Capítulo 19

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_ Estupendo. - Sung He corrió a mi alcanze. - Estubiste genial. - En su mano tenía una manzana encaramelada que seguro lo compró Dae Young.

"Si gritar como descontrolada se refiere a genial, supongo que si."

_ Se hace muy tarde. Será mejor irmos. - Dae Young miró el reloj plateado de mano muy preocupada.

_ Okey. - Jin anunció.

Durante ese trance de horas, la había pasado de lo más genial con el grupo de amigos de Jungkook, descubrí como era un centro comercial, que era REALIDAD VIRTUAL, como se hacían las animaciones en 3D, que era el pago en efectivo y el vértigo. Cosas que ningún libro pueda explicar mejor que la experiencia propia.

Uno tras uno se desintegró el grupo, todos preparados a descanzar en la disposición de sus sábanas esperando no olvidar lo vivido de hoy.

Hoy Sábado de una fecha que no recuerdo en los helados brazos del invierno. Nos dirigiamos a casa, claro, sin antes de dejar a Jungkook a la suya. Gracias a la falta de movilidad, Jimin como guía decidió tomar uno de sus atajos, que casualmente pasaba por el condominio del joven de sonrisa hermosa y ojos esperanzados.

_ Muchas gracias por su compañía. - Sonrió el antes nombrado.

_ No te preocupes, amigo. - Jimin le dió unas palmaditas en la espalda,

_ Nos vemos, Jungkook. - Sung He pronunció muy débilmente, puesto que el sueño la consumía y aprovechó ese momento para ser llevada a casa en la espalda de su hermano.

Antes de que dijera mis palabras de despedida. Una camioneta ploma de marca desconocida por mi, entró al establecimiento y la misma hermosa joven de aquel día descenció de ella.

"¿Cuántos años tiene? Debe ser mayor que Jungkook para tener licencia de conducir, ¿18 o 19 años, supongo?"

El pobre soñador se quedó atónito sin decir  palabras, más que bajar la cabeza y susurrarme... "No te vallas" su voz quebradiza invadió cada rincón de mi.

"¿Ahora que hago?"

_ Jimin... puedes adelantarte, tengo... Un asunto importante que atender con Jungkook, te veré en casa. - Hablé como si Jimin fuese mi... o algo parecido.

El receptor nombrado no articuló palabras más que despedirse e irse con Sung He en la espalda, su mirada distanciada me hizo sentir que había dicho algo malo.

"No tiene nada de malo hacer mi trabajo."

_ Gracias. - Dijo.

Yo debería agradecerle, pues no soportaría caminar varias cuadras con este frío al lado de el raro de Jimin.

Negué con la cabeza.

_ No, descuida.

El hermanastro, novio de la hermosa chica rompe corazones, descendió por las escaleras y abrazó a su prometido. De pronto, se dió cuenta de nuestra presencia en la entrada, se acercó a nosotros dándonos una cálida bienvenida en este día de invierno.

_ Es muy raro que Kookie aparezca con una chica, mayormente trae a sus amigos, hasta llegué a pensar que era...

_ ¡Jeong Hyeon! - Levantó la voz Jungkook, con la vergüenza desvordada y las mejillas rojas cual tomate.

Me hallaba en una ratonera sin salida, me había sumergido a los más profundo de la boca del lobo donde no había escapatoria, y el terremoto de preguntas con chistes malísimos inundaban mi bote de calma.

_ ¿Qué hay entre ustedes dos? - Dijo la mujer imnombrable para Jungkook, dejando la pequeña tetera en la cosina y llevando la taza de infusión de manzanilla en la pequeña mesa de la sala, que Jeong Hyeon le había ordenado para mi.

💋ANGEL KISS 💕 BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora