Through the Sky. || K.TH

IX. 2

— ¿Hyeji?

— Necesitaba saber si esos rumores eran ciertos. —su mirada chocó con la mía y pude ver la furia en esta.

— ¿De qué hablas?

— Te he estado observando, andas mucho con ésta desde que rompiste conmigo, y qué curioso. —miró a su alrededor—. En este mismo lugar, eres un descarado Kim.

Miré a Taehyung y lucía un tanto desorientado, yo no sabía que decir acerca de este mal entendido con la ex-novia celosa.

— Oye, disculpa pero no es lo que crees. —traté de ayudar un poco rogando por no empeorarlo.

— Tu cállate, zorra.

— ¡Hyeji! —Taehyung frunció el ceño ante la palabra le miró mal. ¿Porqué mi corazón late tan fuerte?

— Si, vamos. Defiende a tu puta maldito mentiroso. —vocifero mientras se acercaba a él.

— No te he mentido Hyeji, que tú te dejes meter rumores en la cabeza no es cosa mía. —ella mordió fuertemente su labio inferior y apretó los puños.

Un silencio incómodo de unos largos segundos se formó hasta que su atención volvió a mí y empezó a avanzar.

— Todo es tu maldita culpa.

De repente solo le vi correr hacia mí haciéndome sobresaltar pero antes de que se me abalanzara encima Taehyung se metió cubriéndome y tomándole de los brazos.

— ¡Suéltame estúpido! —forcejeó con él hasta que la soltó—. ¿Por eso no venías a la escuela? Apuesto a que te ibas con esta perra por ahí.

— No Hyeji, cálmate, no sabes lo que estás diciendo.

— ¿Entonces por qué esta perra se queda callada? —Sí, ¿Porqué no decía nada?—. ¿Te comió la lengua la verdad, sabandija?

Iba a abrir la boca una vez reaccioné para devolverle unos cuantos insultos pero la prominente y enojada voz de Taehyung se hizo presente.

— ¡Hyeji, ¿cuál es tu maldito problema?! —ella al igual que yo se sobresaltó. Lo escuché suspirar para supongo que calmarse—. Terminamos, te dejé claro el porqué. No te dejé por nadie y lo que haga o deje de hacer ahora con mi vida es mi problema. Espero que te quede claro, así que por favor de ahora en adelante déjame en paz y métete en tus asuntos.

Se hizo a un lado y tomándome de la mano salió apresuradamente de allí, llevándome consigo y dejando detrás un grupo grande de chismosos acumulados junto a una ex-novia atónita.

¿Quién le diría a la yo invisible de meses atrás que justo ahora me encontraeía en esta situación?

—¿No...

— No, no están mis padres pasa. —dije sorprendiéndolo un poco, siempre que venía preguntaba si estaban.

Habíamos dicho que luego de clases quedaríamos para terminar la conversación a parte de que mencionó que necesitaba comentarme algo. Estoy curiosa y nerviosa, que buena liga de sentimientos.

— Linda combinación. —le dije al ver toda su ropa de azul, con su particular forma de usar la gorra al revés . Se miró y luego sonrió.

— ¿Gracias? Tengo buen sentido de la moda. —yo reí y rápidamente recordé los últimos acontecimientos haciendo desaparecer aquella sonrisa.

— Bien, puedes tomar asiento. —me miró unos cuantos segundos y luego asintió sentándose—. ¿Quieres algo de beber?

— No, no. Estoy bien Tania, solo quiero conversar. Necesito aclararte algo. —su voz tomó un tono serio y no me dejó más que sentarme para asentirle—. Quiero... quiero que olvides mi confesión y todo lo que ha pasado últimamente.

Sus palabras me tomaron desprevenida confundiéndome y de alguna manera asustándome igualmente.

— Verás, no lo pensé bien por el hecho de que me gustas pero no estoy en condiciones de tener una relación o algo por el estilo. Sé que no te pedí que fuéramos novios y que tampoco sé si te gusto, pero una cosa lleva a la otra, y sinceramente no estoy en condiciones.

— ¿Y qué tipo de situación es esa que no te deja ser feliz? —vi un ápice de sorpresa luego de lanzarle la pregunta.

— Es, es algo complicado. No puedo decirte. —bajó la mirada.

— ¿Por qué? -me animé a preguntar buscando su mirada. ¿Qué le pasa?

— Tania. Solo no puedo eso es todo, disculpa. —se puso de pie, yo repetí la acción un tanto exaltada, sintiendo una inexistente energía de valentía de la que normalmente carecía. No estoy procesando bien nada de esto.

— Taehyung, no te entiendo. ¿Qué me quieres decir con esto? —me puse delante de él bloqueándole el camino a la salida—. ¿Qué te sucede?

— No podemos, no podemos seguir con nada de esto. —miró a la izquierda tratando de encontrar algo más interesante para ver—. Siento llegar a tu vida de repente. —suspiró—. Lo he estado pensando bien y, llegué a tu vida volcando cosas a mi antojo. —volvió su mirada al piso mientras soltaba una pequeña risa nasal—. Necesito irme ahora.

— No, Taehyung escúchame. —tome sus brazos y lo detuve manteniendo mi lugar frente a él—. No sé qué te está pasando de repente pero no, no has volcado nada. Al contrario. Estoy agradecida de verdad y, y acerca de todo esto yo sí me siento igual que tú. ¿Sabes? Tenía miedo, miedo de estarme confundiendo pero ya sé que verdaderamente me gustas.

Sus ojos no se apartaron de los míos y me sorprendí cuando vi un extraño brillo en estos.
Me late el corazón a mil, tengo que decir que expresarle lo que siento me hizo sentir una de las mejores emociones pero, ¿por qué su comportamiento?

Sus lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas mientras negaba una y otra vez. A punto de llorar, lleve mis manos a su rostro para limpiarle las lágrimas, lo sentí tensarse un poco pero logré que se calmara.

Nos miramos durante un minuto que pareció eterno, sus bellos ojos llorosos, su hermosa nariz roja y sus labios me tenían embelesada, tanto así que no me di cuenta de en qué momento me había alzado para lograr el cometido de probar sus labios.

Los labios más suaves y cálidos que había sentido.