‹ Homelander ›

695 85 16
                                    

El silencio continuó unos minutos más, Wirt trató de calmarse también.

Respiró hondo un par de veces hasta que encontró las palabras que buscaba.

— Escuchen bien: En este instante volveremos a la "base", descansaran y nós prepararemos para ir a rescatar al niño triángulo.— Hasta él mismo se había sorprendido de lo tranquila y fuerte que era su voz; tomó un poco de aire y continuó hablando —Esto parece ser una trampa, así que esperemos lo peor.

Todos asintieron en silencio, incluso los dos heroes que se habían unido recientemente al grupo.
Wirt ni si quiera se molesto en abrir un portal, simplemente los teletransportó a todos a las afueras del límite de el lugar seguro. Lo que hizo que todos tuvieran un horrible dolor de cabeza que les duraría un par de horas.

Wirt salió volando hacia el Molino, necesitaba estar solo.
Entró dando un golpe fuerte a la puerta, asustando de muerte a Morty quien se encontraba de pie en la sala.

Espera un momento ¿Morty? ¿Que hacia él aquí?

Wirt paró en seco, la puerta se cerró detrás de él con fuerza. Se quedó mirando a Morty, esperando a que hiciera o dijera cualquier cosa.

Morty también se había quedado petrificado, miraba fijamente al joven de los cuernos y parecía querer decir algo.

—Morty... —Wirt comenzó, pero Morty negó con la la cabeza. Él hablaría primero.

—Ya se que no soy bienvenido aquí, pero creo que esto sobrepasa cualquier trato entre tu y yo. — Wirt se dió cuenta de que el chico del parche sostenía un objeto con fuerza en sus manos.

—¿Que traes ahí? — inquirió sin mucha delicadeza, no tenía tiempo para otra cosa que no fuera pensar en como salvar a su amigo.

—A eso vengo, esto es lo que me ha traído aquí en primer lugar. No se lo que es, pero supongo que tu sí.

Se acercó a Wirt con cautela y le mostró el objeto, era una foto, un poco desgastada y se notaba que ya tenía mucho tiempo desde que había sido tomada. Wirt examinó la foto y reconoció a las personas que estaban en ella, eran Bipper y Mabel.
Le arrebató la foto a una velocidad increíble y la analizó a profundidad, definitivamente eran ellos, pero mucho más jóvenes, quizá doce años o menos.
Ambos se veían felices, Wirt no pudo reconocer la expresión de su amigo ni tampoco la de Mabel, de seguro esos habían sido mejores tiempos.

—Una niña me la dió, no se como me encontró, pero llego corriendo y solo me dijo "Tu sabes que hacer"— Morty se encogió de hombros como quitándole importancia — Y como no se me ocurrió nada más vine hasta aquí, esperaba que tu tuvieras respuestas o por lo menos alguna explicación. ¿Es alguna clase de broma de Bipper?

—Espera. ¿Una niña? —Wirt guardó la foto en uno de sus bolsillos, la iba a revisar con detenimiento después.

—Si, bueno. Quizás fuese un niño, no estoy muy seguro. Al principio creí que era Chara, pero había algo diferente en ella... —La expresión de Morty se oscureció cuando menciono a Chara, ambos habían salido por un tiempo, pero ella un día simplemente había desaparecido.

—¿No te dijo nada más? ¿Algún otro detalle que puedas recordar?—Wirt sonaba cada vez más ansioso y desesperado.

—Espera ¿esta pasando algo malo?

Wirt suspiró, supo que si Morty había llegado a su puerta con una foto de Bipper era una señal más que obvia para reclutarlo.

—Alguien ha raptado a Bipper, nós han citado esta noche para intentar llegar a un acuerdo.

Morty abrió los ojos y asintió, era un chico listo por lo que no le costó mucho entender que pasaba.

—¿A que hora salimos?

—En un par de horas...

—Estaré aquí antes.

—Gracias.

Wirt simplemente continuó su camino, ahora iba más lento, aún quería estar solo un tiempo.
Pero ahora tenía una razón.

<•>


Frisk se detuvo frente a un árbol para tomar un descanso, había estado corriendo de un lado a otro desde hacía horas.
Ya había dejado tres mensajes, solo le faltaba entregar uno más.
Sintió una presencia detrás de ella, ya lo esperaba, le habían advertido sobre él.
Paró la bufanda que se dirigía hacia ella con una rama, pudo sentir la sorpresa del atacante, pero antes de que siguiera levantó ambas manos en señal de paz.

—Vengo a dejarte un mensaje... —dijo mientras buscaba "el mensaje" en la bolsa que llevaba.— Aquí, ten.

Le entregó un paquete blanco, a simple vista parecía un lápiz envuelto en tela blanca.

—¿Que es esto?

—No puedo decir nada más, tu sabrás que hacer. —Ni bien terminó la frase saltó al árbol más cercano y desapareció entre las ramas y hojas.

Randy examinó el paquete con cuidado, luego lo abrió.
En su interior, cuidadosamente envuelto, se hallaba una pequeña rama de árbol.
Primero pensó que no tenía sentido, hasta que reconoció el tipo de árbol del que venia la rama.
«Pino» pensó.
Luego las cosas encajaron en su mente,  pino, árbol.
Bipper y Wirt de seguro estaban en problemas.

Guardo la rama en uno de sus bolsillos y se dispuso a correr hacia algún lugar, pero antes de que pudiera hacer cualquier cosa una figura conocida le cortó el paso.

—Chara... —Randy adoptó una pose defensiva, hasta que se dió cuenta de que ella llevaba una rama similar a la suya en la mano.

—No quiero pelear, no estoy aquí por eso. —Ella le mostró la rama, parecía tan confundida como él.

—Entonces...

—Creo que se a donde debemos ir.

Ella comenzó a correr, no espero respuesta ni confirmación. Sabia que la seguiría; después de todo, ella sabía a donde ir.

Frisk se quedó mirando la escena desde un árbol, había marcado el camino para ellos. No lo había hecho muy fácil ni tampoco imposible, la cosa era que llegaran en el momento perfecto.

—Vaya, eres hábil niña.— una voz aguda resonó en su cabeza.

—Solo estoy siguiendo el plan.— respondió mientras bajaba del árbol de un salto.

—Bien, espero que todo salga bien. Todo esto... Es demasiado arriesgado.

—Tranquilo, él sabe lo que hace. Y creo que tu más que nadie sabe lo que listo que puede llegar a ser.

—Eso no evita que me preocupe...

—Yo también estoy preocupada, pero debes confiar.

—Yo no confío en nadie.

—Ya es hora de que regreses con él, estamos cortos de tiempo.

—Le diré que todo va de acuerdo al plan. Si es que tenemos suerte nós veremos más tarde, hasta encontes, niña.

—Hasta encontes, Bill Clave.

Flowers «Bad end friends»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora