Only you™ [Rhaast x Kayn]

CAPITULO XIV

Este capitulo tiene contenido +18, es tu decisión si deseas leerlo o no. Sin decir más disfruten el capitulo~❤

Kayn~ [POV]

—Rhaast... pa-para —Coloqué una mano en su pecho tratando de apartarlo sin éxito alguno.

—¿Tienes miedo? Ya te dije que seré suave —Rhaast me miró con un poco de compasión en su rostro, no sé exactamente cuál era mi expresión en este preciso momento, pero sé que no le transmitía seguridad precisamente porque estaba tratando de ocultar mi rostro.

—Kayn, mírame.

La mano de Rhaast giró levemente mi cabeza, no de una manera brusca.

—Sé que tienes algo de miedo porque es una experiencia nueva para ti, pero necesito que deposites toda tu confianza en mí —Ahora Rhaast tomó mi mano para luego besarla —Te haré sentir un placer que nunca antes habías imaginado poder sentir.

¿Estaba tenso? Si, un poco, a decir verdad, ni yo sabía el por qué, no le tenía miedo a el dolor ¿Por qué tenerle miedo al placer? No entendía.

—Está bien, confío en ti.

Con esas palabras Rhaast sonrió de lado y siguió con lo que estaba haciendo. De una manera casi tortuosa mordía mi cuello, incliné mi cabeza un poco para darle más libertad, sus mordiscos no eran tan rudos más bien suaves y delicados, muy raro viniendo de él, pero creo que se está tomando muy en serio lo de ser suave conmigo.

Se sentía bien, no lo podía negar, me agradaba el toque de las manos toscas de Rhaast haciendo contacto con mi piel, su mano recorría con lentitud todo mi torso desnudo como queriendo memorizar cada parte con detenido cuidado. Poco a poco me sentía más relajado y decidido a dejarme llevar por el momento.

Aquí y ahora solo existimos Rhaast y yo, en cada rincón de mis pensamientos se encontraba Rhaast y solo Rhaast, lo que pasará después de esto no me importaba en lo absoluto.

¿Cómo llegamos aquí? Extrañamente Rhaast sabía de la ubicación de esta cabaña abandonada en los alrededores de Jonia y digo extrañamente porque empiezo a dudar que encontrarse esta cabaña sea una coincidencia y que tenía planeado desde un principio traerme aquí.

Sé que es todo un pervertido.

Mi pantalón estaba siendo retirado por el Darkin mientras me besaba de una manera apasionada con un poco de lujuria, creo que andar solo en pantalones sin nada abajo le facilitaba el trabajo, se posicionó entre mis piernas para estar más cómodo.

Estaba completamente desnudo y mi respiración era agitada, las manos de Rhaast que momentos antes estaban en mis caderas, ahora se dirigieron a mis glúteos, una sensación extraña invadió mi pecho y un sonrojo se apreciaba en mi rostro.

—Tienes un buen trasero.

—Cállate —Sentía como lo estrujaba y no podía evitar dejar salir leves suspiros.

Cerré mis ojos por un momento hasta que sentí algo húmedo pasar por mis pezones, la lengua de Rhaast hacía una serie de círculos alrededor de estos para luego succionarlos y en el proceso halarlos un poco. Pequeñas arcadas y soniditos que salían sin mi permiso se hicieron presente.

—¡Vaya! Que sensible — Rhaast estaba jugando con mis pezones al punto que estos tomaron un tono rojizo.

Sus manos que se mantenían en mi trasero ahora se dirigieron con lentitud hacia mi entrepierna, por instinto cerré fuertemente mis piernas queriendo ocultar ese lugar, pero Rhaast evitaba que las cerrara por completo. Empezó a mover su mano que se encontraba alrededor de mi falo de una manera lenta y tortuosa, mordí mis labios con fuerza, quería que lo moviera más rápido pero mi sorpresa fue cuando introdujo mi miembro dentro de su boca.