Capítulo Vll: "Grandísimo idiota"

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Calipso

-¡¿Qué?!-Chillo de emoción Sarah saltando sobre la cama-¿Como que mister guapo tiene un hermano gemelo?

-Y es un grandísimo idiota -exclame.

-Sabes que me gustan los grandísimos idiotas. ¿Me conseguirías una cita con él?-voltee a mirarla.

-¿En serio, Sarah? No sales de una ¿Y quieres entrar a otra?

-No entendí lo que dijiste.

-¿Cuándo vas a arreglar el problema en el que me metiste?

-¡Pronto! Solo estoy dejando que estés más cerquita con el profesor de teatro. ¡tan rápido lo llevaste a nuestra casa! eres peor que yo.

-Cállate, que Margot te explico todo-refunfuñe levantándome del escritorio. Me dirigí al baño a tomar una ducha.

-¿Y qué crees que pensé yo al verlo sentado en nuestra cocina desayunando un sábado por la mañana?

-Tus vulgaridades, claramente. Lo mismo que pensó el de ti al verte llegar un sábado por la mañana con ropa del día anterior.

-Eres una perra, por eso te amo-dice entrando al baño y me da un abrazo cuando ya me encuentro en la regadera desnuda.

-¡Sarah!

*****

Empujé la puerta del teatro con una mano mientras que con la otra, sostenía una charola con dos cafés clásicos para el profesor y para mí. Afortunadamente él ya estaba dentro tocando el piano. Al verme caminar hacia él, una enorme sonrisa se asoma por su rostro. Se levanta y baja del escenario con un salto.

-¿A qué debo esto?-pregunta sin borrar su sonrisa.

-Es mi forma de agradecerle la molestia de llevar mi libreta hasta mi clase. Me salvo de reprobar-volvió a sonreír.

-Fue un placer, pues eres parte del equipo-sonreí y asentí levemente.

-Es clásico, espero te guste.

-Es el único que tomo, gracias, Calipso-agradeció y tomo uno de la bandeja. Dio un sorbo sin apartar su mirada de mí y lo saboreo exquisitamente.

-Delicioso-externó. No tuvimos más oportunidad de hablar, los chicos llegaron muy puntuales a las audiciones, por lo que recurrimos a tomar haciendo en la tercera fila para ver las presentaciones.

Durante la siguiente hora, cada uno de los chicos pasó y cantó una melodía. Rami me pidió que hiciera anotaciones y pusiera atención, ya que quería que tomáramos la decisión ambos. Todos habían hecho un trabajo excelente, y era muy difícil decidir quién sería la protagonista, así que le pregunte al profesor, las características de los personajes para ayudarlo mejor con su elección.

-Amy es la protagonista. Es una niña apasionada, muy solidaria. Es huérfana y vive con su abuelo. Desea cantar, quiere hacerlo pero su abuelo se lo prohíbe, en cambio la pone a trabajar. Entonces conoce a Manson, un chico vivaz, extrovertido, alegre que la impulsa a cumplir su sueño. Y cuando lo hacen, se enamoran-explicó Rami con tanta pasión. Se notaba que amaba su trabajo. Lo disfrutaba en serio. A mi aún me costaba trabajo asimilar porque les gustaba tomar el papel de otras personas por un poco de atención. No lo comprendo. Pero no dije nada.

Le sugerí a Rami que lo pensáramos el resto de la tarde y nos notificáramos esta noche cual era nuestra opinión. Intercambiamos números por primera vez y quedamos en escribirnos.

De regreso al edificio para entrar a mis clases habituales, notaba algo extraño en todos. Me miraban al pasar mientras se intercambiaban comentarios por lo bajo. Y de la nada, una chica rubia y alta obstruyo mi paso y me miró fijamente.

-¿Qué tal te lo hizo el profesor de ciencias? Seguro que bien, ya que ahora vas por el de teatro.

Tu nombre está en las estrellas 《Rami Malek》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora