Ya no más

VI. Un amigo

Vamos al rincón oscuro,

donde yo siempre te quiera,

que no me importe la gente,

ni el veneno que nos echa.

Federico García Lorca, Bodas de sangre

-¿Te gustaría jugar conmigo?

Fueron las primeras palabras que me dijiste acompañado de una una gran sonrisa. En ese momento supe que los ángeles existían. Lástima que no supimos valorarte, me arrepiento de no haber estado a tu lado. Me enseñante tantas cosas y no estuve cuando más me necesitabas.

Nuestro primer encuentro fue el mas extraño. Mi familia había decidido que sería mejor para sus hijos que crecieran en Kanoha, ya que nuestra familia es originaria ahí. A mi me daba igual, siempre y cuando estuviéramos en familia me parecía bien. La primeras semanas fueron aburridas. No tenía muchos amigos en el lugar donde vivíamos antes, y menos ahora, ya que me la pasaba siempre estudiando y dando lo mejor de mi para que mi padres estuvieran orgullosos.

Un día, mi padre nos dijo que el fin de semana conoceríamos a la familia Namikaze, ya que eran amigos desde la infancia y esperaban que sus hijos los fueran. Cuando vi por primera ver a esa familia me parecieron personas encantadoras, se notaba en sus rostro que eran muy felices y querías mucho a su hija Mito. Sin embargo, mi opinión de Mito es que era una niña mimada y tonta. No dejaba de alardear su premios y notas. Yo que era más inteligente que ella no hacia eso. Sasuke parecía estar feliz con ella y mis padres contentos por ver la amistad que se estaba formando. Comenzaba aburrirme de estar ahí, así que decidí explorar la casa y me impresionó encontrar un biblioteca. Escuche unos murmullos y decidir entrar, fue en ese lugar que te vi por primera vez y me encantaste con esos ojos azules tan puros como en cielo. Me invitaste a jugar y no pude decir no. Nunca olvidaré ese día, por primera vez e sentí como un niño, además de fuiste la primera persona en decirme tonto por no saber jugar. Eso fue tan impresionante teniendo encuentra que era el genio y orgullo de la familia. No obstante, me cuestionaba el motivo del porque la familia Namikaze no te presento como tu hijo ante mi familia. Cuando me despedí de ti me sentía tan mal, me dedicaste una cara tan triste queme rompía de corazón. Antes de irme te prometí que iría a visitarte y que nunca que dejaría solo ya que éramos mejores amigos.

Esperaba cumplir esa promesa para mi ángel que había cumplido 9 años ese día.

Como pasaba el tiempo me fui danto el daño que te ocasionaba tu familia. Nunca te ponían atención, estabas tan delgado porque no te daban de comer, tu ropa tan desgastada y tallas más grandes para tu tamaño y el maltrato que te daban los sirvientes. Un día escuche a mi padre decir que tu eras un doncel maldito, ya que traías desgracia a quienes te rodeaban. Pensé que eso era una estúpida mentirá, porque desde que te conocí mi vida parecías hermosa. Cada día que pasaba a tu lado me hacia olvidar todo el estrés que tenias, me sentía como un chico cualquiera enamorado de un ángel rodea de monstruos el cual tenía que proteger.

Recuerdo el día que tu padre te golpeo me sentía tan impotente de no poderte defender de aquel demonio disfrazado de padre. Tenía 11 años aquel tiempo y te mandaron a vivir lejos de ellos porque según algún día lastimarías a Mito, sin ser conscientes que ella te lastimaba a ti. Me juré que cuando pudiera tener poder te alejaría de ellos. Lastima que no lo hice antes.

A vivir lejos de tu familia comenzaste a hacer amigos. Cada vez que me contabas lo feliz que era con ellos y me alegraba por ti. Pero no todo era bueno, me confesarse tu amor a Sasuke y yo sólo pude apoyarte. Mi corazón se rompió en aquella platica, porque sabia que Sasuke también tenía sentimientos por ti.

El tiempo pasaba y parecía que nada malo pasaría. Ojalá que todo hubiera quedado así, pero no lo fue. Mi padre me había dicho que estaba comprometido con una familia importante y así se fortalecería la empresa Sharingan. No podía aceptar esa noticia; no aceptaba que mi padre controlada más mi vida y decidir fugarme. Irme a un lugar lejos de ellos donde su poder no me avanzara. Consideré que sería bueno que te fueras conmigo y así podía protegerte. Cuando fui a decirte mi plan te vi tan feliz con tus amigos y Sasuke que no tuve el valor de llevarte conmigo. Habías soñado tanto tener amigos y que Sasuke te amará. Se que él te ama por las miradas que te dedica. Me fui sin decirte nada, tenía miedo de al decirte mis planes confesara mi amor y tu te alejaras de mi. No podía perder tu amistad, porque era la única forma de estar a tu lado.

Tarde 3 años para sentirme a salvo de mi familia y dos años en poder tener poder. Cuando decidí comunicarme contigo me enteré de la peor noticia. Tú habías muerte dos años después de mi fuga. Tenías 16 años cuando encontraron tu cuerpo. Yo en ese tiempo tenía 21 y me divertía con los amigos que había conseguido, mientras tú respirabas tu último aliento. Me odio a mi mismo por no haberte llevado conmigo; de creer que mi hermano te cuidaría y confiar en aquellos amigos. Ahora me encuentro aquí, frente a tu tumba para dejarte flores y jurando vengarte. Juro que aré pagar aquellas personas que te hicieron daño no importando que sea mi familia. Teblo juro mi querido ángel.