After High School[AU][YUUVIC][OMEGAVERSE]

Capítulo 10: El amor del zar y su sacrificio

Advertencia: +18 por menciones de escenas implícitas y peleas de Ian Romanov en el pasado, temas delicados, pero nada relevante que no pueda ser llevado bien porque es parte importante de la trama y aquí queda cerrado muchas cosas y pues aquí se decide el futuro del Yuuvic

Ian Romanov se levantó aterrado en medio de la noche y vio a Seung Gil sentado, leyendo un libro de teorías acerca de las élites que gobiernan al mundo y de cómo ellos no han podido perpetrar a la gran madre Rusia. Eso era realmente alentador para los rusos.

Definitivamente que Elián Nikiforov y el zar ruso, a pesar de sus diferencias, han hecho un trabajo estupendo en conjunto con su gobierno, sin tener que verse a las caras durante años.

Sin embargo, Seung sabía que era hora de que todo eso cambiase, a veces es bueno mirarse de frente por un instante. Por eso iba arreglar ese encuentro entre ambos, Rusia no podía seguir el camino a la fractura política con el retiro de Elián.

—¿Acaso tuviste un mal sueño? —Preguntó Seung cerrando el libro que estaba leyendo y ganándose la atención de su desconcertado amigo Romanov—. Nadie te hará daño mientras me tengas aquí, después de todo me pagas para protegerte y mantenerte informado, pero incluso sin todo eso tienes mi lealtad.

—Tenemos que irnos ya, no debemos perder el tiempo, he trazado un plan de salida de aquí —Ian se acomodó la túnica roja y miró el reloj—. Angelik no puede saberlo.

—Oh, Angelik, oye, ¿es tu hija? Tuve curiosidad cuando la vi aquí —preguntó curioso e Ian se mostró divertido al oírlo—. No, pero ella fue enviada por alguien para espiarme con el pretexto de que sería la ejecutiva del gobierno ruso. Elián la contrató por sugerencia de su amado Chris, así que creo que trabaja con uno de los demandantes, pero pocas pistas falsas le he dejado solo para mantenerla alejada.

Seung no se creía lo que oía.

—¿En serio?

—Mira simulare irme en el auto, le diré que agarraré un vuelo a Dubái por negocios —explicó Ian mientras Seung prestaba atención al plan—. Contraté a uno de estos chinos expertos en maquillaje para que se parezcan a mí y hagan como si me montaran en un avión rumbo Dubái. Antes haré una parada en el hotel donde me está esperando, pero cuando salga él se irá en mi limusina y tomará un avión a Dubái y listo. Ella lo seguirá y no sabrá que me iré en secreto a Inglaterra. Esto va a ser una sorpresa.

Seung le pareció una idea brillante como siempre y lo ayudaría a ejecutar el plan. Era crucial escaparse de toda la gente que quiere someter al gobierno ruso y al zar.

—Cuenta conmigo, entonces, déjame que arregle la cita con Elián —marcó el teléfono ante la mirada expectante de Ian—. Tranquilo, déjame manejarlo, parece que no contesta. Lo volveré a intentar cuando estemos rumbo a Inglaterra. Todo va a salir bien.

Ambos salieron de allí y Angelik se despidió de él. Ella preguntó a dónde iba y él le dijo que era un viaje de negocios importante en medio oriente, Dubái. Aunque no son países cuyas relaciones sean buenas. El pretexto sería que había algo que debía saldar.