pasos

1.3K 219 31
                                    

Su relación se podría decir que era muy dulce, se querían mutuamente aunque intentaban ocultarlo, les resultaba estúpido hacer eso, si ya sabían los sentimientos que el otro tenía por el contrario. Solo se hacían los ciegos, puesto que no querían volver a tocar el tema.

Era una noche cálida y el mar estaba tranquilo, descansaba o eso intentaba, llevaba una  Semana que no veía a Dream desde aquel día del beso que se dieron y la confesión que fue un pleno rechazo.

«¿ Te habrás marchado para siempre?»

Cerró sus ojos para descansar la vista y si, había derramado lágrimas ante la idea de nunca más ver a Dream. Se sentía estúpido e impotente. Se sentía culpable.

La noche prosiguió con su silencio y el mar con su arrullo que le daba al mecer el buque.

Su sueño se vio interrumpido al sentir un tambaleó brusco y un quejido en la parte de la proa, Alguien había arribado en su barco y sin su consentimiento; tomó una daga que siempre cargaba consigo y camino con sigilo para asomarse y ver a otro esqueleto pero de estatura chica que se encontraba tirado en el suelo e intentaba alzarse, cabe a destacar que estaba desnudo.

—¡HEY! — llamó con voz grave y firme y  amenazadoramente —¿ Quien te has creído para subir así sin más a mi bote ?¿  Estas ebrio o que? —se acercaba cada vez más y su enojo crecía al no recibir alguna respuesta.

Estaba listo por cualquier movimiento imprudente, pero se sorprendió que, aquel esqueleto temblaba y cayó al suelo, soltando un quejido.

No sé trataba de un ladrón, se acercó y al ver su rostro, la sorpresa de ver que se trataba de quién menos creía.

—¡¿Dream?! — inmediatamente se quitó su chaqueta y se la dio, no se lo podía creer.

[..]

En la mañana, Dream ya contaba con algo de ropa y desayunaba junto a Cross, mientras le contaba lo sucedido.

— así que... De la nada te empezaste a sentir mal y cuando intentabas nadar hacia aquí, tu aleta ya no respondía y te aparecieron ¿Piernas?— Cross miraba sus mismas como si no fuesen reales.

—si..— dijo avergonzado, al sentir la mirada de Cross en el.

No sabian el como ni el porque pero, ya habia sucedido, por una parte Cross se sentía feliz, le podría enseñar la cuidad a Dream pero por otro lado tenía preocupación ya que, el ser que mas amaba se veia triste y confuso.

— te protegeré Dream, te lo juro— dijo en susurró como si solo fuese para el, Desafortunadamente el que antes contaba con una hermosa cola dorada si le escucho.

— gracias Cross.

En la tarde el marinero ayudaba a Dream a caminar, ya que este se caía y las piernas le temblaban al intentar ponerse de pie.

— vamos Dream tú puedes, confío en ti— decía mientras se alejaba unos cuantos metro de el y le extendía los brazos para que esté caminara hacia ellos.

—no lo sé Cross, tengo miedo ¿Y si caigo nuevamente?— su rostro reflejaba miedo e inseguridad.

— estaré aquí para alzarte y darte seguridad.

Lo miró y se llenó de valor, se soltó poco a poco del barandal y dio sus primeros pasos para llegar a Cross y abrazarlo. Estaba tan feliz de haberlo logrado y se alejó para sonreírle cálidamente a quien le daba esa confianza pero nunca se esperó que esté lo besara de sorpresa.

Aquellos pasos fueron la representación de su amor.

Los primeros pasos a la aceptación.

Demi PoissonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora