Viernes por la mañana. Podría empezar diciendo como desperté, pero lo interesante no comienza ahí, sino a eso de las 10 de la mañana. Mi computador decidió que no quería encender esa mañana, así que solo me quedaba una opción para ver mis calificaciones, y era ir a la universidad. Tome el autobús a la universidad con los nervios comiéndome viva. Era simplemente una tortura, y el camino parecía no terminar nunca. Estaba ansiosa y trataba de distraerme con cualquier cosa, y cuando ya había registrado con la vista a cada pasajero del autobús hasta parecer una psicópata decidí intercambiar mensajes con Amaya todo el camino. No se si la recuerden, así que les refrescare la mente. Amaya es novia de mi compañero de clases, Luis, su padre trabaja con asuntos internos de la prisión de Ohio y me ayudo bastante una ves. Nos estuvimos mandando mensajes una a la otra durante un rato, cosas sin interés hasta que entramos en el tema de Jack. Anteriormente ya le había contado sobre todo el proceso legal que estábamos empezando con el, ya que creí que en algún momento necesitaría su ayuda, o mas bien la de su padre, así que Amaya tenia una pequeña idea sobre lo que yo sentía por Jack.
-hace cuanto no se hablan?
-tres días
-no te dejan visitarlo amenos que sea un domingo verdad?
-así es, supongo que no me puedes ayudar con eso verdad?
-lamentablemente no, ahora estoy en la oficina de mi papa, lo mas que puedo hacer es decirte si esta vivo –se que lo dijo en forma de broma, el emoticón sacando la lengua me lo confirmo, pero aun así era triste saber que puede pasarle cualquier cosa ahí dentro y yo no tener idea-
-puedes hacer eso?
-era una broma … es decir puedo hacerlo, pero no crees que es algo extremista?
-tal vez… tienes razón
-bueno, voy a echarle una mirada rápida al registro para confirmarte que esta vivo, aunque pienso que es algo exagerado.
-gracias
-te envió el mensaje en un rato
-bien –el mensaje no llego, y yo baje del autobús y caminé a la facultad de psicología. Algo que yo siempre he considerado cruel, además de el hecho de que esta facultad quede tan lejos, es que publiquen tus calificaciones en un enorme mural junto al salón, por que? Pues por que todo el mundo las ve! Si repruebas el mural se encarga de decirle al mundo que fracasaste, necesitas mas de un 6.5 para pasar, pero si sacas un 6.6 la gente comienza a dudar de si deberían dejar que te gradúes. Así que mi corazón estaba estrujándose dentro de mi pecho cuando caminaba hacia el mural. Alrededor de este habían varios estudiantes, y me pregunte si la razón seria la misma que la mía. Tecnología rebelde. Unos pasos mas y me encontraba frente al mural, 97 nombres y 97 calificaciones junto a ellos. Busque con la vista el mío mientras un chico detrás de mi cuyo nombre nunca me interese en aprender celebraba el hecho de que se graduaría. El numero 65, Christine Jacobs con una calificación de 8.9- me graduare!! –el chico detrás de mi me abrazo de pronto-
-yo también!! –no conocía su nombre pero ambos reímos juntos, cuando nos separamos y el chico se fue, volví a mirar la lista, estaba feliz, ya podía irme en paz, pero como toda intrusa que suelo ser, busque el nombre de algunos de mis amigos. Luis castillo, con una calificación de 9.5, marcada como la mejor de la clase. Summer J. Chase con un 8.7 , y kelly Andrelos 5.2. kelly no se graduaría y pensé en llamarla y consolarla pero eso no me sale bien. No graduarte no es algo positivo obviamente pero tampoco lo es vivir haciendo algo que no te gusta. Tal vez ella retomaría la materia el próximo semestre y logre graduarse, o tal vez tome otra carrera, o simplemente abandone la universidad. Antes de irme recordé buscar la fecha de la graduación, estaba en un pequeño letrero junto al mural con varias informaciones. 10 de agosto a las 8:30 am. Un mes y diez días exactamente. Anote las demás informaciones y me fui. Tome un taxi ya que iría camino a mi casa, y apenas le di la dirección al chofer mi teléfono comenzó a sonar. Era Amaya, conteste al instante.
