Only you™ [Rhaast x Kayn]

CAPITULO XVII

Kayn~ [POV]

Aquí vamos.

Abrí la puerta con lentitud, la habitación estaba sumergida en una oscuridad total incluso aunque afuera estuviese tan iluminado.

Estaba tenso, no lo voy a negar. La imponente figura de mi maestro se veía al fondo.

—Pasa Kayn — un escalofrío recorrió todo mi cuerpo.

Suspiré hondo y me adentré con cuidado de no chocar con algo o de caerme. En cada paso mi respiración se hacía más agitada, lo que vaya a pasar es un completo misterio. Sumergido en las miles de posibilidades en las que soy abandonado, asesinado o incluso humillado por el maestro, hicieron que olvidaran a una pequeña presencia situada atrás mío.

—Ya nos tienes aquí, habla rápido que tengo prisa — dijo Rhaast con un tono de aburrimiento.

—¿Por qué tanta prisa Darkin? — el maestro Zed se giró mirándonos a ambos.

Algo que admiraba del maestro era que su simple presencia emanaba poder y grandeza, algo que al verlo te la pensarías dos veces antes de enfrentarte a alguien como él.

Pero por otro lado está Rhaast, su presencia es abrumadora, escalofriante y terrorífica, al verlo ni siquiera pensarías y huirías por instinto.

Y ahí estaba yo entre esos dos seres tan diferentes pero iguales a la vez, me sentía insignificante, ni siquiera podía hablar cuando el maestro y Rhaast empezaron a intercambiar palabras.

—¿Te importa? —preguntó Rhaast con sarcasmo —tengo que hacer algo con Kayn y tu estorbas.

Quería evitar a toda costa que ellos dos se encontrarán por el hecho de que presiento que nada bueno va a salir de esto.

—Kayn no tiene nada que hacer con un demonio como tú, no sé cómo conseguiste un cuerpo sin necesidad del de mi pupilo, pero ahora viendo las posibilidades creo que encerrarte ahora es muy fácil sin la necesidad de condenarlo contigo.

—Veo que todos aquí quieren encerrarme, que divertido.

Si una pelea se desata aquí, uno de los dos va a morir.

Y Rhaast es inmortal.

No quiero eso.

—¿Y qué pasaría si yo los asesino antes de que tengan alguna posibilidad de poder tocarme? Puedo asesinar todo Jonia sin ningún problema ¿quieres comprobarlo? — Cada vez más el ambiente se volvía más pesado.

—Sé que eres un ser poderoso, pero, aunque no lo creas, mi misión es mantener el orden en Jonia a mi manera y si tengo que pelear contra ti entonces lo haré.

Una guerra de miradas inició entre los dos, el primero que diera un paso en falso definiría el rumbo de la pelea.

Pero no permitiré que esta batalla inicie.

—Maestro, quisiera hablar de algo con usted —dije apresuradamente —realmente el que esté aquí es gracias a Rhaast, el... ¿me devolvió mi cuerpo? Realmente ni siquiera yo entiendo que pasó, pero él me salvó.

Hablé lo más rápido que pude.

—No creo que iniciar una pelea sea lo más conveniente en este momento, es decir, no estoy diciendo que usted perdería, pero... — creo que lo estaba arruinando, pero no podía parar de hablar —creo que deberíamos pensar mejor las cosas ¿no cree?

Silencio, se formó de repente un silencio muy inquietante.

—¿Maestro? —pregunté preocupado.