𝐸𝑠𝑡𝑜 𝑒𝑠 𝑢𝑛 𝑠𝑢𝑒𝑛̃𝑜.

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Capítulo 10

Los piratas han conquistado la tribu y ahora todos están siendo presos. Garfio, Tigrilla y el jefe, se encuentran atados y arrodillados en medio de la plaza que ahora se encontraba teñida con colores vivos dando a entender que habían sido masacrados. Mientras eran juzgados les estaban apuntando.

- Todos estos años nos estábamos destrozando las manos para encontrar trocitos enanos de Pixuri y ahora, gracias al señor Smee, me entero de que ahora sabéis donde están pero en gramos -comento Barba Negra causando la risa de su tripulación- esto será rápido -recargó su pistola- ¿donde esta el niño y como encontraremos el reino de las hadas? y si cooperáis, tal vez salgáis de esta con vida.

- La muerte es la mayor de las aventuras -dijo el jefe para luego, Barba Negra, acabar con su vida.

El estruendo del disparo se escucho a quilómetros del recinto el cual llego a oídos de Scarlett, alertándola puesto que, entre todo ese silencio que se había generado anteriormente, empezaba a temer que ese alguien hubiera sido Peter, Tigrilla o Garfio... Smee le daba igual.

- Salven a la nueva jefa -alzo la voz Barba Negra- la princesa Tigrilla -recargo su pistola mientras los demás hacían soniditos raros.

- Tienes que decirlo o te matará -comento Garfio.

Por otro lado, no tan lejos del espectáculo que se estaba produciendo, Peter bajaba las rocas para observar uno de los pájaros que se encontraban debajo de el pensando si lo que iba a hacer merecía la pena. Armandosé de valor salto hacía este provocando que el pájaro se volviera agresivo queriendo atacarlo.

Mientras tanto con los piratas; Garfio no iba a permitir que Barba Negra matara a Tigrilla ya que, para ser sinceros, se nota a quilómetros que siente algo por ella.

- Hay un mapa para llegar al reino de las hadas -reveló Garfio.

- ¡Traidor, como has podido traicionarnos! -se quejo Tigrilla.

- ¡Intento salvarte la vida guapa, no volveré a hacerlo -sigue soñando Garfio, sigue soñando. Todos sabemos que morirías por ella, al fin y al cabo, es amor.

- Capitan -advirtió el que hace tiempo atrás le había abofeteado a Garfio.

Todos voltearon a la dirección en la que el pirata miraba para luego encontrar a un pájaro surcando el cielo mientras Peter iba montado en este siendo perseguido por más pájaros.

- Matarlos a todos -ordeno.

Algunos pájaros agarraban a los piratas para luego soltarlos en una distancia considerable mientras otros simplemente se estrellaban contra los arboles por la cantidad que había. Garfio y Tigrilla escapaban por sus vidas ya que debían encontrarse con Peter y dar con el paradero de Scarlett.

El disparo de un pirata alcanzó al pájaro que Peter montaba, provocando que Pan acabara siendo lanzado a una carpa, rompiendo así el techo. Cuando se levanto, escucho la voz de Barba Negra.

- ¿Puedo decirte algo? Jamás encontraras a tu madre.

- Si que la encontraré.

- Te aseguro que no. Jamás la encontraras, ¿sabes por qué? -Peter negó- porqué yo la maté. La maté con esta misma espada, como haré contigo -finalizó para luego romper la tela roja que los separaba- ... -suspiro- cierra los ojos Peter y piensa en algo que te haga feliz -dijo para luego alzar la espada con el objetivo de clavársela, pero le habían quitado a su objetivo ya que Garfio, ayudado por una cuerda, lo rescato- ¡Eso es de mala educación! -grito para que le escucharan.

Una vez arriba, se encontraron a Tigrilla y Scarlett. Al ser conscientes de que era mal momento para preguntar, se conformaron con un abrazo.

- Tenemos que correr -informo Garfio.

- ¡No! tenemos que saltar -dijo Tigrilla para luego subirse a lo que sea que estaban sujetos. La cosa bajo recibiendo disparos por parte de los piratas- Niños, ¿estáis heridos? -pregunto una vez abajo.

- Yo también estoy bien -dijo Garfio sarcástico- gracias por preguntar.

- Ni me hables, por tu culpa todo lo que mi pueblo hizo, será destruido y por tu culpa el jefe esta muerto.

- Vaya -susurro Scarlett- si que me he perdido muchas cosas -miro a Peter el cual se estaba yendo- hey, Peter -llamo pero este ni se inmuto.

- Smee era el chivato.

- Era tu amigo.

- Exacto, era y como pretendías que iba a saberlo.

- Deberías haberlo sabido.

No era necesario estar presente para saber que discutían. Una vez dejaron de discutir se dieron cuenta que ninguno de los muchachos se encontraba allí.

- ¡Peter! -llamo Tigrilla haciendo que este volteara mostrando su rostro lleno de lágrimas causando una gran preocupación a los presentes.

- M-Me has mentido, todos habéis mentido.

- Lo siento.

- ¿Eso significa que es verdad? ¿esta mi madre viva o no lo esta?

- Barba Negra a dicho la verdad; si te hubiéramos dicho la verdad, habrías abandonado tu destino.

- No se quien creéis que soy, ni tampoco que esperáis que sea... ¡Pero no lo soy y no puedo hacerlo! -finalizo entre lágrimas para salir corriendo.

- No se muy bien lo que a pasado, ni lo que se supone que le revelo Barba Negra, pero de una cosa estoy segura, mentirle a Peter y darle la ilusión que siempre a querido que era conocer a su madre; me parece demasiado cruel. Se que el es el elegido, pero no teníais derecho a ocultarle eso y más sabiendo que era algo personal -finalizó Scarlett para ir detrás de el ya que se sentía mal por haberlo dejado solo y haber tenido que afrontar la revelación de Barba Negra solo.