¿Y ahora qué?

La finca de los Rigall

- Lector, por qué dejaste de llamarle "Sting-kun"?- preguntó ella mientras miraba al rubio en sus muslos, quien dormía.

Se encontraban viajando hacia la finca de los Rigall, una familia adinerada de Fiore para realizar una misión.

- porque Sting ya es un niño grande, ya no necesita que le llame así, no Frosh?- miró a su amigo.

- Frosh piensa lo mismo- agitando su cola.

- para mí, sigue siendo un niño- comentó Lucy mientras estiraba una de las mejillas del rubio.

- por favor, no hagas eso, seguro que termina vomitando- dijo Rogue, en el otro muslo.

Lucy se sobresaltó, pensó que nadie podría vomitar estando dormido, aunque no estaría mal ser precavida, claramente no quería terminar llena de vómito, por lo que dejó de hacerlo y simplemente apoyó su mano en el espacio que quedaba entre el asiento y Sting.

- ¿cómo te sientes Rogue?- cambió de tema.

- relativamente bien, y tú?

Ella pensó en la pregunta que le hizo, cómo se sentía ella?

Si bien había pasado cerca de un mes desde que entró a Sabertooth, sentía como si siempre estuvo ahí, que desde siempre estuvo en un equipo con los dragones gemelos y los exceeds.

Había avanzado, una parte de ella ya se estaba sanando de la pérdida de Aquario, la disolución de Fairy Tail, de su equipo... Y de la partida de Natsu.

Pero no completamente.

Abrió la boca, queriendo decir que se encontraba bien. Sin embargo, no pudo, las palabras no salían, no querían, ella no lo sentía, no estaba segura.

- yo..- se mordió el labio.

Antes de que pudiese continuar, Sting vomitó sobre ella.

Ella empezó a gritar en medio del tren y mandó a volar a su compañero de equipo, no sin dejar a Rogue recostado en el asiento.

- ¡me voy a cambiar, ya vuelvo!- dijo enojada mientras tomaba una de sus maletas y se dirigió hacia el baño de mujeres.

- ¿ella estará bien?- Rogue le preguntó a su amigo.

- quién sabe- se rasgó la cabeza- pero necesita dejar de pensar tanto las cosas- miró el pasillo por el que se fue ella.

- Frosh cree que Sting fue algo cruel al vomitar encima de Lucy- dijo el exceed.

- ¡es verdad! Sting, eso no se hace- lo regañó Lector- deberías de disculparte cuando vuelva

- no es como si hubiese hecho algo terrible- contestó él, se dejó caer en el asiento mientras empujaba hacia un lado al azabache.

Él sabía que ella estaba pensando de más, después de todo, sintió cómo la mano de la rubia estaba hecha un puño cuando Rogue le hizo esa pregunta.

Vomitar no fue su idea más brillante, pero era lo que mejor le venía en ese instante, usando sus dotes de actor.

Sting sabía que algo estaba mal. Pero no debería de preguntarle.

- ¿fue mi culpa?- preguntó Rogue, frunciendo el ceño.

- no- contestó despreocupadamente.

Cerró sus ojos.

"Por qué todos piensan de más?" Pensó. Y luego, vomitó realmente.

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