Capítulo 12

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Subí al escenario, abracé a Carlos y comenzó la canción, era una canción que tanto me gustaba, disfrutaba cantarla junto a él, y hoy la cantaba frente a más personas.

Carlos: Me cansé de ser el pasajero de tus labios, turista clandestino de tus sueños, de amarte donde nadie puede ver.
Ella: Quiero ser, el sol que de calor a tus mañanas, el nuevo residente de tu alma, el huésped permanente de tu piel...

Terminamos de cantar, la gente aplaudió, en ese momento fui muy feliz, compartir esos momentos con Carlos, ver cómo va creciendo me llena de emoción.

Saúl: Cantas muy bien
Ella: Muchas gracias, es la primera vez que lo hago frente a tanta gente
Saúl: Deberías dedicarte a esto
Ella: No creo, por mucho que ame la música, prefiero escucharla que cantarla, y quiero apoyarlos
Saúl: Son buenos, lo admito, tienen talento y sé que llegarán lejos

El evento terminó, esperamos a Luis y Carlos a que guardaran las cosas, estaba hablando con Saúl cuando se acerca Luis con nosotros.

Luis: Ella, me haces un favor
Ella: Si, ¿cuál?
Luis: Te puedes llevar a Carlos
Ella: Si claro pero, ¿por qué me lo pides?
Fernanda: Porque vamos a salir -dijo acercándose-
Ella: ¿Qué? ¿Estoy escuchando bien?
Fernanda: Sí, Luis ya me dijo todo, y creo que ya es momento de darle una oportunidad
Ella: Pensé que nunca llegaría este momento, que se diviertan.

Regresamos a mi casa, Saúl y Yeisson se quedaron varias horas ahí, Carlos no tenía de otra, Luis se había quedado con las llaves de la casa. Pusimos una película, fui a hacer palomitas para verla, Saúl me fue a ayudar y Carlos y Yeisson fueron a comprar algo para tomar.

Saúl: Ella, sobre lo que me preguntaste hace rato
Ella: ¿Lo de enamorarse?
Saúl: Sí, Ella, si es posible enamorarse en poco tiempo, y llámame loco, pero yo me enamoré de ti en unas horas, me enamoré de ti, me enamoré de tu risa, me enamoré de la forma como me siento cuando estoy contigo, me enamoré de tu sonrisa, de tu forma de ser.

Todo lo que decía hacía que quisiera llorar, me hacía querer abrazarlo y nunca soltarlo.

Ella: Saúl, no sé que decirte
Saúl: No quiero que digas nada, sólo te lo quería decir
Ella: Quiero enseñarte algo

Subí a mi habitación y tomé mi ukelele, bajé y nos fuimos a la sala, comencé a tocar.
Narró Ella
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Narra Saúl
No sé de donde saqué el valor para decirle todo eso, Ella bajó con un ukelele, me llevó a la sala y comenzó a tocar una canción que me gustó mucho.

Ella: Te vi solo una vez y suficiente fue para sentirme sola en un mundo cruel, lo pude comprender cuando pasaba el mes, tu rostro no logré desaparecer. Delirio por sentir tu piel, insomnio sin tomar café, no pido un atardecer, lo único que quiero es volverte a ver.

Terminó de cantar, Carlos y Yeisson habían llegado y escucharon parte de la canción.

Carlos: Es la primera vez que la escucho tocarlo
Saúl: ¿Cómo?
Ella: Siempre toco cuando estoy sola, nadie me había escuchado, al igual que hoy fue la primera vez que canté en público
Carlos: Exacto, Ella siempre ha sido muy reservada en la música, siempre le he dicho que tiene un talento que debe ser descubierto, pero siempre saca pretextos
Yeisson: Deberías intentarlo
Ella: Agradezcan que ya me escucharon tocar esto -dijo levantando el ukelele-
Carlos: Bueno, ¿ya vemos la película?
Ella: Sólo deja subo el ukelele
Saúl: Ella, ¿tienes un cargador?
Ella: Sí, ven para dartelo

Desde que te conocí.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora