mama sustituta

Cap 32

Ya había pasado un mes, uno lleno de alto y bajo, pero la familia seguía unida y era hora de regresar a Rusia, en realidad no pensaban que volverían pero ya no podían separa a aquella pequeña familia.

Se encontraban terminando de empacar las últimas cosas mientras yurio intentaba calmar al pequeño el cual no dejaba de llorar.

-cosa, qué pasa?- hablaba el rubio liberando fermonas y arrullando a su bebé

-tal vez es el echo de que le digas cosa y no yuvi- comento jean mientras pasaba para dejar las maletas en el carro

-la silla del bebé está lista- comentó Viktor después de instalar la silla

Habían rentado un auto ya que el suyo lo habían dejado en Rusia, todo había sido de improvisto y rápido pero eso ya no importaba; el pequeño seso su llanto apenas su padre se acercó a yuri plateo un beso en sus labios.

-ah si te callas si él está cerca, seguirás siendo cosa- reclamó el joven mientras tomaba rumbo al auto

-cariño- le habló su madre a lo cual este se dirigió hasta donde se encontraba- no te había preguntado pero porque llamaste a tu cachorro yuvi?- pregunto yuuri curioso tomando rumbo junto con su hijo a el auto

-bueno, al principio pense muchos nombre y luego se me ocurrió que no sabía si sería niño o niña y decidí empezar con un juego de palabras, junté sus iniciales y formaba yuvi, me gusto, así que así se llamaría- le comentó el joven sacando una gran sonrisa a su madre

Ambos subieron al auto y colocaron al pequeño durmiente en el asiento especial, a los costados de el asiento del bebé yuri y jean.

-una foto del recuerdo- grito yuuri apenas todos estaban arriba del auto

Todos posaron y yuuri tomó la foto mientras tomaban rumbo a el aeropuerto.

•••

Ya habían vuelto a su fría y cálida Rusia, yuri respiró profundamente impregnándose de ese aroma frío que hacía a su nariz sonrojar; salieron del aéreopuerto y estaban dispuestos a subirse a un taxi rumbo a su casa cuando jean detuvo al menor.

-disculpen, pero yo tengo una sorpresa planeada para yuri- hablo jean sonriente dejando a todos confundidos, incluso a sus padres- necesito que todos vallamos a una dirección- dijo a lo cual dieron permiso de decir la dirección al conductor.

Yuri se dedicaba a observar la pequeña cara de su bebé en el transcurso de llegada mientras jean se dedicaba a observar a su hermoso yurio.

-bueno llegamos, síganme por favor- hablo jean al llegar a unos departamentos

Se veía bien, era en una zona bonita y lujosa, subieron hasta el quinto piso hasta entrar a un gran departamento, muy grande; se adentraron y observaron todo, al llegar a la sala jean jalo en medio de todos a su joven novio con su hijo en brazos mientras todos los observaban, se colocó frente a él y le tomó de la mano

-yuri, llevo toda una vida esperando para hacer esto, se que aún estamos jóvenes pero nunca había sentido nada tan seguro como esto, tal vez hicimos las cosas al revés pero no importa ahora- soltó su mano y se puso sobre una rodilla sacando de un bolsillo una pequeña caja- yuri nikiforov katsuki, ya intente vivir una vez sin ti y me fue imposible, ahora te pido, vivamos una vida eterna juntos, yuri te casarías conmigo?- soltó dejando estáticos a todos los presentes

Yuri miró a sus padres y hermanos los cuales alentaban al pequeño a aceptar, miró a su pequeño el cual sonreía entre sueño y luego miró a su novio el cual esperaba una respuesta arrodillada, lágrimas salieron de sus ojos y se arrodilló para abrazarlo.

-si acepto, claro que acepto- grito el rubio entre llanto

Se escuchó los suspiros de todos los presentes los cuales habían estado aguantando la respiración hasta el momento de la respuesta para luego celebrar.

Aquel apartamento había sido comprado por jean hacía años cuando ganó su primer Grand Prix y llenado de cosas con el tiempo, contaban con tres habitaciones y dos baños, jean había empezado a hacer la habitación para un bebé apenas se enteró de su venida; jean llevó a los invitados a la habitación de su pequeño sorprendiéndolos por la forma en la que se encontraba adornada, una bonita cuna en medio del cuarto con un móvil colgando de él lleno de pequeños adornos, muebles para cambiar y bañar bebés y todos pintado perfectamente con un hermoso amarillo, para yuri y jean se sentía como su nuevo hogar, dulce hogar.