SOLO UN SUEÑO

FINAL

CAPITULO 40

FINAL

JADE

Mirando el horizonte, en esta hermosa playa, el candor del sol, la arena bajo mis pies, sus ojos, el tacto de su piel, su aroma, su sonrisa, me doy cuenta que todo esta bien, que al final me encuentro en donde quería, con quien tanto añoraba, me siento plena, soy feliz... Tremendamente feliz, aquí con el... se que nada va a estar mal. Miro sus ojos, esos hermosos ojos color miel verdosos con esas pestañas alargadas que tanto amo, el también me mira y me dedica una hermosa sonrisa, alargo mi mano para tocar su mejilla, pero entonces todo se vuelve bruma.

Aquellas tranquilas aguas se tornan violentas, el frió golpea con furia contra mi rostro, mi mundo empieza a ser tragado por la maldita y cruel realidad, trato de aferrarme a sus manos, pero se escurren como agua, trato de volver sobre mis pasos antes de que todo sea devorado, pero es inútil, estamos ahí de nuevo en mitad de la confusión, en ese instante en que Josh estaba tomando mi mano, diciéndome todo estará bien, en sus ojos las palabras; "siempre estaremos juntos"

Despierto de mi sueño, aunque después se vuelve una pesadilla, una horrible de la cual me cuesta lo que para mi parece una eternidad despertar. Grito y me revuelvo en mi cama como loca, su nombre siempre esta presente en cada uno de ellos... ¡Josh!, pero entonces no encuentro consuelo en ningún lugar.

Abro y cierro los ojos, la bruma me envuelve y me regresa a la realidad y luego de nuevo al país de las maravillas. Los ojos me pesan y todo se ha vuelto tan confuso y hetereo que no se distinguir entre lo que es real y lo que no.

Puedo sentir los efectos de los calmantes aún en mi cuerpo, como inhiben mis sensaciones y bloquean mis sentidos, hace días que mi madre viene a verme y a traerme el desayuno en la cama, habla de lo hermoso que esta el día afuera y un montón de palabras muertas que se vuelven un eco vació en la lejanía, una promesa de un siempre que jamás llegará.

Los minutos en los que me la paso despierta, trato de hacerles entender a todos que el sigue ahí afuera, que todo esta bien, me intento convencer de que el vendrá, entrara por esa puerta con su bella sonrisa, pero todos tratan de hacerme entender, que las personas... de la muerte no regresan.

Nada alivia mi dolor, nada, ni llorar, gritar, suplicar, nada puede cambiar el pasado. Ese maldito momento, esa pequeña fracción de segundo en que todo se derrumbo frente a mis ojos sin que pudiera hacer nada, en ese estruendo que como relámpago cruzo su pecho y lo arrebato de mí, de la vida, y torno todo gris. Nuestros sueños murieron junto con el, y jamás van a volver.

Se que vivo, se que existo aún porque mi madre ha intentado que yo siga con vida, o solo respirando, porque esta ya no es vida. Avan trata de hacerme entender que todo pasa por algo, yo solo puedo mirarlo y los ojos se me llenan de lagrimas cada vez que evoca el nombre de el. Angie y Karniel no saben que decir, se limitan a estar conmigo aunque yo no les diga nada.

Cuando aquello paso, cuando lo vi llegar por mi, pensé que todo iba a estar bien al fin. Josh de algún modo había hecho algo que no les gusto a las personas con las que "trabajaba". Al parecer no había comprado su libertad, o no del modo correcto, y al ir por mi lo habían tomado como desafió y un desertor, y actuaron como esa gente lo hace... Ellos iban por mi, sabían todo de nosotros, y el me salvó. Recibió la bala que llevaba mi nombre, y en cambio se sacrifico por mi, dejándome a su vez sin el, ¿Cómo creyó que esto era mejor que morir?, ¡Estúpido!, ¿Qué acaso no sabia que sin el no podría vivir?

En mis brazos, cuando exhalaba su ultimo aliento me pidió lo único que yo no podría hacer, no sin el; vivir... vivir a plenitud y ser feliz.