FIFTY SHADES OF GRIFFIN 2 -CLEXA-

Capítulo 14

Estoy empezando a cuestionar mi decisión, de acompañar a la Srta. Griffin en su investigación. Cuando ella dijo investigar, imagine que era explorar la escena del crimen, un lugar sospechoso, interrogar a los testigos y amigos. Ya sabes, la novela-crimen-drama habitual. Lo que no esperaba era: caminar a través de malolientes cloacas, bajo la sucia tierra.

"¿A quién buscamos?" Pregunte cuando sentí que el hedor había disminuido. Mala decisión. No lo había hecho, y ahora estaba reducida a un ataque de tos que no me ayuda en lo más mínimo. La Srta. Griffin rodo los ojos y saco un paquete de algo dentro su bolsillo. Enrollo una pequeña tira color verde en una bolita y lo metió en mi nariz.

"Respira."

Inhalo y estoy sorprendida al descubrir, que las tiras verdes ahora en forma de bolitas en mi nariz, no me dificultan respirar. Y lo más importante, el hedor se ha ido. "¿Qué es esto?"

"Tela de Mimea."

"Oh." Tengo curiosidad por saber más acerca de la tela de Mimea, pero este no es el momento ni el lugar para saberlo. "¿Y qué estamos buscando?"

"Ratas".

"¿Ratas?" La Srta. Griffin me responde con una mirada helada, pero me sostengo en mi sitio. Comienzo a ver a través de las formas de ser de la Srta. Griffin. Conmigo, ella es todo-cortesía-no-golpes. Hasta ahora. Eso parece. Me aclaro la garganta. "¿Ratas reales o. . ".

"Ratas".

"Ya entendí." También tengo ganas de preguntar qué tan seguro es estar caminando a través del alcantarillado, pero no pregunto. La Srta. Griffin puede ser toda-cortesía-no-golpes conmigo, pero eso no es razón para poner a prueba sus límites.

La cloaca es bastante oscura, así que debo quedarme cerca de la Srta. Griffin y en este caso, me alegro del color azul luminoso de su abrigo. No es el abrigo habitual de tela elegante que lleva a trabajar. Éste, es como látex y parece ser resistente al agua, una cualidad útil para las condiciones de este lugar. No es que yo este sin protección. La Srta. Griffin me dio un traje impermeable, que cubre desde mi cuello hasta los dedos de mis manos y pies, y estoy muy agradecida por ello. Incluso si yo estoy super colorida.

Giramos al topar una esquina. Más lodo y fango. La oscuridad comienza a ser menos en cuanto mis ojos se acostumbran a ella y estoy empezando a preguntarme por qué la Srta. Griffin no me levanta en sus brazos y camina a velocidad vampiro, para reducir el sufrimiento hasta llegar a una parada exacta. Estoy a una pulgada de chocar contra la Srta. Griffin pero por suerte, no lo hago. Y digo por suerte, porque sería embarazoso verse torpe, frente a tales amorfos de aspecto asqueroso.

La Srta. Griffin no estaba bromeando cuando dijo que buscábamos ratas. Justo en frente de nosotras, paradas sobre sus patas traseras, hay un montón de viejas ratas, sucias y asquerosas. Sus pelos están cubiertas de limo y sus bigotes empapados de algo baboso. Podría añadir, que son tan grandes que son casi tan altas como nosotras estando paradas. Y es todo lo que puedo hacer, para no salir corriendo, y gritar de asco y horror.

Uno de ellos se transforma en un hombre-rata. Él no es mucho más alto que la Srta. Griffin y en su forma humana, está desnudo, perdiendo así mucho de su factores temibles. "Quien es esa."