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Nunca tuve problemas en cuanto a demostrar mi amor hacia los demás, sobre todo, hacia mis amigos. A pesar, de que puedo parecer muy tímida y poco expresiva, siempre sé como demostrar mi cariño hacia las personas que me importan. Pero, por algún motivo, se me hace tan difícil demostrar mis sentimientos por Momo.

- ¡Dahyun~ah! - Me llamó Sana unnie, mientras corría hasta mí. Sus brazos envolvieron mi cintura, mientras sus labios se dirigieron hasta mi mejilla derecha. Fruncí el ceño, mientras dejaba que ella continuara con su muestra de afecto. Cuando sus labios se alejaron de mi mejilla, mi brazo derecho se fue a su cintura.

- ¿Qué pasa unnie? - Pregunté. Ella sonrió, sin contestar mi pregunta.

- Sólo quiero decirte que te quiero - dijo dulcemente, mientras sus labios volvían a mi mejilla. Le sonreí mientras continuaba en sus brazos.

- ¿Qué están haciendo? - Preguntó una tercera voz. Aparté mi mirada de Sana, para poder ver a la dueña de la voz. Chaeyoung, estaba viendo mi escena con Sana, con el ceño fruncido. Mi sonrisa cambió, en cuanto miré a la persona que estaba junto a Chaeyoung.

- Momo...- Susuré mientras sus ojos me miraban. Nunca supe porque ella me miraba de esa forma. Su mirada siempre me hacía sentir expuesta, como si sus ojos pudieran ver más allá, como si conociera todos mis secretos.

- Momo y yo sólo queríamos descansar un poco, pero, encontramos una mala escena romántica en nuestra sala de espera - gruñó Chaeyoung, mientras se adentraba más en la sala junto a Momo.

- ¿Una mala escena? - Cuestionó Sana con una voz de queja, sus brazos me soltaron y caminó hasta estar más cerca de las recién llegadas -. Dahyun y yo somos mejor...

- Unnie, realmente sólo quiero dormir - interrumpió Chaeyoung, cortando la explicación de Sana.

- Tan insolente como siempre - dijo Sana mientras fruncía los labios. Chaeyoung rió, dejando a la vista sus lindos hoyuelos.

Momo y Chaeyoung se sentaron en uno de los sillones de la sala, Sana estaba frente a ellas con los brazos cruzados y yo, estaba atrás de Sana.

- Ella sólo esta cansada - la justificó Momo. Chaeyoung ignoró a todas, cerrando los ojos y apoyando su cabeza en el hombro derecho de Momo.

- Lo sé, todas lo estamos - dijo Sana, su voz había sonado más calmada. Caminó hasta Chaeyoung, y dejó un suave beso en la frente de la menor. A pesar de que Chaeyoung tenía los ojos cerrados, pude ver como sonrió.

Me senté a lado de Momo, y ella me miró.
- ¿Quieres dormir también? - Preguntó, mientras su mano izquierda acariciaba suavemente mi barbilla y mejilla.

- Si - me límite a contestar. Ella sonrió. Esa sonrisa que me hacía sentir feliz, la que me contagiaba su alegría.

- Tengo otro hombro, sabes - dijo y ofreció en la misma frase. Sonreí sin decirle nada -. Puedes usarlo si quieres.

Sin poder evitarlo, reí. Porque, a pesar, de que ella no fuera la más graciosa, siempre estaba feliz a su lado. Su encantadora voz, junto con su aegyo me hacían desear cuidar de ella tanto como pudiera, pero, no podía demostrárselo. No porque no quisiera hacerlo, era porque no sabía cómo hacerlo.

Sin decirle nada, apoye mi cabeza en su hombro mientras cerraba los ojos. Comencé a quedarme dormida, mientras escuchaba a lo lejos las voces de Momo y Sana.

[...]

- Dahyun - susurró una linda voz. Mis ojos se abrieron lentamente y con mucha dificultad -. Lo siento, pero, tenemos que volver a la sala de ensayo.

Really Really ↠DahmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora