TE AMO.

23 4 2
                                    


CAPITULO 26


Vamos caminando hacia su casa, no sé que habrá pasado con su auto, y la verdad es que estoy deseosa de que me diga todo. Pero algo en mi interior me dice que no esta bien, que salga huyendo, pero no lo hago, y llegamos a su casa, en su interior todo lucia normal. Josh no había dicho nada en todo el camino, me senté en el sofá.


—Bien, ¿me dirás que te pasa? — Dije al fin, rompiendo el silencio.

—El estaba dando vueltas como león enjaulado — Yo... no... no sé si este bien... — Blanquee los ojos.

—Entonces me voy — Me levanté del sofá, tomé mi mochila. Dispuesta a irme.

—¡No! — Se puso delante de mi tomándome de los hombros — Por favor...

—Me solté de su agarre — Esta bien, me quedaré, pero tu me dirás que pasa, ¿entendido?

—El asintió, me volví a sentar — Si después de que te cuente todo tu quieres irte, estas en todo tu derecho, y jamás te volveré a buscar, desapareceré de tu vida como si nunca hubiese existido.

—¡Josh por dios habla! — Ya me estaba poniendo más nerviosa.

—Sí, sí — tartamudeo un poco, tomo asiento junto a mí. Se paso una mano alborotando su cabello — Yo... yo no tengo familia.

—Sí, lo sé, Avan me dijo que tus padres murieron en un accidente de auto. — Dije sin meterme mucho en ese tema, no sé cuanto le duela aún.

—Josh me miró y negó — No, no... así... así no fue como ellos... — No pudo terminar la frase.

—Me acerque a el, tomé su manos entre las mías. — Josh, calma, dime... puedes confiar en mi — El levanto la mirada. Me miro con dolor y miedo, mucho miedo.

—Los... los mataron... — Al fin soltó y un escalofrió recorrió mi espina dorsal.

—¿Quién? — Fue lo único que atine a decir, Josh se levanto y comenzó a dar vueltas de nuevo — Por favor deja de hacer eso, me mareas.

—Perdón... — Se volvió a sentar.

—¿Y bien?... Josh, ¿quien fue? — Tome su mano apretándola para darle valor y que supiera que estaba ahí para el.

—Unos...traficantes...— respondió apenas audible, pero yo lo escuche... y mi corazón también, porque empezó a latir tan rápido. Entonces un montón de preguntas se vinieron a mi cabeza, traté de calmarme más por el que por mí. Levantó su mirada hacia mi, intentando descifrar lo que pensaba — ¿Entiendes?

—Sacudí la cabeza en manera de un si — ¿Tus papás estaban metidos en líos de drogas?

—No — Dijo secamente, entonces de nuevo mi cabeza dio vueltas, si no eran ellos...

—¿Entonces, tu? — Le pregunté intentando que mi voz sonara indiferente y tranquila, pero en vez de eso salio a manera de gemido.

—Asintió — Por mi culpa... ellos están muertos. — Su voz se descompuso y comenzó a temblar.

—Calma Josh... cuéntame, ¿Qué pasó?

Tomó otro gran respiro y comenzó a relatarme su pasado.

—Cuando entre a la preparatoria era un chico promedio, ya sabes hacia mis deberes, iba a fiestas, nada del otro mundo, pero un día un "amigo" me dijo que era muy bueno en ciencias, que tenia cierto trabajo para mi, en ese entonces mi familia lo necesitaba ya que mi... mi hermana — Ahora sabía que Josh tuvo una hermana — Necesitaba una operación, su corazón estaba mal y la lista de espera era muy larga. El me dijo que si le entraba tendría mucho dinero, al principio me negué, pero aquel día en el que comencé, fue porque a mi padre lo habían despedido y mi hermana se había puesto mas grave. — Pasó saliva y sus manos comenzaron a juguetear con mi brazalete que me regalara en mi fiesta — Así que acepte, no sabía exactamente que era lo que iba a hacer, hasta que me metieron a un laboratorio casero. Metanfetaminas era lo que haría, droga para mis compañeros y más chicos de la ciudad y no se de cuantos mas lugares.

—Josh... — Le acaricie el cabello — Estabas desesperado, no tenias alternativa.

—Sí la tenia, debí... debí buscarme otro trabajo yo debí...

—Tenias mi edad, ¿en donde te emplearían?, se aprovecharon de ti... de tu necesidad.

—Eso me decía a diario, pero la verdad es que mientras mas lo hacia mas me convertía en un ser despreciable. Me decía que me alejaría pero no podía, a mi hermana le hicieron el trasplante de un "donador anónimo", no podía llegar con mi familia y decirles que era un traficante. Ella se curó, estaba mejor que nunca... mi pequeña Emily. — Una lagrima bajo por su mejilla, la cual bese con dulzura, verlo así me rompía el corazón — Un día... llegué a mi limite y renuncie, pero claro como es en las mafias no me dejaron, yo jure que jamás le diría a nadie nada, pero no lo aceptaron. Hice lo que se me ocurrió. Le conté a mis papás lo que había hecho y ellos me apoyaron, tome a mi familia para irnos, debíamos desaparecer del país. Huíamos... cuando... un auto nos persiguió por toda la carretera, mi padre perdió el control en una curva y caímos al vació. Mi hermana y mamá murieron al instante... mi padre en el hospital, y yo duré en coma por muchos meses, cuando salí ellos ya me estaban esperando. Entonces entendí algo; no puedo huir de ellos, estas personas provocaron la muerte de mi familia, y... ahora saben que tengo a alguien más que me importa demasiado, que se metió en mi corazón.

—Sentí una especie de emoción y miedo, ¿eso que quería decir? — Josh...

—El asintió — Jamás he dejado de trabajar para ellos, pero lo hacia por mi, porque no tenia nada, gracias a ese maldito "trabajo" tengo esto, dinero. Pero sabía que si me cansaba ellos no tenían con que hacerme daño, no me quedaba nadie, hasta... hasta ahora que tu llegaste a mi vida, ¿entiendes?

—¿Me harán daño?, ¿eso es lo que estas diciéndome?

—Cada día me exigen más y más, se que el día que me niegue te amenazaran o algo peor...

—Josh, denuncialos.

—El se rió amargamente — ¿Crees que no lo he intentado acaso?, por favor, ellos manejan la maldita policía, y mucho menos lo haría ahora... no dejare que te lastimen.

—Avan sabe de esto ¿no?

—Sí, le conté porque el alguna vez me vio entregando la... mercancía, no me quedo mas que decirle, el sabe todo igual que tu, por eso no lo culpo... y créeme que trate de alejarme de ti, pero es solo que no puedo — Me tomó muy fuerte las manos besándolas — Me robaste el maldito corazón, con tu juventud y tus niñerías. — Acaricio mi mejilla, mis ojos se llenaron de lagrimas — Estoy locamente enamorado de ti. Te amo.

—Mi corazón comenzó a latir a mil por segundo. Joshua Olsen me había dicho que me amaba y no solo eso, estaba loco por mí. Puse mi frente en la suya —Josh... yo... yo también lo estoy... te amo.

—Beso lentamente mis labios, se dio su tiempo para aquello, yo solo me deje llevar — Es por eso — Dijo terminando el beso — Que debería dejarte ir, no puedo dejar que te hagan daño.

—¡No! — Prácticamente grite sosteniéndolo del cuello — No te voy a dejar... yo... te amo y quiero estar contigo por favor. — Lo abrace muy fuerte.


Ahora estaba segura de dos cosas: una es que amaba a Josh sobre todas las cosas. La segunda, es que amarlo era lo cosa mas peligrosa que me había pasado, pero por el estoy dispuesta a enfrentarme a lo que sea.

SOLO UN SUEÑODonde viven las historias. Descúbrelo ahora