El Mundo Ideal De Kaoru. | Naruto Shippuden |

¿Amor? |Eligiendo destino.|

|Desde aquel día pasaron varios meses, asegurándome de que la historia iba como era, aunque algunas cosas cambiaron y en otras intervení. Ya éramos como una familia, nos reíamos, ayudábamos e, incluso, llorábamos juntos. Si me dieran a elegir entre volver a mi mundo o quedarme en este, creo que ya sabríais cuál escogería. Itachi y yo éramos los líderes, habiendo entre nosotros un vínculo inseparable. Durante todo este tiempo me entrenaron, enseñándome nuevas técnicas y trucos para salir de algún apuro. En el día de hoy Itachi y yo salimos al pueblo, eso sí, aún no habíamos salido del libro Bingo, por eso fuimos camuflados. Íbamos a mirar, comprar y a pasar el día.|

Itaaaaaaachi. -Dije cual niña pequeña.-

Dime. -Dijo mirándome con una sonrisa.-

Me da miedo la guerra. -Me paré en seco, observando el suelo.- No quiero que os pase nada, a ninguno.

-Itachi me cogió de la mano, llevándome a un parque, sentándonos en un banco a la sombra. El lugar estaba lleno de niños jugando y caprichosos.- Sabemos cuidarnos, tranquila. -Me quitó un mechón que tenía en el rostro, con esa sonrisa que me ponía nerviosa.-

Lo sé, pero aún así... -Apreté mis puños, agarrando mis pantalones, arrugándolos. Estaban tan ida que a mis pies llegó un balón de fútbol, lo miré y escuché una voz.-

¿Me podrías pasar el balón, por favor? -Dijo un niño pequeño algo avergonzado.-

Claro. -Sonreí, tirándole el balón de una forma segura.-

Me encantas. -Susurró el Uchiha mientras cruzó su brazo por mi espalda, a la altura de mis hombros, abrazando me.- Tu simpatía con las personas, el cómo las tratas, esa sonrisa tuya que apenas desaparece, el querer proteger a tus compañeros antes que a ti. -Finalizó mirándome con esos ojos negros.-

Eso debería decirlo yo. -Me sonrojé, mirándole con la cabeza un poco gacha.-

Kaoru, debo decirte algo y espero que me aguantes. -Dijo nervioso sin apartar la vista de mí. Yo simplemente asentí, igual o incluso más nerviosa que él.- El día en que te conocí no sabía nada de ti, simplemente me dijeron que te trajera a la base. Los días fueron pasando, y me fijé más en ti, en cómo actuabas con los demás. Me sorprendí por lo que me dijiste en el bosque “No lo lleves todo tú solo...”. Odiaba profundamente que el baboso de Hidan te tocara, y que Deidara jugara contigo de esa manera. Bueno, en fin. No quiero que tus labios besen unos que no sean los míos, y ya lo has hecho varias veces con el artista. -Dio una bocanada de aire, dejando salir un suspiro.- Te amo, Kaoru. Y quiero que pases tus días conmigo. -Me miró esperando ver mi reacción. Su mirada reflejaba sinceridad y felicidad.-

-Me encontraba emocionada y nerviosa, mis palabras no salían de mi boca y en verdad quería eso, lo que él me había propuesto, pero hasta que no se acabe la guerra... - I-Itachi, yo también deseo eso. Pero lo deseo para vivir tranquilos, no cuando va a comenzar una guerra. -Finalicé acariciándole una mejilla.-

Entiendo. -Respondió suspirando.-

Seremos pareja, y cuando dé por terminada la guerra viviremos juntos. -Propuse mientras le daba un beso en la frente.- 

Acepto. -Sin pensarlo dos veces la besó en los labios, un beso que sí era correspondido lleno de pasión y sentimientos. Al poco se separaron por falta de oxígeno.- Vamos, los demás estarán preocupados.

S-Sí. -Susurré agarrándole de la mano mientras observaba su firme espalda. Me sentía tan protegida a su lado... -

-Llegamos ya de noche y todos estaban durmiendo. Ese día se me antojó dormir junto a mi Uchiha, así que le pregunté.- Itachi... ¿P-Puedo... etto... dormir contigo? -La vergüenza me invadía haciendo que cerrara los ojos, replanteando me si hubiera sido mejor no preguntarlo.-

¡Claro! -Cenamos, y nos fuimos a la cama. Hubieron juegos, cosquillas, risas y unos cuantos besos sin llegar a más. Pero en fin, nos dormimos y ya empezaba la guerra.-