VIII

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Soo

Los dos nos miramos un poco incómodos por la forma en la que nos había atrapado el maestro de fonética. El maestro Kim Junmyeon, ese mismo que era caracterizado por no ser tolerante con los alumnos. Desde el primer día de clases (en el desayuno), Baekhyun me había advertido que Junmyeon era el maestro más estricto de la escuela y cómo no serlo si la gran mayoría de sus materias necesitaban de precisión para ejecutarse.

—Joven Oh— su voz se había engrosado aún más de lo normal, provocando una extraña mueca en Sehun.

—Dígame, profesor Kim— Hun me soltó con desgana mirando de reojo al superior. Una pequeña tensión era palpable entre estos dos y yo interfería entre tal sentimiento.

—¿No deberían estar en su lugar? Pronto comenzará la clase y no quiero que se distraigan y menos hoy que es práctica— entró sin dirigir más su mirada a Sehun, postró su portafolios negro y sacó dos tizas junto con un pequeño borrador, alistándose para impartir sus conocimientos.

Según el mapa curricular de la materia; las clases prácticas se establecían con una duración de 5 horas confinadas a esto. Sería un día sumamente largo.

La mayoría de nuestros compañeros comenzaron a llegar pocos minutos después de aquel imberbe encuentro haciendo menos atemorizante la agonía.

—Bien, jóvenes. Hoy practicaremos fonética del Español. Quiero que terminen este día pronunciando correctamente la "r", sin forzarla, sin arrastrarla. ¿Entendido?—exclamó Junmyeon con hastío y sin dejar de ver a Sehun a los ojos. —Joven Oh, hoy trabajará con Kim Minseok— de inmediato volteó su tan filosa mirada en mi dirección y ahora, mientras señalaba a Jongdae proclamó. —Usted, joven Jongdae, veo que tiene bastante potencial en este idioma y sería bueno que ayudara a su compañero Kyungsoo, ¿quedó claro?— Jongdae se dedicó a asentirle con la cabeza buscándome por todo el salón. —Bien, los demás pueden escoger una pareja.

Jongdae se levantó de su pupitre y caminó al lugar vacío frente al mío para tener un campo visual mejor y más claro.

—Creo que no habíamos tenido tiempo para presentarnos; mi nombre es Kim Jongdae pero puedes decirme Chen— el pelirrubio extendió rápidamente su mano a mi escayola, al ver que por obvias razones no podía saludarlo con esa mano, esbozó una tierna y dulce sonrisa agatada mientras reía bajito. —Disculpa mi torpeza.

Aquel chico tenía un semblante cálido y abrazador que te hacía sentir con basta confianza.

—Mi nombre es Do Kyungsoo y creo que el torpe aquí soy yo... si sólo te contara cómo fue que me fracturé la muñeca, tendríamos suficiente material para reír por más de una hora sin parar— Jongdae sonrió de nuevo mientras tomaba un marcador de mi lapicera.

—¿Puedo?— moví la cabeza asintiendo, Jongdae procedió a escribir. —Ya está.

Bajé la mirada al yeso para leer tan intrigante nota: "Sonríe más, seamos amigos- Chen"

Levanté la mirada para agradecer pero un fuerte manotazo en mi libreta interrumpió tan fraternal encuentro, los dos miramos atónitos por tan repentino sonido a tal grado de parecer conejos lampareados.

—Pero que bien aprovechan el tiempo— dirigió su vista a Jongdae y con desaprobación negó la conducta del pelirubio. —Jongdae, te puse con Kyungsoo para que le contagiaras tu conocimiento, no que te dejaras llevar por él— bufó con sorna.

Junmyeon se alejó de los pupitres para regresar a su tan alargado escritorio. Kim rodó los ojos y cuando el mayor se alejaba, gesticuló sus labios burlándose de aquel comentario tan fuera de lugar del profesor.

Dear Neighbor  [Kaisoo fic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora