capitulo 11 "sabado de fiesta"

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Estoy atónita y sorprendida, aún no lo creo y no sé qué pasó

—¿A qué se debió el beso?—noto tristeza y arrepentimiento en sus ojos

—lo siento Sam creo que me iré —se levanta y yo lo detengo con mi mano

—¿Por qué quieres irte ?—me mira sorprendido

—hice mal en besarte

¡Auch!

Esto dolió

—mmm—es lo único que puedo murmurar—esta bien—lo suelto y me regreso a la cama sin mirarlo y se va

Me siento algo decepcionada pero también feliz por qué me beso y eso no lo esperaba y otra vez los sentimientos vuelven a inundar mi mente, sentimientos por James y ese beso fue tan maravilloso siendo sincera, pero me desconcertó su actitud después, que me dejo agonizando y llena de preguntas que quería hacerle

Recuerdo que quede de salir con Sara así que me pongo zapatos y medio me peino, de repente es una llamada desconocida

—¿Hola?

—¿hablo con Samantha Zuluaga?

—si

le infórmanos que su auto ya está listo—por fin

—bien en unos minutos iré por el

Que felicidad, ya no tendré que pagar bus o a que se molesten mis extraños amigos

Pago taxi para que me lleve a dónde está mi auto y dentro al local donde me pasan las llaves y me dirigen hacia mi apreciado auto Chevrolet negro de cuatro puertas no tan grande

—esta en buen estado

—gracias—abordo mi auto sintiendo que he vuelto a nacer y me siento como en casa

*James*

No sé qué demonios hice, no tengo idea del por qué la tuve que besar, ¿por qué me dió ese arranque?, no me lo explico. golpeo el volante del auto, tengo que explicárselo

Después de un rato preparando lo que le diré, e llegado por fin a mí departamento y veo a mi madre sentada en el sofá

—hola madre—me da una sonrisa y está nerviosa, tiene unos enormes lentes oscuros puestos, que raro—¿pasa algo?—la miro extrañada cerrando la puerta y llendo hacia ella, pero se para y me abraza empezando a sollozar

Me separo de ella y le quitó los lentes, se tensa y puedo ver su ojo derecho morado

—¿Quien te hizo esto?—trato de no estallar en ira

—hijo por favor—lágrimas gruesas caen de sus ojos—no importa ya

—si importa—y salgo furioso de mi departamento en dirección hacia el

*Samantha*

—¿Que te beso?—asiento nerviosa—increíble—suelto una sonrisa tímida

—si—bajo la mirada recordando cuando él se fue muy confundido

—¿pasa algo que yo no sepa Samantha?

—el después se disculpó y al parecer se arrepintió de ese beso

—es un idiota—me río suavemente—cuando lo vea le partiré la cara—me río más fuerte y ella conmigo

Seguimos caminando de vuelta a su casa con varias bolsas de ropa, ya que había remodelado su armario

—estoy muy cansada—se tira de tope a la cama suspirando fuerte

—yo también—también me tiro—es mejor que ya no vayamos a esa fiesta—se sienta de sopetón y me mira incrédula

No Sé, Piénsalo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora