Cap 8

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Yuuri se encontraba en un hermoso comedor tomando el té con seung Gil, algo que hacían muy seguido pues se habían convertido en grandes amigos y compartir cosas de la maternidad siempre era de ayuda para ambos.

-yuuri, dime, cómo puedes verte tan fresco y ser madre a la vez?- dijo seung suspirando mientras dejaba la taza sobre la mesa- es decir, adoro y amo a mis hijos pero quiero solo cinco minutos para mi- rio levemente tras su comentario a lo que yuuri lo copio

-solo dos palabras "olvídalo-ya"- mencionó el japonés a lo que ambos rieron a carcajadas- créeme es algo de asiáticos, por ejemplo tú te vez genial, perfecto- ambos rieron

Y así pasaban sus típicas tardes cuando sus alfas se encontraban fuera trabajando; sus hijos jugaban en la habitación del hijo menor de seung y pitchit, los tres convivían como mejores amigos aunque al parecer de ambas madres el pequeño alfa y el pequeño omega eran más cercanos de lo común.

-yuri, cuando sea grande quiero que nos casemos- mencionó el pequeño alfa poniéndose frente al pequeño rubio el cual lo miro un poco confundido pero feliz

-como los adultos- gritaron ambos niños unísonos a lo que el pequeño leroy asintió y se acercó al rubio

-yuri, quisieras ser mi esposa?- pregunto el pequeño de forma graciosa tomando la mano del pequeño rubio a lo cual este sonrió y lo abrazó

-yo quiero ser quien los case- mencionó el pequeño leo mientras se juntaba con sus amigos

Los tres pequeños se levantaron del suelo y empezaron a representar lo que para ellos era una ceremonia, muchos peluches puestos en fila, el pequeño leo con un libro de dibujos el cual se encontraba al revés, hasta enfrente y los dos pequeños pasando por el pasillo, todo era sumamente divertido.

-y ahora que?- pregunto el pequeño leo cuando ambos mayores llegaron al principio

- intercambiamos anillos- dijo dudoso el rubio a lo que él y el pequeño alfa se miraron mutuamente

Ambos se pusieron a buscar algo que pudiesen intercambiarse entre toda la habitación, pero al no encontrar nada ambos pequeños omegas decidieron salir de la habitación e ir con sus madres.

-Mama, me prestas tu anillo?- dijo el pequeño rubio mientras jalaba la mano del japonés

-para que cariño?- pregunto yuuri dudoso, le era extraño que su pequeño se lo pidiera

-lo qué pasa es que jean y yo nos vamos a casar y no tenemos anillos- respondió el pequeño con sus ojos completamente abiertos

Yuuri y seung no se lo podían creer, se encontraban indecisos entre reír, preocuparse o seguirles la corriente, tras unos momentos de intercambio de miradas entre los mayores llegaron a entrar al cuarto del pequeño para estar presentes en la ceremonia y para sustituir los anillos utilizaron unas pulseras de tela que se encontraban cerca; la ceremonia volvió a comenzar, yuuri y seung se encontraban como dos invitados más, veían como sus pequeños, aún siendo de su edad, compartían un lazo destinatorio, un lazo el cual se forma desde su nacimiento y jamás se puede romper; los pequeños volvieron a estar frente aquella pequeña simulación de altar, el pequeño leo con un libro mal puesto sobre sus manos indicaba todo lo que debían jurar y los demás solo lo repetían, ambos omegas mayores se encontraban felices y emocionados por aquella gran tierna escena.

-y creo que ahora ya son esposo- mencionó el pequeño leo una vez que los otros dos pequeños se intercambiaran las pulceras; tras oír eso yuuri y seung empezaron a aplaudir y celebrar- creo que ahora se tienen que besar- mencionó por último el pequeño

Y antes que ambos mayores pudieran reaccionar los pequeños se encontraban dándose un rápido beso y riéndose mutuamente; aquella tarde había sido completamente extraña y divertida para ambas familias, tal vez no se lo contarían a sus alfas en algún tiempo pero sería una anécdota para recordar, su historia familiar apenas comenzaba.

mama sustitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora