La vida de Blake es diferente a la de cualquier mujer de veintisiete años, es escritora de novelas cristianas y en sus tiempos libres fotografía paisajes, aparte de ser maestra de jóvenes en su congregación.
Sus libros de romance cristiano han hecho...
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@itsblakeduran Bueno hoy se nos casa nuestra amada hermana en Cristo @ayleenlanc 👏🎉🎊 y mis chicas y yo estamos listas 😎 me alegra tanto ser la fotógrafa de la boda 😍 prometo tomar buenas fotos, Leen 🙏
👥: @ciciciara @lanitamaimaine
❤ 20 me gusta 💭 5 comentarios
@ciciciara Aww quedó hermosa la foto que tomó el papá de Lanita 😍
@itsblakeduran Por supuesto señorita C, su papá es buen fotógrafo también 😎
@lanitamaimaine Vámonos ya o @ayleenlanc va a matarnos si llegamos tarde 😂😱
@itsblakeduran Como diga señorita L 👌
@ciciciara Ya rugiste 👌😎
Sonreí mientras veía los comentarios de Instagram al subir la foto, y era algo gracioso ya que estábamos todas reunidas en casa de Lana.
—Bueno, el auto está listo. –Avisó la morena comenzando a caminar hasta el vehículo.
Abandonamos el pórtico de la casa Maine y nos encaminamos hasta el Mercedez color plateado de Lana, tuvimos cuidado con los bordes de los vestidos ya que eran largos, y podíamos caernos como barriles.
Nada elegante.
Subimos al auto y nos colocamos los cinturones de seguridad, yo iba detrás mientras que Lana y Ciara iban delante.
—Oye Ci, ¿tu primo va a la boda también? –Preguntó la morena empezando a conducir el vehículo en dirección al templo.
Ciara asintió varias veces en respuesta.— Él me confirmó que iría, supongo que ya debe de estar allá.
No dije nada al respecto, habían pasado unos cuantos días y la verdad yo no hablaba mucho con Leo; todo era el típico «Dios te bendiga, hola y adiós», del resto nada más pasaba.
Y era más de mi parte que la suya, es que no deseaba involucrarme demasiado con un ser del género masculino.
En lo absoluto.
—Hemos llegado. –Avisé al ver la edificación del templo cuando Lana aparcó el auto.
—No me digas. –Ironizó la conductora sonriendo socarronamente a mi dirección.
Puse mis ojos en blanco y negué con mi cabeza entre risas, nos colocamos nuestros abrigos y fue entonces que emprendimos camino hacia la entrada del templo.
Estaba sutilmente decorado con arreglos florales, lazos y otras cosas más acorde a la ocasión. En el altar estaba un bien vestido Keith, junto a su amigo Clark y la dama de honor de Ayleen, Gwen.
Ya me moría por usar mi cámara y retratar cada momento.
—Por aquí. –Señaló Ciara nuestros asientos en uno de los bancos primarios.
Mi sorpresa fue ver que tendría que compartir lado con Leo, el cual ya se encontraba allí sentado luciendo increíblemente pulcro y muy arreglado, con aquel traje de gala hecho totalmente a su medida.
Al darse cuenta de nuestra presencia, giró su vista a nosotras y nos sonrió de forma educada.
—Dios les bendiga, llegaron a tiempo. –Expresó al saludarnos.
Ciera le dio un ósculo en la mejilla en modo de saludo.— Bueno tú igual, me sorprendes primito.
Y se rieron ante aquel chiste, fue entonces que la marcha nupcial fue reproducida por el grupo de alabanza.
La boda había iniciado.
Y por supuesto, mi cámara estaba preparada para perpetuar cada momento de la ceremonia.
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La ceremonia transcurrió exitosamente, los esposos Wallace-Lancaster eran sin duda preciosos juntos.
Y lo mejor es que tomé muy buenas fotos con mi cámara profesional.
Ahora estábamos en la recepción, para cenar todos y disfrutar de unas alabanzas muy buenas que tocaría el grupo de la iglesia.
El salón de fiestas estaba igualmente decorado con la temática de la boda, y habían muchos escenarios para tomar más fotos geniales.
Fui directo a la mesa de bocadillos, puesto que vi unas pequeñas tartas estilo tiramisú de chocolate, y necesitaba probar una de esas o si no me arrepentiría toda la vida.
—Veo que te gusta el dulce. –Una voz grave se escuchó cerca mío, haciendo que me girara con la pequeña tarta dentro de mi boca.
Tragué grueso al ver que Leo Parnell estaba junto a mí.
Eso era bastante incómodo, y mi intuición me estaba diciendo que era mejor huir cuanto antes.
—Eh... sí, me gusta. –Murmuré desviando la mirada hacia los bocadillos, para no verlo a él.– ¿qué te ha... parecido la boda?
Lo vi encogerse de hombros con sus manos dentro de los bolsillos de sus jeans, sin dejar su sonrisa Colgate.— Ha sido bonita, sí, aunque creo que en la mía seré más expresivo con eso.
Ugh, no quería oír más del tema.
Una cosa era asistir y otra muy distinta era hablarlo, y en lo personal no me gustaba hablar del tema matrimonial.
—Supongo... –Respondí sin saber qué mas decirle, no había nada más.
Miramos a la pareja tener su vals de esposos, y sonreí ante lo felices que se veían juntos y el amor que se profesaban hasta en sus miradas.
Me gustaba mucho el romance, pero no en mi vida.
Había sufrido gracias a él.
Y no pensaba pasar por eso de nuevo.
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Ay Blake 😂 yo que tú no diria eso 😏 comenten y voten! 🙏
