Blindness ♡ •[PJM]•

열. TEN.

- ¡No puedo creer que en mi vida no haya comido todo esto! - Dije emocionada por la dulzura de aquel alimento.

- Imaginé que te gustaría. - Ríe JiMin a mi lado por mi emoción.

- Será mejor ir a buscar a los chicos... Joy tiene algo preparado para ellos y quisiera estar presente. - Lo tomé de la mano.

- ¿Es por eso que sonreían malvadamente cuando estábamos en casa? - Deduce y yo asentí.

JiMin se encargó de guiarme y buscar a los chicos, yo no podía reconocer sus voces por el hecho de que había demasiados sonidos mezclados.

Hasta que a lo lejos entre todo el ruido, logré escuchar el grito de parte de mi mejor amigo Hobi, ya lo conocía.

- JiMin, escuché a Hobi por halla. - Señale y JiMin camino a lo que era esa dirección.

- ¿Donde estaban? - Reclama mi hermano. - Creímos que se habían ido o perdido. - Su voz sonaba algo graciosa.

- En realidad pensamos eso... - Susurra JiMin y yo solté una pequeña risa. - Hanri tenía hambre y ustedes estaban ocupados discutiendo como para notarlo. - Contesta JiMin casi no dando interés.

- De acuerdo es hora de subir a la montaña rusa. - Recomienda Joy y podría asegurar que tenía seguramente una sonrisa siniestra en sus labios.

- ¿Montaña rusa? - Los cinco chicos preguntaron lo mismo y tragaron duro.

- ¿Qué? ¿Tienen miedo? - Les retó Joy.

- ¡Yo sí! - Tae habló con un tono de voz inocente y Joy río.

- De acuerdo Tae, tú no subirás si no quieres. - Le tuvo compasión.

- Dije que tengo miedo, no que no subiré. - Me sorprendió bastante que el Tae tímido y introvertido con las chicas desapareciera para mostrar a uno confiado.

Nos dirigimos a lo que sería la montaña rusa, yo opté por no subir, ya que desde que perdí mi vista me prometí a mi misma no volver a experimentar cosas como estas hasta recuperar mi vista. Además de que pequeños fragmentos del accidente donde la perdí venían a mi mente y con eso la cólera y la depresión.

Todos aceptaron mis palabras sin rechistar y se fueron a lo que era la fila mientras yo me quedaba en una mesa de madera cercana al juego. JiMin se encargó de comprar un alimento que tampoco había probado para entretenerme miestras ellos estaban arriba. Tomé eso como un gesto muy lindo de su parte, no quería dejarme sola, pero Joy y Jaebum se burlaban de él diciendo que era un cobarde y JiMin terminó por seguir su instinto y subió. Un pensamiento llegó a mi al emparejar a Joy y Jaebum, y es que harían una muy linda pareja, a pesar de ser algo diferentes, coincidían sobre muchas cosas. Pero dudaba que Jaebum estuviese atraído por ella y ella de él, así que la descarté de inmediato.

Me dispuse a comer mi alimento hasta que mis oídos lograron escuchar las jadeantes voces y respiraciones de mis amigos que seguían en un estado de terror absoluto.

- Son unas niñas. - Se burla Joy a carcajadas y no pude evitar sonreír ante la mención de eso y seguramente los rostros de molestia de los chicos ante eso.

- ¡Lo hiciste a propósito sabías que la Montaña era demasiado alta y grande! - Le reclama mi hermano como ya se le había vuelto costumbre y todos estallamos a carcajadas.

Resulta que todo lo que restó de tiempo la pasamos riendo y comiendo comida chatarra, bajo influencia mía y de los demás hicimos que mi hermano probara su primer Hamburguesa, lo cual hizo que se enamorara completamente de el alimento diciendo que se encargaría de comerla seguido. Fue divertido y agradecía de todo corazón a mis amigos que lograron subir mi ánimo y mi tristeza desapareció, en verdad agradecía el tener unas personas tan increíbles rodeando mi vida.