Flowers «Bad end friends»

«¿What's going on?»

Finn no podía creer lo que veía.

Su amigo, el chico de los ojos de oro.

Bipper, estaba ahí, frente a él, lo había sacado de ese lugar tan frío. Dejó a sus pingüinos con cuidado en el suelo y corrió para darle un abrazo a su amigo

—Te he hechado de menos amigo.—dijo Bipper mientras correspondia al abrazo.

—Yo también— dijo al borde de las lágrimas. —¿Donde estamos?

—No puedo decirte, pero debemos irnos pronto.— Bipper se alejó de Finn y comenzó a caminar recogiendo algunas cosas del suelo.— Frisk ¿Estas bien?

Antes no lo había notado, pero en una esquina de la habitación se encontraba una niña muy parecida a Chara, sostenía un cuchillo ensangrentado en las manos.

—Si, solo es un corte pequeño.— extendió su mano para mostrársela a Bipper, pero su herida se abrió y comenzó a sangrar nuevamente.

—Bill, dale unas vendas.— ordenó Bipper.

¿Bill también estaba aqui? Finn estaba muy perdido, no sabia que estaba pasando y no entendía nada.
Tenía uno de los pingüinos en la cabeza y el otro en los brazos, al menos eso le hacia sentir seguro.

—Esto... ¿Bipper?— preguntó Finn intentando llamar la atención del chico de ojos amarillos— ¿Y que pasó con Wirt?

—Te lo explicaré luego— una sombra cruzó por los ojos del chico, algo que le dijo a Finn que talvez alguien moriría pronto —Por ahora debemos salir de aquí antes de que se entere de que te sacamos de esa montaña.

—¿A donde vamos ahora?— preguntó Frisk mientras terminaba de vendarse la mano.

— Primero vamos a la guarida del bosque, Spinel esta fuera cuidando la linterna así que el lugar es seguro.— Bipper comenzó a abrir un portal mientras hablaba— Dejaremos ahí a los pingüinos, descansaremos unas horas y luego saldremos a la emboscada de Percy; con suerte en unas horas podramos eliminar a lucifer para siempre.

Finn no entendía nada ¿Quienes eran todas esas personas que estaba nombrando?

— ¿Que hay sobre la linterna?— preguntó Frisk, se le notaba algo preocupada.

— La linterna es nuestra carta bajo la manga, si es que Wirt llega a querer... Tomar represalias. —Dijo serio.

Finn se abrazó a los pingüinos, tenía miedo. Mucho miedo.
Sentía que se había perdido de muchas cosas, que lo que él recordaba de sus amigos y su hogar ya no estaba ahí.

Que en algún momento de su ausencia todo se había desmoronado.

Que todo había sido derrumbado hasta los cimientos.

En un abrir y cerrar de ojos todo su mundo se había derrumbado.
¿Era todo su culpa?

—¿Por que Wirt no esta aquí? —Preguntó Finn con algo de temor.

Bipper le miró con un gesto ilegible, como si estuviera ocultado algo.

—Nós encontraremos con él después... —Bipper miró a Frisk— y tenemos que estar preparados.

Frisk asintió con un solo movimiento de cabeza.
Finn vio de reojo como Bill tenía una sonrisa en los labios, pero no de esas sonrisas alegres o amables, si no una sonrisa que, viniendo del demonio, daba mala espina.

Finn no pudo contener su preocupación, ¿que estaba pasando? ¿Por que todo era tan extraño? ¿Por que tanto misterio?

Los pingüinos le miraban preocupados también.

Entonces Bipper lo tomó de la mano sorpresivamente.

—Vamos amigo, debemos seguir.— Finn no lo entendía, no entendía nada, se sentía estúpido y desplazado.

Pero miró a Bipper a los ojos, esos ojos dorados, con pupilas de gato. Ojos inteligentes, curiosos, atentos.

Aunque por un momento le pareció ver como se nublaban, pensó que había sido su imaginación.
Y le dio la mano.

Bipper sonrió sinceramente y comenzó a ordenar a los demás para que limpiaran el lugar y se alistaran para partir lo más antes posible.

Finn tomó a los pingüinos y los metió a una bolsa que le dió Frisk que estaba hecha para ellos, como si desde el principio hubieran sabido que los tendria con él.

Cuando todo estuvo listo Bill abrió un portal, primero pasó él, luego Frisk.
Al final Bipper se quedó con él.

—¿Listo? —le preguntó mientras le estiraba la mano.

¿Realmente estaba listo? Él no lo sabía, no sabía que había detrás del portal, no sabía que pasaría el día de mañana, no sabía que pasaría en el futuro. Y eso le daba miedo.

—Oye— Bipper lo sacó de su ensoñación— Se que todo esto es difícil, confuso y terrible. Se que salir de eso y llegar directamente a este... Conflicto es pedirte demasiado. Se que talvez quieras descansar, que lo que quieras sea llegar a un lugar seguro... —

Finn le miró con curiosidad, a sus ojos le parecía que el chico de ojos dorados estaba siendo sincero.

—Pero estamos luchando por tener un lugar así.—Siguió después de una pausa.— y quisiera que lucharás con nosotros, conmigo. Que podramos todos juntos hacer un hogar... —Bipper vio la duda en los ojos de Finn

Le tomó ambas manos y sonrío.

—Dime, ¿confias en mi?

Finn dudo un poco. Pero después de unos segundos le apretó las manos en respuesta.

Confiaba en él.
Le confiaría su vida entera.

—Entonces sígueme. Vamos a luchar por nuestro hogar.

Y ambos cruzaron el portal, con las manos entrelazadas.

Cruzaron a lo desconocido buscando luchar para conseguir un hogar.

Un hogar que seria muy duro de conseguir.

Hola. No me peguen.
Es corto, lo se.
Perooo, tengo otro cap ya hecho.
Mañana o esta noche lo publico.
Bye~