2. Cuando la discusión se agranda y creemos tener ''la razón''.
El vivir en pareja no será sencillo algunos días, no te abrazará por las noches, no verás su sonrisa y no escucharás su voz por la mañana diciendo un ''buen día mi amor'' o un ''te amo hermosa/hermoso''; porque podría ser tu mejor día, pero el orgullo permitirá cosas que lo arruinarán, no le darán paso a las palabras y a el amor que con anterioridad les caracterizaba;
Probablemente te sentirás enfadada de explicar, de buscar las palabras (en otros casos será él el que se enfade, de ser así inicia pronto a ver la raíz de las discusiones). Desearás que no sea mucho el tiempo que transcurra para que estén listos para hablar y nuevamente acordar... ¿Acordar? NUNCA, nunca deben tener como definición los siguientes conceptos:
Acuerdo: concluir en usar o no usar cierto comportamiento y aun así incumplir en ello, para discutir por lo mismo 2, 3 o 4 veces más.
Arrepentimiento: pedir disculpas y/o perdón para que ese feo momento pase, para que ella (o él) deje de llorar, o porque el coraje ya pasó; pero nunca para tener la firme conciencia de que fallaron, ni el por qué fallaron.
Promesa y reconciliación: aceptar todo lo que dice el otro, y de manera rápida para que no sea incómodo sobrellevar lo que viene, y jamás meditar sobre la moraleja o enseñanza, mucho menos meditar en el error que ocasionó y que podría seguir ocasionando mínimamente una discusión. Olvidar la promesa al ''tercer día''.
Estarás consciente de que eres igualmente responsable de estar en esa situación, pues estarás de acuerdo en que ya son dos trabajando para un solo objetivo que es el vivir en unión/matrimonio y eso cuesta, cuesta dejar de ser tú, cuesta no ser egoísta, para que alguien más pueda entenderte.
Tendrás presente en la memoria aptitudes negativas de tu pareja cuando se trata de hablar, tal vez desde que usas la primer palabra ya está molesto (a) y a la defensiva, te preguntarás si siempre fue así, y no estarás segura (o), pero esa situación te hará iniciar a ser o ser aún más analítica (o); pensarás que quizá sólo deberías aguantar más y seguir siendo más tolerante, sin embargo conoces a tu pareja y no creerás que sea la solución.
Vas a decidir tomar muchas actitudes, y cada vez serán distintas porque las anteriores no funcionaron; analizarás a tu pareja y vas a saber que las cosas esta vez deben ser más dramáticas para no caer nuevamente en la misma situación, no será cómodo para ninguno, pero será una esperanza de ''mejorar la situación'', obteniendo una plática fluida y lograr nuevos acuerdos con mayor probabilidad de ser cumplidos. Estarás deseosa (o) de que alguna vez tu pareja analice su mal comportamiento que quizá los últimos días, semanas o meses sólo había estado empeorando.
El dolor (sentirse mal) llegará como en otras ocasiones, pero esta vez decidirás no llorar por ello. Te perdonarás por lo mal que te has sentido y asimismo sería bueno que pidieras perdón a tu pareja por tus equivocaciones, finaliza diciéndole todo lo bueno que te hace sentir.
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¡Tengo pareja! ¿Y ahora qué?
RomanceNadie nos prepara para tener pareja, no hay una escuela pública o privada donde sus materias sean: "como leer el pensamiento de tu novia en 2 sencillos pasos" "como elegir qué quieres comer y en donde, sin que tu novio se moleste" o mi favorita "tu...