emotionless | joshler

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/tyler's pov/

"¿así que sólo fueron a un café?"

"si, ryan, por décimo cuarta vez"

el chico de cabello largo se encorvaba sobre su asiento para poder hablar conmigo sin que la maestra de sociología llamara nuestra atención.

mientras la longeva mujer explicaba, tomé un sorbo de agua al sentir mi garganta seca luego de cincuenta minutos en aquella aburrida clase.

"¿y te mostró sus tatuajes?"

escupí todo fuera de mi boca, llamando la atención de la clase.

"no, ryan" siseé empezando a sonrojarme.

"¿tyler, todo bien?"

la maestra detuvo la explicación para dirigirse a mí, aún con mi rostro lleno de vergüenza logré asentir. ella como si nada regresó a escribir en la pizarra.

suspiré frustrado, ryan riendo a mi lado.

"eres adorable"

"n-no, es sólo que tú eres muy estúpido"

dimos la charla por acabada y ambos continuamos escribiendo en nuestras respectivos cuadernos.

no evité preguntarme, ¿por qué siquiera me había puesto nervioso el comentario de mi amigo? digo, es muy normal salir con un compañero de clase a un café, ¿no?

[...]

al finalizar las clases, nos dirigimos con ryan a nuestros casilleros, él tenía práctica con el club de música por la tarde.

él parecía a punto de decir algo pero se detuvo, rodé los ojos y le hice un ademán con la mano indicándole que podía preguntar lo que quería.

"¿irás a casa de josh?"

me sonrojé.

"n-no lo sé, no creo" mordí mi labio.

"¿tan detestable es?"

empezamos a caminar por el pasillo, fuera de la escuela.

"te equivocas, él es muy agradable"

"no es lo que dice jenna" lo miré incrédulo "ignoremos que dije eso, pasar tiempo con ella me ha quemado más neuronas de las que puedo producir, créeme que ese proyecto terminará siendo el noventa por ciento con su nombre y con suerte lo que resta lo que la señorita me encargo de decidir que va en el reporte no borre de todo lo que he hecho hasta ahora"

le dí una mirada con pena, trabajar con jenna black sonaba a un infierno.

nos despedimos para partir cada quien a su casa, no sin antes que ryan me haya hecho prometer que lo mantuviera informado sobre todo lo que sucediera con josh.

a eso de las dos de la tarde, luego de almuerzo, recibí un mensaje.

número desconocido:

hola :)

me quedé cinco minutos pensando en quien podría ser, sin éxito alguno decidí responderle.