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Narrador:

[...] 5:30 am, suena la alarma en casa de Álex [...]

-Bosteza- Ya es hora? -Se estira un poco- No tengo ganas de ir, pero debo hacerlo.

Me levanté para cumplir mi rutina diaria y cuando ya tenía todo listo, bajé a la sala donde estaba Rocky durmiendo tranquilamente. Busqué un plato para dejarle la comida puesta y un periódico para hacer sus necesidades.

Recogí todas mis cosas y subí a mi auto luego de abrir el garaje. Y después de cerrarlo nuevamente, partí rumbo al trabajo. Cómo me imaginaba, llegué a buena hora.

Vero estaba en la recepción con una falsa sonrisa y solo levanté la mano para dar un leve saludo y seguí caminando como si nada. Llegué a mi oficina y dejé todo allí, para luego dirigirme a la de Frank, quien me recibió con una sonrisa.

-Buenos días Álex!

-Buenos días -Respondió con una sonrisa de lado- Eh... Podrías explicarme por fin? -Se rasca la nuca acercándose al escritorio de Frank-

-Álex... Yo también he querido sincerarme, al igual que Guille y Samuel.

-S-sincerarte? -Preguntó un poco nervioso y sonrojado-

-Me encantas demasiado Álex.

Frank me miraba y mordió levemente su labio inferior sonriendo, mientras yo estaba hundido en una vergüenza total gracias a mi sonrojo hijo de puta.

-F-frank... Y-yo..

-Se qué tal vez no me aceptes, pero debo admitir que te quiero para mí. Juro protegerte y amarte hasta que muera, por más que trates de alejarte de mi, no te dejaré solo.

Llevé una mano a mi boca para cubrirla, no sabía exactamente lo que sentía. Era algo como nervios, al mismo tiempo me sentía tan enamorado de cada una de sus palabras.

-Tal vez sea muy pronto decirte todo esto por qué no tenemos taaanto tiempo de conocernos, pero la química y el amor no nacen con tiempo.

-Frank... No sé qué decir, yo... Tu también me gustas demasiado.

Cubrí mi cara con ambas manos, la vergüenza me estaba comiendo vivo. Sentí una leve risa de parte de Frank y sus pasos llegaron frente a mi, tanto que solo podía sentir su respiración chocar contra mis manos.

Narra Frank:

Esta escena era la más tierna y conmovedora que existe en el mundo. Ver cómo Álex tapaba su cara avergonzado y como respiraba un poco nervioso lo hacían ver de lo más tierno y lindo. No me canso de decirlo, es una completa monada.

Tomé levemente las muñecas de Álex mientras él seguía rojo y se tapaba la cara con más fuerza. Reí un poco por su acción y destapé su cara, solo podía sonreír cómo el idiota enamorado que soy y entrelacé mis manos con las de él para pegar su frente con la mía.

Esos ojitos negros me tenían hipnotizado, y su piel blanca cubierta por una capa de gran sonrojo me enloquecía. Me fascinaba saber que yo causaba eso en Álex, es algo que simplemente disfruto recordar.

-Se que no es nada especial si lo hago de esta forma, pero... ¿Quieres ser mi novio?

Álex quedó pensativo un rato, pero cuando pensé que se iría, dió una sonrisita.

Enamorado de mi jefe (Staxxby)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora