar cuando la rubia tomo mi brazo haciéndome voltear.

--Hola soy Queenie Goldstein-- se presentó

--M-me llamo Newt-- dije

-- me tengo que ir-- dijo la pelinegra pero la rubia la detuvo y le susurró algo en el oído-- bien...lo haré-- soltó un bufido y rodó los ojos

-- los dejo, tengo que ir a mi siguiente clase

Queenie despareció entre la multitud de gente que había en el pasillo, dejándome solo con la pelinegra.

-- l-lamento lo de hace rato-- dije un poco asustado

--no es nada... -- dijo, hubo un momento de silencio algo incomodo entre nosotros--m-me llamo Tina... Tina Goldstein

--yo soy... Newt Scamander.

Iba a decir algo más cuando el timbre sonó.

Después de un largo dia de clases y haber hecho mis tareas, empecé a leer uno de mis libros que había traído de casa. Oí Jacob entrar y dejar unas cosas en la mesa.

--NEWT... SALDRÉ POR UNOS MINUTOS, ACOMODA LAS COSAS EN LA ALACENA-- ordenó

-- Si-- respondí

En cuanto lo oí salir estaba fui hacia la cocina para ver que había comprado y hacerme algo de comer.

--Creo que comeré sopa blanca. -- dije mientras sacaba un paquete de sopa de codo

En cuanto acabe de comer fui rato a la azotea para digerir la comida y volver a pensar en aquel desconocido que me había prestado su abrigo. Suspire y mire hacia bajo, donde sólo ví a Jacob con una chica al otro lado de la calle, un olor a tabaco de mi lado derecho hizo desviar mi vista para encontrarme con un hombre fumando tranquilamente.

--¿que tal tu primer día de clases?-- pregunto el hombre sacando el humo del cigarro con total naturalidad

-- lo mismo que suele ocurrir en el primer día-- respondí

--¿fumas?-- me pregunto

Negué con la cabeza y seguí viendo las luces de la ciudad, acompañadas del olor a tabaco de aquel hombre que me había dado su abrigo, haciéndome sentir una extraña sensación de alivio y calidez.

--¿cual es tu nombre?-- pregunte de la nada y el no me respondió

Quería decir algo pero no pude, así que me dedique a jugar con mis dedos rozando la rugosa superficie de la barda de esta, él estaba a un lado mio y decidí no mirarlo ya que causaba en mi cierto nerviosismo.

--me tengo que ir-- dijo tirando la colilla y pisándola-- lamento no hacerte compañía

-- adiós-- dije

-- nos vemos-- dijo

Abrió la puerta y lo desaparecer tras de esta, regrese mi vista hacia el cielo nocturno dejándome ver que no había alguna estrella presente.