Abril se quedo sola, estaba en medio del pasillo, le acababan de insultar y simplemente se había callado, simplemente pensaba en lo que seria esa marca estraña de Scorpius.
Después de quedarse unos segundos parada pensando se dirigió a su habitación, se lavó los dientes y bajó al patio.
-¿Todos os encontráis por aquí?
La voz de mcgonagal resonó por todo el patio.
-Esto es un aparato muggle, usado para ampliar la voz. Después de esta breve replicación os explicaré una nueva dinámica.
Todos estuvieron atentos.
-Eligire unas parejas y tendréis que conoceros mejor, algo tenéis que saber, no os tocara con alguien de vuestro curso y tampoco de vuestra casa.
Mcgonagal empezó a nombrar nombres emparejados, después de varios nombres Mcgonagal nombró a Abril y Scorpius juntos, la Ravenclaw se alegró de que le hubiera tocado con uno de sus amigos, pero parecía que no a todo el mundo le agradaba; la pelirroja tenia su cara casi del mismo color que su pelo, y cualquiera podría jurar que le hubiera saltado encima si no hubiese sido por que seguido le nombraron a ella con otra persona.
-Me alegro de que nos toque juntos.-Dijo el Slytherin acariciándo su capa.
Tenían todo el día para hablar, y tendrían, en la noche, que contar algo sobre esa persona. Todo el día lo tenían libre para conocerse.
-Creo que voy a sonar bastante mal, pero... ¿Podrias explicarme que es esa marca que tenias en el torso?
El Slytherin se río.
-Claro pequeñaja, pero vamos a un sitio más privado.
Abril le siguió hasta la torre de mensajería.(Donde se envían lechuzas)
Scorpius levantó un poco su camiseta dejando ver su marca.
Parecía como si le acabaran de disparar.
-¿Recuerdas el año pasado cuando nos enfrentamos a los dos mortifagos?-Abril asintió.-¿Recuerdas el hechizo que me mandaron?
-Como olvidarlo.
-Es una especie de maldición, -Continuó diciendo.-Me deja esa marca como si me acabaran de disparar y a lo largo del día comienza a dolerme, los dolores no son determinados.
La Ravenclaw quedó atónita, estaba cargando con una maldición, y no había dicho ni una sola palabra.
-Al menos a ti no te pasó nada.-Dijo tocando su mejilla con suavidad.
La chica sonrió.
-Eres muy valiente Scorpius.
-¿Valiente? Más bien ambicioso, estudiante las casas enana.-Dijo riendose el Slytherin.-¿Quieres enviar alguna carta a alguien?
La Ravenclaw negó con la cabeza y le abrazó.
-Siento tanto que por mi culpa tengas esa maldición.
-Tu culpa no es.-Dijo besándola el Slytherin.
