Honey, I O U

XVI

- ¿Vas a salir otra vez?

______ había bajado las escaleras de puntas para evitar que su madre despegara la vista del libro en su regazo y comenzara a hacer preguntas, cuyas respuestas como ella había planeado, serían mentiras. La chica se detuvo en seco tras escuchar la voz de su madre, y solo consiguió mover la cabeza de atrás hacia adelante.

-Es (NMA)_____, tiene problemas con matemáticas, la ayudaré esta semana antes de que se vaya de vacaciones.

-¿Por qué no viene aquí entonces?

-Porque iremos a un lugar sin distracciones, donde no podamos hablar en voz alta o reír como solemos hacer por cualquier cosa. A la biblioteca.

Su madre levantó una ceja incrédula, pero dado que su querida e inocente hija no solía mentirle nunca, decidió creerle, aunque ante sus oídos su tono de voz se mostraba afectado por una especie de disimulado temblor y carraspeo, acompañado de pasos de saliva más frecuentes de lo normal.

-Pórtate bien.

La joven asintió y corrió hacia la puerta cerrándola de golpe tras de sí. Continuó corriendo hasta llegar al final de la calle, sabía que su madre sospechaba, esto no saldría muy bien.

***

Santiago había llegado a Londres intentando ser cauteloso, envolvía una bufanda alrededor de su cuello e intencionalmente cubría hasta su nariz, usaba lentes oscuros y caminaba encorvado. Sabía que sus esfuerzos eran inútiles, pero le daban valor.

Era seguro que desde el momento en que había pisado Heathrow, él sabía ya que estaba en Inglaterra, y seguramente a que iba, y mucho más que eso, ya tenía un plan para tener su venganza, porque finalmente, todo había sido una trampa en la que había caído en un segundo.

Se había dado cuenta de ello en su viaje de avión, quería atraerlo a él por medio de sembrar la duda en su mente, la mera idea de que alguno de los miembros de su familia se viera involucrado... herido (en especial su pequeña hija), le hacía perder la cordura. Por lo que si Moriarty tenía una trampa para él que lo dirigiera a una muerte, por más violenta y dolorosa caería en ella, aceptaría cualquier cosa con tal de poner a salvo a su familia, la cual no estaba enterada ni tenía culpabilidad alguna en las decisiones del pasado que él había tomado, esperando que obtuvieran un buen resultado para todos. Jamás se habría esperado estar involucrado en un lío de tal magnitud.

No tenía un plan, por más que intentó en el avión ponerse en el lugar del genio criminal a quien esperaba encontrarse una vez más, nada lo suficientemente inteligente llegaba a sus pensamientos. Por más que pensaba en un acertijo inteligente, algo para impresionarlo, tomarlo desprevenido, todo terminaba siendo simple.

Después de un par de días intentando planificar sus acciones, cayó en la cuenta de que debía ir directo al grano y pedir una cita con Moriarty.

Las primeras dos semanas no tuvo respuesta favorable por parte del criminal, hasta que una mañana aquel hombre de cabello rubio, entró a la puerta del apartamento que alquilaba con violencia, y le advirtió amigablemente (mientras lo golpeaba con sus puños y azotaba su cabeza contra el piso y la pared) que dejara de buscar problemas con "su jefe", y se marchó dejándolo inconsciente y sangrando de varias partes de su cuerpo. Sería más difícil de lo que había pensado en primera instancia, pero no se daría por vencido.

***

"How's my little father in law doing? Are you looking after him?" JM

"I just did, boss. Fixed. How's your holiday going?" SM

"Well done, tiger. Fine, It's gonna get interesting at some point" JM

"No fun yet?" SM

"Not enough, but soon. I gotta go. Take care of the business" JM

"No need to ask, boss" SM