Abriendo el Corazón a Una Doncella

Sueño de una Pasión

Hola mi amor:
Quiero contarte una de mis fantasías contigo es que veía con tu traje de Mujer Maravilla puesto mi amor y habías venido a mi humilde casa. Recuerdo que tenías tú traje de Mujer Maravilla que logré hacerlo para tí.

Luego llegaste a mi humilde casa y yo te ví y tenía una gran felicidad al verte y me ponía de rodillas ante tí. Llegaste a mi humilde casa. Te ví y tenía una gran felicidad al verte y me ponía de rodillas ante tí. Me sorprendí y me quedé maravillado con lo maravilloso que eres mi tesoro mío. Tomé tu mano y lo besaba y te decía: "ohhhh mi amada has venido a mí a verme a mi humilde casa" Preparé mi mesa y te preparé algo humilde para cenar porque ese momento no traía dinero para prepararte algo especial para tí. En esa noche había preparado una humilde sopa para ambos. Lo bueno es que siempre aceptas las cosas humildes que preparo para tí, aunque sean poquísimos. Me acercaste a tí y luego puse mis manos en tu cintura, luego me empezabas a besarme. Y me decías: "vine por tí porque te amo muchísimo mi negrito hermoso. Y tengo ganas de estar a tu lado y tengo ganas de sentirte" Luego comentamos a besarnos apasionadamente. Primero cerré bien la puerta de mi casa. Luego empezábamos a besarnos. Mientras nos besabamos, rodeabas tus brazos en mi cuello. Y tenía mis manos en tu cintura y me decías: "quiero mostrarte algo maravilloso" 😏
Tomabas mis manos en tu espalda. Y bajaba lentamente la cremallera de tu traje. Bajaba lentamente el cierre de tu disfraz.

Luego te lo quitaba y colocaba tu disfraz a un lado. Tu parte de arriba estabas desnuda. Tu cuerpo estaba radiante y maravilloso. Y me decías: "todo esto es solamente tuyo mi amor. Eres el único que merece todo de mí"

Sentíamos nuestros apasionados besos con mucha pasión y cada segundo encendía nuestro fuego de la pasión y ambos disfrutábamos de sentirnos hasta caer juntos a mi humilde cama Luego tú enferma de amor por mí, no parabas de besarme. Tú tomabas mis manos y te quitaba tu minifalda. Lo maravilloso es que no traías ropa interior. Empezábamos a besarnos y a sentirnos que estábamos en el cielo. Luego nos recostamos en mi cama. Y mientras nos besabamos, mis manos recorrían tu maravilloso cuerpo de Diosa. Me decías: "soy toda tuya mi cielo".
Hacíamos el amor en mi humilde cama. Sentía que mis manos subían lentamente por tu cuerpo.  Cerrando mis ojos aún recuerdo esa sensación al tocar cada segundo tu maravillosa piel. Luego tomabas mis manos y las ponías en tus pechos maravillosos. Tocaba suavemente tus pechos rosados. Eran muy suaves y deliciosos. Tus pezones rosados estaban duritos y ambos nos excitabamos cuando tocaba tus pechos rosados. Después de nuestro love, estábamos descansando en mi cama. Ambos sin ropa. Nos mirábamos tú y yo con mucho amor. Estamos muy enamorados y felices de vernos y sentirnos por primera vez.