Eres todo lo que odio | Kacchako

XIV

Kacchan apretó los dientes en una sonrisa aterradora.

—Me estás diciendo de que vas a tener una cita con la mierda de Deku este sábado... Justo después de decir toda la mierda de que solo estarás conmigo, ¿No?—Vío a Ochako asentir. Él tiro chispas, literalmente.

—Deku-kun es mi mejor amigo, Kacchan, no puedes pedirme que no lo vea nunca más.

—¡¿Entiendes qué puede intentar algo, verdad?!

—Es Deku-kun, ¿Cómo puedes siquiera pensar mal de él?—La castaña frunció el ceño, Bakugou maldijo, si se metía con Deku su linda novia lo asesinaría a insultos.—Además, a Deku-kun no le gustó, solo somos amigos, y siempre lo hemos sido.

—Eso es lo que tú crees.—El rubio gruño, tomando la mano de Ochako.—Como sea, solo dime qué hacen, envíame un mensaje si pasa cualquier cosa, sobre todo cuando vuelvas a tu casa.

Ochako abrió los ojos con sorpresa.

—¿Tan poco confías en mí?—El rubio gruño al ver su preocupación malinterpretada.—Entiendo tus celos, Kacchan, pero soy incapaz de engañarte.

—¿Acaso no lo entiendes...?, ¡Obviamente desconfío!—El rubio frunció el ceño.—Uraraka, a ti te gusta el puto Deku, no me jodas con que no es así.

—¿Por qué sigues con-?

—Reaccionas con él.—Interrumpío.—Eres conciente de que es un hombre. Te pone nerviosa, te provoca algo. ¡Él logra algo que yo no puedo!, ¡¿Por qué no entiendes también?!

—Kacchan...—Ochako quiso decir algo, algo para poder darle seguridad.

—En este momento te estoy dando la mano, ¿Sientes algo?—Ochako solo pudo negar. El rubio la abrazo.—¿Y ahora...?—Ochako apretó los puños, no se sentía inquieta, ni nerviosa, ni avergonzada, solo negó. El rubio tomo la cara de Ochako.—Cuando nos besamos, ¿Sientes algo?

—Si.—El rubio abrió los ojos, Ochako le sonrió.

—¿Qué sientes?

—Ganas de besarte de nuevo.—Ante esa respuesta, el rubio enrojeció, ella río un poco.

—Pero... Tu corazón no late como el mío. Tú rostro se pone como el mío. Y tu mente no queda en blanco cuando lo haces...—El rubio suspiro, Uraraka le acarició el rostro.

—Kacchan, no puedo decirte que me provocas eso cuando no es cierto, pero... Lo disfruto, ¿Eso está mal?—El rubio siguió abatido.—Ciertamente, no puedo evitar ponerme algo inquieta con Deku, a pesar de tener más confianza con él, pero cuando estoy con Kacchan, se siente tan libre, es divertido y me encanta.

—¿Ya no me odias tanto?—La pregunta fue con un tono hilarante, ella tomo ambas mejillas de él y las apretó.

—Tampoco vayas tan lejos, amor.—Coqueta le miró.—Me gustas mucho más que antes, y puedo decir que el conocerte fue la mejor manera de saber que no eras una basura, pero si dijera que te he perdonado completamente y no existe odio hacía ti de mi parte te estaría mintiendo nuevamente, ¿No crees?—Acercandose de a poco, le dió un pequeño beso el los labios.—Pero está bien, ya que puedo decirlo abiertamente ahora.

—¿D-Decir...?—Intento aclarar un poco su voz, el beso lo dejo inquieto.

—Me gustas, Kacchan.

El rubio mantuvo su vista fija en los ojos marrones. Ella le sonreía.

—Tú... Porque... Tienes que decirlo justo ahora...—Intento cubrir su rostro, pero Ochako no lo permitió.—Maldición...

—Quiero ver tu rostro.—Juguetona le tomo las muñecas para que esté no se cubriera, dejando ver ese rostro completamente rojo.

—E-Es asqueroso, ¿N-No?, Así que... Déjame, Uraraka...—Un tono de voz tímido y quebrado, él pobre Bakugou estaba al borde de querer ser tragado vivo. Estaba tan avergonzado.