Esto es amor

Parte 6 Me encantas

Ma' que susto! – Le reclamo Juliana a su madre. – Nada solo era la señora Perlita... , estábamos hablando del pequeño préstamo que me hizo cuando necesitaba pagar la cuenta del hospital y esas cosas... – mintió la chica.

Aja...– Emitió Lupita no muy convencida.

Juliana le sonrió – Hay ya mejor vámonos a dormir – dijo tirando de su madre para que la siguiera hasta la recamara.

Pasaron tres días, en los que las chicas habían compartido solo algunos mensajes, Valentina no había podido visitar a Juliana pues debía ponerse al corriente en la universidad y Juliana se encontraba cuidando de Lupita que aun no se recuperaba del todo pero que estaba fascinada con la casa.

El teléfono de Juliana vibro, se encontraba en la sala de estar donde Panchito trataba de reparar una licuadora – Juliana, creo que tienes un mensaje a vibrado tu teléfono – Le informo el hombre.

Ah si, voy! – Anuncio la joven desde la cocina que se encontraba lavando los platos, se seco las manos y fue por el teléfono.

Lo tomo, "Te extraño" decía el mensaje enviado por Valentina, estaba abierto.

¿Lo leíste? – Le pregunto Juliana a Panchito extrañada con algo de nerviosismo en la voz.

No, no para nada, lo prometo – le aseguro Panchito.

Juliana había respondido el mensaje de la chica, pero no fue hasta en la tarde después de que Lupe se quedara dormida pues se había estado sintiéndose mal que pudo comunicarse con Valentina.

Juls! ¡Qué gusto escucharte! No sabes... – Escucho Juliana la voz de Valentina.

¿Qué pasa? ¿Todo bien? – Pregunto preocupada Juliana.

No...es la situación de Lucia con los narcos, no sabes hoy esos tipos mataron a un hombre de seguridad de la casa y dejaron su cuerpo aquí, ¡tengo miedo Juls esos tipos podrían entrar! – dijo angustiada Valentina.

Hey...oye tranquila – quiso tranquilizarla Juliana – Tu casa esta super vigilada y si eso sucedió seguro lo estará aun más, no tienes que estar asustada...– afirmo Juliana, la casa de los Carvajal estaba rodeada de seguridad confiaba en que sería casi imposible entrar. – Mmm...sabes me gustaría estar contigo ahora... – Le confeso – pero debo cuidar a mi mamá...enserio lo siento – Se disculpo.

Lo sé... esta bien – Entendió la ojiazul que se encontraba mirando por la ventana de su habitación no podía evitar la paranoia que le causaba lo sucedido.

Paso alrededor de 1 hr, había obscurecido ya, cuando Valentina fue informada por personal de la caseta de vigilancia que una amiga la buscaba.

¿Amiga? – Se pregunto desconcertada.

Sí su nombre es...– Alcanzo a escuchar que el hombre le pregunto el nombre – Juliana, es la señorita Juliana, ¿puede pasar? – pidió la autorización de la menor de los Carvajal.

Sí! – Contesto al instante – Ella siempre puede pasar de acuerdo – Le informo al hombre, que respondió afirmativamente ante la orden de la chica.

Valentina corrió a la puerta de la entrada, y abrió la pesada puerta Juliana ya se encontraba ahí se sonrieron la una a la otra.

Pasa – Le indico mientras cerraba con dificultad la enorme puerta a causa del fuerte aire.

Hace frió – dijo Juliana frotándose los brazos pues solo llevaba puesto un blusón verde de flores sobre una blusa de tirantes negra, no pensó que el clima era frió.

Ya sé – concordó Valentina sobre el frío, envolviendo a Juliana en un abrazo para darle calor – pero que haces aquí...digo bueno no es que no me encante que vinieras – balbuceo con una sonrisa boba Valentina.