Los Sentimientos de un Omega -OnTae & 2Min-

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Taemin y Minho salieron del instituto sin que su abuela y tío se dieran cuenta.

Minho: ¿No es de mala educación irnos sin despedirse?

-Taemin le da una sonrisa pícara a Minho, haciendo que este se sonrojara.- ¿Enserio quieres despedirte de ellos oliendo a mí y yo oliendo a ti? – Minho negó rotundamente avergonzado.- Eso pensé.

-El joven alfa, jalo al omega hasta tenerlo en sus brazos y robarle un beso que le quitara el aire.- Eres lo más erótico que le ha pasado a mi vida.

-Taemin sonrío entre dientes, devolviéndole el beso a Minho.- Te falta mucho por vivir, pequeño alfa.- el castaño se alejó, tomando la mano del joven.- Pero no te preocupes, yo te enseñare.- Taemin le guiño haciendo ruborizar a Minho.

Minho: No puedo competir contigo.

Taemin: Así es. Más vale que dejes de intentarlo.

Minho: ¿Y qué haremos ahora? Tenemos hasta el día de mañana para saber si estas esperando.

-Taemin se empezó a reí, jalando a Minho.- Oye chico guapo, ¿quieres tener una cita conmigo?

Minho no pudo evitar soltar una carcajada, dejándose llevar por Taemin, el omega de sus sueños.

-Taemin había hecho lo que su corazón siempre había deseado: disfrutar un desayuno dulce con una persona que lo hacía sentir especial.- ¿Qué tanto me ves?

Minho: Tus labios podrían convertirse en mi perdición.

Taemin: Interesante.- Taemin empezó a jugar con la miel, poniéndose un poco en su labios.- Entonces hagámoslo más entretenido.- Minho se terminó de acercar, lambiendo aquello prominentes elfos.

Del desayuno, pasaron al cine, tomándose de la mano, viendo una película de terror de la cual a ninguno de los dos le causo miedo, riéndose al final.

Fueron a un parque de diversiones, en donde montaron todos los juegos sin saltase ninguno. Y cuando la noche llego, ambos fueron al parque, sentándose en una banca admirando la luna.

Taemin: Mi pesadilla, en realidad es algo que me paso de verdad... Mi pesadilla, es el accidente de mi madre.- Taemin tomo la mano del joven sin voltear a verlo. Sus ojos estaban puestos en el cielo.- Cuando tenía ocho año, uno de mis mejores amigos trato de huir conmigo ya que lo iban a separar de mí. Yo me asuste y empecé a resistirme. Ambos quedamos en medio de la calle. No vimos cuando un auto se aproximó a nosotros. Entonces, sucedió. Mi madre por salvarnos, nos aventó recibiendo ella el impacto. Mi amigo, iba con su padre. Yo intente pedirles ayuda a ambos, pero huyeron, dejándome solo con ella mal herida. Tenía miedo, no sabía qué hacer. –Minho, apretó su mano, dándole la sensación de seguridad que necesitaba para seguir hablando.- Cuando las personas empezaron a llegar llamaron a emergencia, pero fue demasiado tarde... Yo... ni siquiera pude despedirme de ella.- Las lágrimas se acumularon en Taemin haciendo que Minho lo abrazara.- Quería despedirme de ella, decirle lo mucho que la amo.

Minho: Estoy seguro que ella lo sabía.- Taemin asintió, tomando entre sus manos el rostro de Minho.-

Taemin: Lo sabe, lo supe anoche gracias a ti.

Minho: Yo solo te di la pista para que pudieras hacer lo correcto.

Taemin: No solo eso.- Taemin lo abrazo, sintiendo aquel aroma cálido llenar su corazón.-

-Minho se quedó ido mientras abrazaba a Taemin.- Sabes, no estoy aquí por un descanso... hui.- Taemin se separó de él, viéndolo algo confundido.- Tenía un juego importante. Iba a jugar como central. Se supone que era la temporada de la caza de talentos. Entrene durante meses y obtuve las mejores calificaciones. Me prepare al cien por ciento para ese día. Sin embargo, alguien le dijo al entrenador que me estaba dopando. Fue entonces que entraron a los cambiadores y sacaron todo lo que había en mi casillero... Habían metido sustancias que ni yo mismo conocía. Tendrías que haber visto la cara del entrenador. A pesar de que le dije que yo no lo hice no me creyó. Al final del día mandaron hacerme una prueba. Me negué rotundamente asiendo que me expulsaran de la universidad. Después recibí una llamada de mi padre pidiéndome que me la hiciera.- Minho suspiro.- A él no puedo negarle nada. Así que me la hice, pero no me quede a ver los resultados. En cuanto salí del hospital tome parte de mis cosas y escape hasta aquí.