Capitulo 41

0 1 0
                                    

                                                           Denis

Me quedo callado. Quiero protestar, pero se que mi madre es capaz de todo.

-Así me gusta hijo.-se aleja de Abril para acercarse a mi de nuevo.
-Porque haces esto?.-cierro los ojos para no tener que mirar su cara.
-Dinero. Los 8 años que he pasado en la cárcel me han servido para pensar y... Si no tienes dinero, no eres nadie.

Ahora me voy dando cuenta de todo. No salio de la cárcel porque cumpliera su condena. Se escapó. Y me mintió.

-Como escapaste?. - los golpes detrás de la puerta se detienen.
-Hijo, no me escape. Me sacaron.Enzo necesitaba gente para su plan. Y que mejor gente que las personas de la cárcel. Delincuentes que hacen lo que sea con tal de dinero. Yo me uni a su causa sin pensármelo. Ya nadie me importaba excepto el dinero. No te ofendas hijo. No sientas nada por mi porque yo no lo hago por ti.
-Eso no responde a mi pregunta.-sigo con los ojos cerrados imaginando lo que me cuenta proyectarse en la oscuridad.
-Gasolina. Fuego. Son las dos palabras clave. Enzo lo planeo durante 2 años.
Nos dijo que nos sacaría a todos. Se hacía pasar por un policía y nos daba información de las cosas que debíamos hacer. Nunca nos dijo como escapar del incendio. Asique sabíamos poco. Pero un día el fuego comenzó y la cárcel ardió. Sólo quedamos unos pocos vivos. Los que encontramos la manera de escapar por nuestra cuenta.-el cuchillo no se separa de mi garganta en ningún momento mientras mi madre sigue hablando.-no sabes lo satisfactorio que era oír los gritos de la gente quemándose.
-Estas loca.-abro los ojos y la veo riéndose.
-Supongo que se hereda. El caso es que Enzo nos estaba esperando.A los sobrevivientes. Nos dijo lo que debíamos hacer y nos ofrecía una cantidad de dinero. Nadie hacía preguntas. Y ahora entiendo lo que quería hacer y... Creo que no soy la única loca.

Intento procesar toda esa información.

-Quien es Enzo?Y que ha hecho?. - no he oído ese nombre en mi vida.
-Oh hijo,no hagas tantas preguntas.Todo se sabrá a su debido tiempo. Pero ya que te he contado tantas cosas... No te puedo dejar con vida.

Noto como el filo del cuchillo aprieta más en mi garganta y la sangre comienza a resbalar.

Éramos Diferentes Donde viven las historias. Descúbrelo ahora